Brasil: una comisión del Congreso analizará el impeachment contra Dilma
Por Santiago Gómez - Desde Florianópolis
Solo y arrinconado tras la divulgación de cuentas en Suiza, cobro de coimas y evasión fiscal, que le generaron un proceso judicial en el Supremo Tribunal de Justicia, Eduardo Cunha (PMDB), Presidente de la Cámara de Diputados, aceptó el pedido de abrir el trámite administrativo que podría derivar en un juicio político a la Presidenta Dilma Rousseff, que de ser aprobado por una Comisión Especial pasaría a ser tratado por la Cámara de Diputados. El argumento para pedir el juicio político a la mandataria se basa en que durante el año violó la ley que establece la meta fiscal, es decir, cómo deben cerrar los números a fin de año. La aceptación para abrir el trámite que podría derivar en juicio político se produjo el mismo día en el gobierno consiguió sancionar la Ley que actualiza la meta fiscal, a través de la cual se amplió el déficit autorizado al Estado Nacional de R$ 51,8 mil millones, equivalente al 0,9% del PIB, a uno de R$ 119,9 mil millones. La decisión de Cunha pondrá fin a un año de extorsiones de la oposición y el PMDB, partido aliado del gobierno. Con un Cunha completamente deslegitimado moralmente para hablar de corrupción y una acusación con débiles argumentos, difícilmente Dilma sea juzgada.
Tras la noticia la mandataria brasilera se comunicó con la población haciendo uso de la cadena nacional para transmitir que "son inconsistentes e improcedentes las razones que fundamentan el pedido. No realizé ningún acto ilícito. No recae sobre mí ninguna sospecha de desvío de dinero público. No poseo cuenta en el exterior, ni oculté al conocimiento público la existencia de bienes personales", en clara alusión al juicio que Cunha enfrenta por corrupción. Ante las versiones que indicaban una negociación para que el Comité de Ética de la Cámara de Diputados no continuara con el proceso para separar a Cunha de la Cámara a cambio de dejar de archivar los pedidos de juicio político a la Presidenta, Dilma declaró que "jamás aceptaría o acordaría con cualquier tipo de trueque, mucho menos aquellos que atentant contra el libre funcionamiento de las instituciones democráticas, bloquean la justicia y ofenden lo principios morales y éticos que deben gobernar al vida pública. Tengo convicción absoluta y tranquilidad sobre la improcedencia de ese pedido, así como con su justo archivamiento".
¿Cómo sigue?
Lo hecho por Cunha no fue más que dar lugar a un pedido para que se inicie el proceso administrativo que evaluará si hay condiciones o no para la realización de un juicio político a la Presidenta. El paso siguiente es la creación de una comisión para que evalué las razones por las que se solicita el impeachment. Según el Ministro del Supremo Tribunal de Justicia Marco Aurélio Mello "esa comisión dará un parecer y ese parecer será sometido a un colegiado. El colegiado debe decidir si el pedido merece o no deliberación y enviarlo de nuevo a la comisión para que ella determine el recibimiento o no". El mes pasado el mismo juez del STJ apoyó la separación de Cunha de la Cámara de Diputados mientras se realiza el juicio por corrupción en su contra.
En caso de que se considere que hay razones para llevar a la mandataria a juicio político, lo cual es difícil de creer cuando los argumentos son que autorizó gastos por encima de la primera meta fiscal propuesta, cuando ya se aprobó la ley que amplió el déficit autorizado para la Nación, el pedido de juicio político sería llevado a votación a la Cámara de Diputados, donde necesitará ser aprobado por dos tercios de los votos. El PT necesita solo 172 votos sobre 513 para rechazarlo. De ser aprobado pasa a la Cámara de Senadores, quien deberá llevar adelante el proceso, tiempo en el cual la Presidenta debe dejar el cargo temporalmente y asumiría el vicepresidente Michel Temer, también del PMDB.
¿Son sólidos los argumentos?
El diputado del PMDB por Rio de Janeiro, Leonardo Picciani, en declaracionies a VALOR manifestó que Cunha "se equivocó al aceptar el impeachment. No veo motivos jurídicos para ello". Al ser consultado sobre si la aceptación de dar lugar al trámite que podría finalizar en un juicio político está relacionada con el proceso que se lleva adelante en la Comisión de Ética contra su compañero de partido Picciani afirmó "No sé si él hace eso. Pero tiene que mirar el juicio político desde la Constitución Nacional. Mezclar este tema con el conflicto político es un error enorme". Picciani considera que quien es responsable de esta barbaridad es el PSDB de Aécio Neves y Fernando Henrique Cardoso. Tras la noticia, el ex candidato presidencial Aécio Neves manifestó que el pedido de juicio es "consistente y en acuerdo con la Constitución".
El ex juez del Supremo Tribunal de Justicia y primera persona negra en llegar a ese cargo, Joaquim Barbosa, manifestó a O Globo que no ve condiciones para que se realice un juicio político a la Presidenta. "El juicio político es un mecanismo regular del sistema presidencialista, pero es traumático. Puede tener consecuencias difíciles de evaluar hoy".
Con la decisión desesperada de Eduardo Cunha se pone fin a un año de incertidumbres y extorsión respecto a la posibilidad de que se le iniciase un juicio político a la mandataria. Los argumentos basados en el cumplimiento de la meta fiscal, razón que llevó a la Presidenta a colocar en el Ministerio de Economía a Joaquim Levy, difícilmente encuentren apoyo cuando acaba de votarse la ley que le dio facultades a la Nación para ampliar la meta inicial propuesta. Sin dudas que el PMDB y la oposición continuarán extorsionando para darle al PT los votos para rechazar el pedido de juicio en la Cámara de Diputados, en caso de que sea aprobado por la Comisión, así como también que se pone fin a la espada de Damocles que pendía sobre la cabeza de la mandataria.
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