5° fecha: ¿justo este torneo, Colón?
Por Matías Fabrizio
Durante los últimos 15 años, se han repetido en varias oportunidades frases como “ojo con Colón”, “qué equipo armó Colón”, “guarda que Colón se reforzó con tal”. Y prácticamente nunca pasó la 5ta o 6ta fecha cumpliendo las promesas de pelear. En este semestre el Sabalero se juega la permanencia más que nunca, la gestión del ex presidente Lerche arruinó el Club y dicha crisis pegó rápido en lo deportivo.
Y justo en este torneo en el que tiene que mirar para abajo, se encuentra arriba. Puntero. Y sin ningún Bichi Fuertes, ningún Totono Grisales… No hay grandes estrellas, sino un equipo bien formado. Y con muchas ganas de sacar al Sabalero adelante. Compacto, metedor y también rápido con la pelota en su poder. Colón sabe que no le sobra talento, pero sabe cómo jugar con lo que tiene.
En este caso fue también la suerte la que dio una mano. Rosario Central peloteó a Colón. La Academia rosarino probó mucho de afuera del área, luego Miguel Angel Russo puso tres delanteros, movió el banco, pero no hubo caso. Luque, que venía de anotarle por primera vez en su carrera a River, marcó el gol en el primer tiempo. De esta manera, Colón sigue arriba, con cuatro victorias en cinco partidos. Puntero. Y fuera de la zona del descenso.
Ay Racing…
No hay caso con la Academia de Avellaneda. Parecía que la tenía, que estaba ahí. Iba ganando, se terminaba el partido. Villar había hecho el gol, Vietto desbordaba y hacía diferencia, Saja no sufría tanto como contra Arsenal. Pero en Racing siempre hay un pero. Faltaban tres minutos, casi nada. Y All Boys tuvo un córner, la defensa racinguista no la pudo despejar, como de costumbre, rebote, tiro al arco, rebote y la pelota le cayó a Marcelo Bustamante, bien habilitado. La paró y definió de sobrepique. 1-1 y otra cosa.
El mismo Mostaza Merlo dijo que no se iría, lo cual habla de una situación mala. Cuando hay que aclarar algo, es porque hay problemas. En realidad es lo que se ve, el equipo no tiene respuestas. Claro que si Bustamante la estrellaba en el palo o en el pecho de Saja, se hablaría de otra cosa, pero no sólo el zurdo no erró, sino que en una jugada con tres rebotes, ningún defensor la pudo despejar. Son notorios los problemas defensivos de Racing, y el ataque, tan irregular como lo son los jóvenes De Paul y Vietto, no le permite compensar en el área de enfrente.
Y Ay Boca también. Otra vez el Xeneize volvió a jugar un partido muy malo. La victoria vs Estudiantes parece entonces un oasis y no una muestra de levantada. A Vélez, salvo dos o tres jugadas de la visita, le sobró para llevarse por delante a un Boca muy pobre, sin reacción y por momentos sin alma.
Lo que el equipo de Bianchi genera es muy aislado: puede ser una jugada individual de Sánchez Miño, que volvió en buen nivel a la titularidad, o de Acosta. A lo sumo una corajeada de Gigliotti ganando en el área, nada más. La conexión ofensiva de Boca no existe, y la defensa, particularmente el Cata Díaz, cuando lo agarran con espacios, está muy liviana.
Vélez encontró dos pistones claves para hacer caminar el engranaje: Lucas Romero en el medio y Lucas Pratto arriba. El Lucas volante se comió la cancha, recuperó, jugó y cubrió. El Lucas delantero aguantó de espaldas, pivoteó y hasta dio una mano bárbara en defensa, corriendo por la mitad de la cancha para ensuciar la salida de Boca.
Goles y momentos
No hay momentos malos para hacer un gol. Siempre es bueno marcar. Hay situaciones mejores que otras, eso sí. Pero siempre buenas, de bueno para arriba. Por ejemplo, al finalizar el primer tiempo es un momento clave, o recién empezado el segundo. Y uno determinante es el primer cuarto de hora de juego. Ahí golpeó Gimnasia a Godoy Cruz. Y por duplicado.
A los 12’ abrió la cuenta. Monetti sacó largo para Gastón Díaz, este tiró el centro pasado, muy pasado, muy. Tan pasado que entró en el segundo palo, al ángulo. Ese fue el primero. Y el que terminó de cambiar el partido fue el que vino a los 15’, de la mano (del pie derecho, bah) de Facundo Pereyra.
Los dos goles mostraron una constante para lo que se vería después. Godoy Cruz con problemas para cerrarse y poca contundencia en ataque a pesar de la mayor posesión, GELP profundo y directo, llegando en pocos pases al área mendocina.
Y si hay que hablar de momentos ideales para marcar, Argentinos debería dar la cátedra de esta semana. A los 42’ del primer tiempo, Pisculichi puso el primero, en La Paternal, contra Arsenal de Sarandí. Y tres minutos más tarde, también marcó el segundo, definiendo a un costado, de zurda, su pierna hábil. Cuando Alfaro seguramente estaba pensando en qué iba a decir en el entretiempo, con el partido empatado en cero, el 9 del Bicho puso dos goles de distancia, a favor del equipo del Bichi.
Chocho debe haber terminado Borghi, con la victoria y con la superioridad que por momentos mostró su equipo. Alfaro probó con los ingresos de Rolle y Zuculini para ganar la mitad de la cancha y poder dominar, pero no alcanzó.
No fue el caso de Atlético de Rafaela. Se puso 1-0 desde el vestuario, con gol de Eluchans, pero a pesar de ganar desde los 2’ de juego, terminó cayendo. Aveldaño empató el tanteador a los 34’ y Pittinari lo dio vuelta a los 14’ del segundo tiempo. Nuevamente la B empezó perdiendo, una constante en este torneo, pero así y todo se pudo reponer y, calladito, es el único invicto que queda en este torneo.
Por primera vez desde que asumió Caruso Lombardi, Quilmes pudo sumar. Fue una victoria, merecida, ante Tigre, en un partido que, a pesar de tener llegadas, no fue muy entretenido. El 1-0 lo firmó Sebastián Romero, volante del equipo quilmeño. De todas formas, a pesar de sumar de a tres, QAC sigue último y en la zona roja de los promedios.
En Bahía hubo una dualidad, para hablar de merecimientos. Por un lado Olimpo, ganador del partido por 2 a 0, jugó desde los 15’ con un jugador menos (roja a Pablo Lugüercio). Así y todo ganó. Por otro lado, con el partido aún 0-0, a Lanús le anularon mal un par de goles. Qué tema. Lo cierto es que, más allá de estas cuestiones (porque en definitiva, el fútbol no se merece, si bien es un debate siempre interesantísimo), Olimpo supo llevar el partido hacia el final dentro de un ritmo que no le caiga incómodo. A pesar del hombre demás, el Granate no pudo llevarse por delante el aurinegro, y faltando 10’, Furios puso el primero, de cabeza. Con el tiempo cumplido, Valencia puso el 2-0.
El partido ideal para volver a ganar. Eso fue el clásico del domingo para River. Qué mejor que ganarle a otro equipo grande. Encima al último campeón, que venía en levantada, jugando como local, jugando bastante bien, mejorando la imagen futbolística.
Con gol de Teófilo Gutiérrez, un River renovado le ganó 1-0 a un San Lorenzo muy tibio, sin decisión para ganar el partido, tal vez cansado por la doble competencia. ¿River renovado? Al menos modificado; en este caso Ramón Díaz probó con una línea de 4 en defensa, pero con Augusto Solari y Leonel Vangioni haciendo las veces de lateral. Rojas y Ledesma equilibraron bien la mitad para que Solari y Carbonero vayan por la derecha, y Teo mantuvo su nivel. Se puede ahondar más en detalle, pero en pocas palabras estas han sido las claves. Un equipo mejor parado que lo que se vio últimamente y una delantera bien conectada entre sí.
Estudiantes no pudo vencer a Newell’s; de haberlo hecho hubiera terminado la 5ta fecha como líder, igualando los 12 puntos de Colón. Con el empate 0-0, al menos, igualó la línea de Vélez con 10, y ambos los escoltas del Sabalero.
La próxima fecha será entre semana nuevamente. Colón y Godoy Cruz juegan el martes a las 17hs el primer partido de la 6ta jornada, y Tigre vs River el jueves a las 22.10hs, el último. Se destacan dos juegos, claramente: Belgrano vs Estudiantes (miércoles 18hs) y Newell’s vs Vélez (miércoles 22.15hs).