¿Fuego amigo? Los votos de Julián fueron para Aníbal

Por Enrique de la Calle

La única verdad es la realidad. En este caso, los fríos números. Hacia ellos vamos. En las PASO, la interna entre Aníbal Fernández y Julián Domínguez sumó 3.103.063 de votos. Dos meses después, la candidatura del actual Jefe de Gabinete obtuvo 3.098.900. Es decir, 4163 menos. Una diferencia insignificante. Podemos arriesgar, entonces, que la mayoría de los votantes de Domínguez se inclinaron por Fernándezl. 

Lo que sí se da es un cambio en el porcentaje entre una elección y otra: el Frente para la Victoria pasó del 40,3% al 35,18% en la categoría “gobernador”. Eso ocurre porque aumentó la cantidad de votantes (del 70% a 80% de participación), casi un millón entre ambas instancias. Además se redujo el voto en blanco (de 925 mil a 735 mil) y se liberaron otras 230 mil boletas, gracias a las fuerzas que no superaron las PASO. Lo sorprendente es que la candidata de Cambiemos, María Eugenia Vidal, acaparó casi la totalidad de votos nuevos: ¡1,2 millones sobre 1,4 millones!

Y se puede agregar un dato más: Aníbal mantuvo en las generales los guarismos de las PASO en cifras similares a la boleta que llevó a Daniel Scioli a la presidencia. Se ha dicho: en dos meses, el FpV perdió 4000 votos en la categoría “gobernador”. En la de presidente, ganó 1000. El corte entre ambas, se mantuvo en el orden de los 300 mil votos.

Otra pregunta que se ha hecho en estos días tiene que ver con qué hubiera pasado si Domínguez era el candidato del FpV. No lo sabemos pero se puede decir esto: Vidal sacó más votos que Aníbal y también que Scioli. Es decir: superó a toda la boleta del FpV. ¿Hubiera cambiado con el ex ministro de Agricultura?

Y algo más sobre el corte “contra Aníbal”. Viajemos en el tiempo: en 2011, Cristina Fernández sacó alrededor de 600 mil votos más que Scioli, en aquella oportunidad, candidato a la gobernación. Esa diferencia entre un tramo y otro de la boleta se repitió en ambas elecciones (PASO y generales). Eso da cuenta de que el corte es más habitual de lo que se quiere aceptar por analistas y dirigentes. De hecho: se puede ver qué pasó en otras provincias en las últimas elecciones (por ejemplo, Entre Ríos, donde el FpV ganó en la gobernación y perdió a presidente).  

Ya lo hemos dicho en otro artículo reciente, lo repetimos una vez más: el problema para Scioli y, sobre todo, para Aníbal estuvo menos en Cambiemos que en UNA. De hecho, Aníbal y Felipe Solá obtuvieron entre los dos 4,7 millones de votos, una cifra similar a la de Scioli hace cuatro años. Y muy por encima de la que sacó Vidal, la futura gobernadora bonaerense.

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