Fabiana Vallejos: de competir con los varones al fútbol europeo
Por Delfina Enriquez
Fabiana Vallejos tiene 31 años. Jugó al fútbol desde chica. Comenzó en Los Tulipanes de Garín, se inició como profesional en River Plate y representó al Everton de Chile en la Copa Libertadores. Hasta agosto de 2016 jugó en Boca Juniors, ahí construyó gran parte de su carrera y cosechó varios títulos. Hoy la mediocampista está viviendo su primera experiencia en un equipo europeo: el Granada de España.
APU: ¿Cómo y cuándo empezó a jugar al fútbol? ¿Por qué decidió empezar a practicar este deporte?
Fabiana Vallejos: Empecé a jugar a los 7 años con los varones, cuando mi papá me invitó a participar en un entrenamiento porque faltaba un jugador. A partir de ahí entré en el equipo y competí con chicos. Me decidí por el fútbol porque es un deporte que me atrapó desde el principio, disfrutaba mucho estar dentro de una cancha con amigos.
APU: ¿Cómo fue su salida de Boca y su llegada a España?
FV: A mi representante le llegó una oferta de un club español y la analizamos junto a mi familia. Me decidí por probar una nueva experiencia en el exterior y seguir mi carrera aprendiendo nuevos conceptos del fútbol. Gracias a Dios Boca me apoyó desde un primer momento y me facilitó la salida del club. Por eso le estoy agradecida a Boca y a Marta Pavone, quien gestionó mi pase.
APU: ¿Se puede vivir del fútbol con el sueldo que recibís en Granada? ¿Cómo era su situación en Argentina?
FV: En segunda división no se puede vivir del fútbol porque no es profesional, por eso estoy trabajando en los equipos infantiles femeninos del club. Una vez en primera división, los costos son distintos y, en ciertos clubes, sí se puede vivir del fútbol. Los salarios de los hombres son mucho mayores. Lo bueno es que en la prensa se informa más y al ser una ciudad pequeña se habla mucho del equipo femenino del Granada CF.
En Argentina también trabajaba y entrenaba, no se puede vivir del fútbol hoy en día en nuestro país. Es un deporte amateur que necesita mucho apoyo, siempre tengo la esperanza de que en unos años crezca y que las chicas que juegan se puedan dedicar plenamente a este deporte. Sería un sueño poder lograr eso, tanto para mí como para las chicas que luchan día a día.
APU: El fútbol femenino en Argentina es amateur ¿Qué creé que hace falta para que tenga mayor reconocimiento y se convierta en un deporte profesional?
FV: Para que se convierta en profesional se necesita mucho apoyo del club, tanto en la parte económica y como en la social. También es necesario que se consigan sponsors y que se presente un proyecto que incluya a todos los equipos que practican de este deporte. Así como que se realicen los mismos torneos que en el fútbol masculino. En las provincias hay muy buenos equipos y muy buenas jugadoras, al igual que en Buenos Aires, y deberían ser potenciadas. Lo más importante es que nos den esa oportunidad de demostrarlo.
APU: ¿Qué es lo que falta hacer para que el fútbol femenino sea más masivo?
FV: Hoy en día el fútbol femenino se convirtió en un deporte masivo y cada vez más mujeres lo practican. Lo importante también es que en los clubes haya más categorías, para que todas puedan participar de un torneo de AFA. Tal como sucede con los hombres, cuando hablamos de las categorías inferiores, las mujeres también necesitan contar con una base de jugadoras pequeñas.
APU: ¿Cómo ve la situación actual del Fútbol en Argentina y cómo se encuentra en comparación con otras partes del mundo?
FV: Lamentablemente hoy estamos en un período de transición, el cual perjudica tanto al fútbol femenino como al masculino, tanto en la selección como en los clubes. Es necesario que se resuelva cuanto antes la presidencia de la AFA, para que divida los cargos y se puedan empezar a incorporar nuevos proyectos que potencien el fútbol en general.
APU: Cada vez son más las mujeres que practican fútbol, sin embargo siguen existiendo prejuicios y se refuerzan estereotipos ¿Creé que es así o que se ha ido modificando? ¿Cómo fue en su caso?
FV: Antes había muchos estereotipos negativos hacia la mujer. Pero a medida que el deporte va tomando más protagonismo, las personas que te conocen y están dentro del ambiente te apoyan. Saben del esfuerzo y la dedicación que pones para jugar y representar los colores de tu equipo.
En mi caso, cuando era chica, existía ese prejuicio de no dejarte jugar con chicos por ser mujer. Pero nunca me importaron esos prejuicios. Hoy sigo y pienso seguir cumpliendo mis sueños, objetivos y metas, con una pelota bajo mis pies. Este deporte es el que elegí y lo volvería a elegir.
Lo que sí: nunca voy a entender por qué hay tanta discriminación con las mujeres que juegan al fútbol, si nacimos con la misma pasión. Cuando sos pequeña no entendés por qué a vos no te dejan jugar y a los hombres sí. A esa edad no sos consciente del deporte que elegís, es un deporte más. Ahora sé que mucha gente considera al fútbol como un deporte de hombres. Pero hoy por hoy -en todo el mundo, no sólo en Argentina-, hay mujeres que juegan el mismo fútbol, que comprenden el mismo fútbol, que se destacan y tienen las mismas virtudes que otros jugadores hombres. Sin embargo, todavía tenés que hacer mucho sacrificio para que valoren tu esfuerzo.