Inventar nuevos sentidos: fotografía con perspectiva de géneros
Por Enrique de la Calle
APU: ¿Cómo surge Casa XI?
Clara Cholakian Herrera y Camila Herrán: Casa XI es una productora de contenido fotográfico con un modesto estudio casero, conformada por dos partes: una fotógrafa y una directora de arte. Surgió de la idea de generar el contenido que nos gustaría ver en las redes sociales y hacer algo concreto con el conocimiento artístico que tenemos, siempre desde nuestro lugar disidente.
APU: ¿Por qué les parece importante crear un espacio de producciones disidentes? ¿Qué ven que sucede en otros espacios sin ese compromiso?
CC y CH: Cuando hablamos de disidencia, hablamos tanto de disidencia sexual y de género, como de disidencia en los cuerpos que no cumplen con la norma.
Nos parece importante crear un espacio donde estén representadas las disidencias y la diversidad, porque lastimosamente lo necesitamos.
Crecimos teniendo que hacer un esfuerzo para encontrar imágenes con las que sentirnos representadas y, en espacios sin el real compromiso con la disidencia, encontramos imágenes que son una representación forzada, hecha por el mismo punto de vista del hombre cis heterosexual, blanco, occidental y de clase media que nos fetichiza, nos convierte en personajes de circo, nos usa para lucrar y, lejos de beneficiarnos, nos estigmatiza.
APU: ¿Qué implica trabajar en fotografía con perspectiva de géneros?
CC y CH: Significa ser consciente de las construcciones culturales y sociales existentes y trabajar su deconstrucción desde la imagen. Sabiendo que nuestra audiencia son -como nosotras- personas jóvenes en proceso de deconstrucción y al estar haciendo principalmente fotografía publicitaria, el desafío es no reproducir los estereotipos que son tan dañinos y funcionales al mercado dominante. Este aprendizaje requiere una previa deconstrucción fuera del lente fotográfico y un arduo esfuerzo por romper parámetros e ideas con las que crecimos.
APU: ¿Cuáles son los desafíos del trabajo autogestivo en fotografía?
CC y CH: La autogestión en si es un desafío, más hoy en la Argentina y teniendo en cuenta que nuestro trabajo no es fundamental como puede ser el de personas con emprendimientos gastronómicos y productos que sirven para saciar necesidades básicas. Además la fotografía está viviendo un boom hace años con lo cual, ser dos mujeres artistas que buscan trabajar temas poco convencionales y vivir de ello en un mundo plagado de gente que hace fotos “amigables” es, en esencia, una constante pelea.
Habiendo nacido como productora hace poco, nos enfrentamos a los problemas básicos de cualquier emprendimiento, la inversión, la falta de visibilidad por la reducida cantidad de contenido que tenemos y la falta de herramientas. Más que los desafíos, nos parece interesante remarcar la forma de ingeniárnosla ante estos, ya habiendo mencionado nuestro perfil disidente, la otra clave de nuestro trabajo es el potenciarnos y trabajar con otras personas con proyectos autogestionados. El intercambio monetario no siempre es posible pero en el trabajar de esta forma, visibilizándonos mutuamente, recibimos seguidores en las redes sociales y clientela que llega desde otros lugares.
APU: ¿Tienen proyectos a futuro que puedan comentar?
CC y CH: En relación con lo previamente mencionado, nuestros proyectos actuales y a futuro incluyen en su mayoría producciones para emprendimientos.
En este momento en particular estamos trabajando en un proyecto a la gorra en el cual retratamos a mujeres y disidencias para que tengan una buena foto para sus currículums y les asesoramos en el diseño de este. Nos parece importante desde nuestro lugar como productora de contenido fotográfico ayudar a grupos vulnerados a tener mayores posibilidades de conseguir empleo y presentarse de una forma más profesional en los espacios que sea necesario.
Para conocer más, visitá Casa Xi en instagram: @casa.xi