Clarín: “Fernández cambia el gabinete, pone platita y se embaraza para dar vuelta la elección”

Por Groncho Mars |​ Ilustración: Leo Olivera

“Estoy preocupado”, me dice Gregor, con esa capacidad de crear suspenso que suele atrapar mi atención. “¿No te pasa que bancás la risa por vergüenza ajena cuando escuchás a un periodista supuestamente serio hacer un editorial intentando conseguir cierta profundidad y sólo logra parecerse a un mal live action de Ken Brockman? Eso me sucede con Luis Majul. Pero el otro día estaba hablando con Alfredo Leuco y Débora Plager (como no podía ser de otra forma) de Cristina y Pirincho aseguró: ‘Recién hablábamos en maquillaje 'che, la carta de Cristina no es una decisión de una política inteligente y elegante. Esta no es Cristina’. El tipo, sin querer, reconoció que CFK es inteligente, además de fachera. Y yo me di cuenta que, por primera vez, estaba de acuerdo con Majul. ¿Puede ser peligroso esto, tiene efectos secundarios?”. Estuve a punto de contestarle que una golondrina no hace verano, pero mi amigo no sólo me iba a mirar raro sino que esa frase iba a deschavar mi edad. Así que recurrí a la eterna fórmula y le dije “mejor, empezar”.

Puedo romper el diario de hoy

Hubo cambio de gabinete, nomás, y Clarín creyó necesario ponerse en campaña. De llevarla a los títulos, digo. “Martín Guzmán hace un rulo financiero con la plata del FMI y despeja el camino para emitir más de cara a la campaña”. Que no llegue a aceptar un préstamo por 57 millones de dólares para hacerlo desaparecer en meses porque el gran diario argentino se lo va a señalar. Esta vez no se le va a escapar la tortuga. Pregunto, decir que un cuasi pelado hizo un rulo ¿puede ser tomado como burla? “Alberto Fernández convirtió la jura de los ministros en un acto de campaña”; “Con la vista en la elección, el gobierno afloja las medidas para la pandemia”. Mirá vos, y yo que pensaba que era por el descenso abrupto de la curva de contagios y fallecidos, más el ritmo que hace unos meses viene teniendo la vacunación. Ya podríamos ir adelantado algunos títulos de este medio para los próximos días. “Dylan y Prócer se pelean para darle una mordida a la campaña”. “Fabiola lleva 10 meses embarazada con vista a la elección”. Lo peor de todo es que lo de 10 meses es verdad. No costaba nada chequear. O mirar la foto, aunque sea. Claro, esto tiene una explicación. Ellos son quienes más manija le metieron a la frase “la cuarentena más larga del mundo” y deben haber pensado que se viene “el embarazo más largo del mundo”. A ojo de buen cubero, si con esa pancita lleva 10 meses, antes de los 25 ese bebé no sale. 

 

 

 

 

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Escribiendo frases para poder creer

Juntos por el Cambio realizó un encuentro nacional con la presencia del nuevo saludador oficial, Mauricio Macri. No supimos si esta vez lo dejaron hablar, lo que si conocimos fue una foto que se viralizó en las redes sobre el punteo que hizo sobre los temas que le interesaba tocar. En Ámbito decidieron hacer una nota con el análisis grafológico de esos apuntes. “¿No les pareció demasiado?”, le pregunté a un editor de ese diario. “Al contrario, Groncho, agradecé que no fue un análisis ortográfico. Hubiésemos necesitado la mitad del diario para intentar explicarlo”. “Empieza con un tamaño grande a la hora de escribir y luego se va achicando. Eso se relaciona con cómo te posiciones en la vida, en el cómo estoy yo”, analizó la grafóloga. ¡Vamos, Mufaza, que así no llegamos al segundo tiempo! Si les parece llamativo que la prensa argentina toque temas como éstos, tienen que ver cómo se pone cuando directamente decide intervenir. “Daniel Gollán: con un poco más de platita en el bolsillo, la foto de Olivos no hubiese molestado tanto”, tituló Infobae. “Otro tiro en el pie”, pensé. Pero parece que el candidato del Frente de Todos había citado a una tercera persona a la cual olvidaron nombrar en la nota. Espero que desde la oposición no hayan salido a repudiar y que el mismo diario haya desistido en levantar esas declaraciones. ¿Qué ya lo que hicieron? Pillines, ahora entiendo a qué se refieren cuando dicen “hacemos periodismo”.

Piñas van, piñas vienen, los muchachos se entretienen

La que salió a elogiar al nuevo gabinete fue Elisa Carrió, especialmente al nuevo ministro de Seguridad, Aníbal Fernández. “Es como la vuelta del monstruo alicaído”, le comentó a Joaquín Morales Solá. “El conoce todas las mafias, yo sostengo que es parte. Pacta con los narcos o con los piratas para que haya paz. Estimo que retirarán a Gendarmería de la villa 1-11-14”, aseguró la sierva de la República. No me lo imagino a Aníbal en la mitad de la calle del barrio al grito de “¡parley!”. Lo cierto es que Lilita no se quedó ahí y dejó entrever que el exjefe de gabinete estuvo “ligado a la muerte de Nisman”, ya que el “siempre controló a la Federal”. Cerraba bien, lástima que la jurisdicción en dónde falleció el fiscal le correspondía a Prefectura. Morales Solá sacó a relucir su olfato de periodista de élite ante una fake news e intervino con un “ajá”, para dejar que Lilita siguiera con su teoría. Faltó que reflotara lo de la Morsa, aunque no creo que se anime a poner su casa otra vez. Que lo haga Joaquín que, la verdad, viene aportando poco. “Señora, le juro por Dios que conozco la mafia de la mesa judicial que usted integraba junto a Pepín Rodríguez Simón y otros, pero nunca formé parte de ella”, fue la respuesta del ministro de Seguridad. Touché. Esto prometía tener más rounds, pero Aníbal le bajó el precio asegurando “me quieren subir al ring porque creen que hago ruido, pero yo tengo mucho trabajo y ellos están muy al pedo”. KO técnico.

Juegan a primero yo, y después a también yo

La Corte Suprema eligió su nuevo presidente. Ricardo Lorenzetti, quien tenía intenciones de ser escogido, al ver que los números no le daban se acordó que tenía cosas que hacer y se ausentó. Viendo esto, Elena Highton de Nolasco pidió posponer la votación y los otros tres supremos le contestaron que no hacía falta, que ya habían hecho un 2x1 que entraba como por un tubo. Así fue como Juan Carlos Maqueda propuso a Horacio Rosatti como presidente y a Carlos Rosenkrantz como vice. A estos dos le pareció que estaba bien y se votaron a ellos mismos. Resumiendo: de 5 votaron 3 de los cuales 2 dijeron “yo me voto”. Total normalidad. Por lo menos para Clarín, a quien pareció no preocuparle las formas sino el resultado: “Asume Rosatti y tendrá que manejarse con una corte dividida”. “¡Mavale!”, le contestarían en Entre Ríos. “¿No era mejor esperar que volviera el rafaelino y estén todos para la elección?”, le pregunté a un asesor de Rosatti. “Ni por casualidad”, me respondió, “no dudamos entrar a la corte por la ventana hace unos años, mira si no íbamos a aprovechar esta oportunidad”. Por lo pronto, Lorenzetti pataleó como lo hace siempre que pierde: presentando sus quejas a través de todos los diarios posibles. A llorar al campito. Si quiere sumar puntos, cuando vaya la puede pasar a buscar a Mercedes Ninci, quien por tener que indemnizar a Guillermo Moreno “no tiene plata ni para la SUBE”. Una apelación a la derecha...

Un señuelo, hay algo oculto en cada sensación

Después de cosas como éstas a uno no le extraña enterarse que un peritaje firmado en forma unánime aseguró que no hubo sobreprecios en la causa conocida como Gas Natural Licuado (GNL), una de las tantas armadas contra Cristina. Y como peritaje de muchos mata a monografía copiada a estudiantes chilenos por uno sólo, quedó en evidencia la cadena de falsedades que arrancó en el fallecido juez Claudio Bonadio, pasó por el fiscal Carlos Stornelli y terminó en el falso abogado Marcelo D´Alessio, junto al periodista Daniel Santoro. Y aquí nace la pregunta de si se puede seguir adelante con el juicio cuando el peritaje aduce que no hay delito. Denle unas semanitas y alguno le demostrará que “sí, se puede”. Hasta, quizás, lo escuchemos decir “eligieron al presidente de la suprema con repoca gente y votándose a ellos mismos, mirá si no voy a poder llevar adelante un juicio sin pruebas”. Pruebas eran las que les sobraban a la AFIP sobre el reingreso de capitales propiciado por el macrismo ya que no sólo aparecieron funcionarios y algunos familiares del papá de Antonia, también otros individuos con activos o inmuebles no declarados. Lo interesante es que dicha entidad recién en octubre de 2019 abrió las fiscalizaciones para hacerlas efectivas en enero de 2020, reclamando impuestos por 100 millones de pesos. Parece que algunos no pasaron del todo el desafío de la blancura. Era por acá, no por el lado de los monotributistas.

Y me gustan esos raros peinados nuevos

La Nación está encantado con el grupo de amigas macristas que, basándose en un sistema piramidal “al estilo Avon”, lograron juntar un montón de fiscales en Mendoza. “Las pelo de Cocker planchado” se hacen llamar, porque comparten dos cosas: la filiación política y el peinado. Adriana Varela, la fundadora del clan, es docente. Y muy activa en las redes. Por ejemplo, tuiteó “Sumate y fiscalizá. Pensá que si no sos vos, los votos te los va a contar la morsa. Pensalo”, en obvia alusión a Aníbal Fernández. Al exdiario de Mitre (por lo menos de Esmeralda), eso le pareció un sarcasmo y no le llamó la atención que siga propalando una noticia falsa. Ufff, menos mal, me dio mucho miedo de que pensaran que estábamos ante otro caso de una docente adoctrinadora. ¡De la que zafaste, Videlita! El que aprovechó la volada fue Diego Santilli, primer candidato a diputado de Juntos, quien le realizó un pedido especial al grupo. “Los y las #pelodecockerplanchado son todo lo que está bien!”, se manifestó en Twitter, para preguntarles luego “Se arma grupo en PBA? ¡¡Avisen y nos juntamos!!” Y aquí nace la gran pregunta que esa invitación deja entrever: ¿se animarán las chicas a teñirse el pelo de rojo? Va a ser mucho más que “Koleston 7,3. Brushing y planchita”. Tristeza fue la que me ganó cuando supe que son las del “pelo de Cocker planchado” por la raza de perros y no por Joe, el cantante. Estamos matando el glamour, así.

Un mundo en miniaturas

Llamó la atención de que Jair Bolsonaro insistiera en participar de la asamblea anual de la ONU que se realizó en Nueva York, no porque nos negáramos a escuchar lo que tiene para decir como primer mandatario (aunque, como dice Bartleby, preferiríamos no hacerlo) sino porque no estaba vacunado y era una de las exigencias para poder asistir. Y si bien dicha entidad prefirió confiar en el honor y la palabra de cada uno de los oradores, en los locales gastronómicos de dicha ciudad parece que no, ya que se lo pudo ver al presidente de Brasil comiendo una pizza de “dorapa” en la calle por no poder ingresar a los establecimientos al no contar con el carnet de vacunación. Interesante ver cómo, cuáles y dónde se establecen las prioridades. Casi tanto como escuchar al Banco Central de China prohibir la criptomonedas al considerar que ponen en peligro los haberes de la gente ya que “el comercio y la especulación con las monedas virtuales alteran el orden económico y financiero, aumentando el lavado de dinero, la recaudación de fondo ilegal, los esquemas de pirámides y otras actividades criminales”. Apa. ¿Entonces no eran negocios de filántropos millonarios que así juntan la plata para sostener sus proyectos que nos van a sacar de este planeta y llevar a otros mundos donde podamos vivir mejor, en vez de ponerse en gastos para salvar este que, quién sabe cómo, se nos vino a arruinar? Mirá vos. En Infobae se están arrancando los pelos.

Mai onli frends, di end

Y una vez más llegamos al podio de las notas más destacadas de la semana. En el tercer escalón se encuentra Crónica que nos advierte “Se bajó una ‘cocucha’ en 10 minutos y se murió”. Raro, pensé. Luego entré al posteo y vi que pasó en China, ahí me cerró. Demasiado capitalismo en sangre de un solo saque. En el puesto número 2, A24 nos cuenta de la “Impresionante tormenta en Estambul en la que ven la cara de un villano”. La tempestad azotó a la ciudad turca y los ciudadanos pudieron captar una curiosa figura que se formó en las nubes muy similar al villano de la saga Harry Potter: Voldemort. Reproduje el video como en 30 ocasiones y a veces veo la cara de Domingo Cavallo y en otras la tarta que se parece a López Murphy. Hace como 3 noches que no puedo pegar un ojo del susto. Y en lo más alto del podio se encuentra La Nación que nos alecciona sobre ciertas posibilidades alimenticias que no estaríamos teniendo en cuenta: “El lado B de la ortiga, la planta que pica al contacto con la piel, pero es comestible y nutritiva”. Nada del progresismo de la rúcula o el conservadurismo de la lechuga repollada, eso ya fue. A comer ortiga que se acaba el mundo. Aunque, pensándolo bien, si quiero ser top debo seguir los pasos adecuados y esperar a que este mismo medio publique la tan ansiada nota que vendría a confimar a la ortiga como la verdura de moda cuando veamos a Juliana Awada ingiriéndola.