El canciller afirmó que si las elecciones no fueran en la Argentina, Macri conseguiría mejores resultados

Ante empresarios cordobeses en el marco de una charla en la Bolsa de Comercio de esa provincia, el canciller Jorge Faurie confesó de forma tan implícita como insólita que en Cambiemos saben que el Presidente no se encuentra ante el mejor de los panoramas para conseguir la reelección o bien que sus decisiones beneficiaron más a los extranjeros que a los argentinos. Es que según el ministro de Relaciones Exteriores y Culto, Mauricio Macri "tendría un voto amplísimo” si las elecciones no fueran en la Argentina. 

“Si al presidente Macri lo tuvieran que votar en el exterior tendría un voto amplísimo”, insistió en la conferencia este lunes, a la que fue invitado por la entidad que preside Manuel Tagle.

Para Faurie, Macri está “produciendo cambios” económicos coincidentes con “los países que progresan”. Por eso, según el argumento del funcionario, si las elecciones para elegir Presidente de la Nación en la Argentina fueran en el extranjero parece ser que Macri conseguiría mejores resultados que en el país. 

El canciller sostuvo que esto es así “porque se han producido cambios que hacen parecida a Argentina a lo que hacen las economías en el resto del mundo", tal como informó La Voz. 

“El gobierno del presidente Macri tiene un compromiso absoluto, muy duro para todos nosotros, algunos tienen más recursos en el bolsillo para afrontarlo, otros tienen menos y eso le da una enorme dureza al ajuste para poder llegar al objetivo que tenemos este año y que ya viene dando indicadores que vamos a poder cumplir”, dijo durante el almuerzo con empresarios cordobeses. 

En su discurso, el canciller Faurie destacó la intervención en el Banco Central, “la disciplina monetaria” y una iniciativa para potenciar el comercio exterior. Además, reivindicó una política de ajuste que lleve al estado a “no gastar más de lo que se debe”.

Al respecto, Faurie resaltó que “el Estado debe comportarse con responsabilidad”. 

En otro momento, el ministro se dirigió a los empresarios a quienes llamó a cumplir un rol en esa tarea que es la de “asegurar la estabilidad monetaria” y a “no pedirle al Estado que sólo haga un gasto que se traduzca en un déficit y a mantener este primer superávit primario que hemos alcanzado”.