Crónicas quemeras: Ganar

Por Juan Ciucci

Si es por arrancar con frases hechas, podríamos decir aquella de “lo imposible solo tarda un poco más”. El Globo parecía despedirse hace ya varias fechas del sueño de volver a Primera, pero la irregular temporada de casi todos los equipos vuelve a darle una chance.

La excepción a esa irregularidad la marcan Defensa y Justicia (con gran triunfo ante Crucero en un tremendo partido de Lucero) y Banfield (que esta noche debería ganarle a Atlético, para que los tucumanos no alcancen a Huracán). Los dos se han asegurado el ascenso, sacándole 10 puntos al tercero y 13 al cuarto.

Lo que está en disputa en estas 7 fechas que restan del campeonato es el tercer ascenso que brinda la categoría. Por ese puesto compiten Instituto, Crucero del Norte, Unión, Independiente, Atlético Tucumán; y claro, Huracán.

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Este domingo el Globo logró un triunfazo en Mendoza ante Independiente Rivadavia. En un partido muy parejo, Huracán tuvo mayor control del juego, con buenas asociaciones y llegadas de gol. Gran partido de Gonzalo Martínez, que en la pasada fecha se mostró errático en Parque Patricios. En Mendoza fue la figura del primer tiempo, y en el segundo generó llegadas a partir de jugadas individuales. Sigue sin aparecer en plenitud Toranzo, alguien que será fundamental en las fechas que quedan.

Buen partido nuevamente de  Espinoza y Ábila, dupla delantera que genera permanente inestabilidad en el área rival. Espinoza con sus vertiginosas carreras y gambetas; en tanto que Ábila aguanta bien todas las pelotas que le llegan, y logra imponer su fuerza física para llegar a instancias de gol. Otro buen partido de Marcos Díaz, que le aporta la seguridad que le faltaba al arco del Globo. Los goles llegaron de dos históricos con un presente discutido: un zapatazo de Arano que se desvió en el defensor  Cardozo, y un gran tiro libre de Eduardo Domínguez.

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Quedan 7 fechas, Huracán debe ganar todos los partidos si quiere ascender, ya que depende de otros resultados. Parece difícil pero no imposible, en especial gracias a un fixture que le ofrece dos partidos seguidos de local: Douglas Haig y Banfield. El Globo viene de 4 triunfos y dos empates (de visitante), lo que permite esperanzarse con un final de campeonato soñado, que le permita volver a donde pertenece. En un momento en que el equipo ha logrado cierta estabilidad, solo le queda una opción: ganar.