Cómo se detectó la explosión en el ARA San Juan
Por Rubén Costiglia (*)
El submarino ARA San Juan (S-42) de la Marina de Guerra de la República Argentina, está perdido desde el 15 de noviembre, con cuarenta y cuatro tripulantes a bordo. La noticia conmocionó a Argentina y se ha convertido en un tema de controversia en las redes sociales, la prensa y en la calle. También han surgido las especulaciones más diversas sobre lo que pudo haber ocurrido. Al momento de escribir esta columna, más de doce días después de su desaparición aún no ha sido encontrado, a pesar del esfuerzo que se está realizando con la colaboración de países de Sudamérica, Gran Bretaña, Estados Unidos y Rusia.
El día 23 se dio a conocer por parte de la Comisión Preparatoria del Tratado de Prohibición Completa de Ensayos Nucleares (CTBO por sus siglas en inglés) que el día 15, tres horas después de la última comunicación del submarino sus sensores habían detectado una explosión en la zona donde desapareció. Según el portavoz de la Armada Argentina, un día antes se había recibido una información en el mismo sentido procedente de Estados Unidos.
¿Qué es la CTBO? El tratado que prohíbe cualquier explosión nuclear, en superficie, en la atmósfera, en el mar o en el subsuelo, se estableció en 1996. Más de veinte años después no ha entrado en vigencia, lo hará cuando sea ratificado por 44 países. Entre otros, todos los estados europeos entre ellos Alemania, Francia y Rusia lo han ratificado. Hasta 2012, tres no han firmado ni ratificado el tratado (India, Pakistán y la República Popular Democrática de Corea). Cinco lo han firmado pero no lo han ratificado (China, Egipto, Estados Unidos, Irán e Israel). La CTBO que tiene su sede en Viena, Austria, es la que debe hacer los preparativos para implementar el tratado, y una parte fundamental es el Sistema Internacional de Vigilancia (SIV). Este sistema comprende una compleja red de estaciones en todo el mundo que permiten detectar cualquier ensayo nuclear.
Las ondas producidas por explosiones en el agua se pueden desplazar a miles de kilómetros de distancia, por eso el SIV sólo necesita once estaciones para todos los mares del mundo. La HA10 de la isla Ascensión y la HA04, de la isla Crozet, detectaron la explosión en la zona donde se ubicaba el submarino. La Isla Ascensión, a mitad de camino entre América y África, está bajo control británico. Fue el último puerto que tocó la flota británica que en 1982 atacó a las tropas argentinas en las Islas Malvinas. El gobierno de Cristina Fernández denunció en el 2013 que Gran Bretaña tiene instalado armamento nuclear en las Islas Malvinas.
La información proporcionada por los sensores del SIV nos dice que hubo una explosión, dentro o fuera del ARA San Juan, no lo sabemos. Menos aún su origen. Si se consigue rescatar al submarino quizás se sepa. Si esto no ocurre el Atlántico guardará el secreto y las especulaciones continuarán.
(*) El ingeniero argentino Rubén Costiglia reside en México, donde se desempeña como investigador y docente universitario. Mantiene la columna “Nuestra vida y la ciencia” en el periódico Síntesis. En ese espacio apareció el jueves 30 la columna que AGENCIA PACO URONDO comparte hoy.