Diálogo con Hugo Aimar, el matemático que le escribió una carta a Alberto apoyando el juicio político contra Rosatti
El presidente de la Nación, Alberto Fernández, decidió responder a la carta enviada por el matemático Hugo Aimar, quien lo apoyó en su decisión de iniciar un proceso de Juicio Político a los miembros de la Corte Suprema de Justicia.
En la carta que el docente e investigador del Conicet le hizo llegar al Presidente, le dice que lo mueve “la imperiosa necesidad de lograr que las instituciones públicas de todos los niveles dejen de ser utilizadas para beneficios individuales o personales y que no claudiquen en su única razón de ser: El bien común”.
Aimar sabe de esto, porque sufrió en carne propia cuestionar la decisión del Consejo Superior de la Universidad Nacional del Litoral de mantener como titular en la Maestría de Derechos Humanos a Horacio Rosatti, quien había votado el 2x1 en beneficio de los represores. “No es que yo fui un día a los gritos a pedir que lo sacaran a Rosatti, no. Lo mío fue un rol más secundario. Simplemente acompañé el pedido que hicieron los organismos de Derechos Humanos nucleados en el Foro Contra la Impunidad de Santa Fe para que apartaran como director de la Maestría a Horacio Rosatti”, aseguró Hugo Aimar en diálogo con Agencia Paco Urondo.
Y agrega que en su momento le dijo a Javier Aga, el decano en ese momento de Jurídicas de la UNL, que era quien más lo defendía en su puesto, que “si no lo hacían por convicción, hicieran caso al pedido del Foro por conveniencia porque en realidad no era buena propaganda para la maestría tener a un partidario del 2x1 como director de la carrera. Que era una contradicción.”
En diálogo con APU, Aimar aseguró que no sólo no hicieron caso en su momento al pedido de las agrupaciones de Derechos Humanos, “hasta el día de hoy, si uno entra a la página web de la UNL en la Maestría de Teoría Constitucional y Derechos Humanos va a encontrar el nombre de Horacio Rosatti como Director de esa carrera de posgrado”.
Prestigioso matemático
Hugo Aimar es docente superior de la UNL, donde hace 40 años da clases, con trámites iniciados en ANSES. Fue homenajeado por la Universidad Nacional del Litoral al cumplir sesenta años y no es para menos, él es investigador superior del Conicet y Premio Konex 2013 en Matemática -galardón que lo reconoció como una de las 100 personalidades destacadas de la ciencia y la tecnología de la década-. También fue Director del Instituto de Matemática Aplicada del Litoral y vicedirector del Conicet de Santa Fe.
Sin embargo, desde aquella decisión de apoyar el pedido de apartamiento de Rosatti vivió y padeció marginaciones en el ámbito universitario y hasta el pedido de un juicio académico: “Es muy feo para un profesor que dio clases durante 40 años, que se tomó muy en serio a sus alumnos, a la forma de enseñar, que me destraten”, contó Aimar.
Al respecto, también deja entrever esta consecuencia personal en la carta remitida al presidente Alberto Fernández. “No relataré los avatares que se sucedieron en mi carrera, ni con mi gestión como director del Conicet y la UNL. Sólo diré que el ‘partido universitario’ de la UNL, o al menos algunos de sus integrantes fabricaron y construyeron relatos que los condujeron a producir un pequeño grupo de denunciantes (seis) para solicitar que la UNL inicie un Juicio Académico en mi contra. Que también es contra el único investigador Superior del Conicet en Matemática, en actividad y en la UNL. Y que quienes antes se enteraron de ello fueron mis coronarias. Cinco años después de aquel episodio, y tras cinco años de desgaste y acoso permanente y en todos los frentes académicos, la misma semana de la comunicación del trámite de Juicio Académico tuve el infarto que me instaló el stent”, relató.
La respuesta del Presidente a su carta, más allá de lo que suceda políticamente con los Supremos de la Corte, le vuelve a confirmar en la senda sus certezas y convicciones que trató de sostener desde joven cuando abrazó sus estudios en la Universidad de Río Cuarto. Sus coronarias, también agradecen la respuesta que esta vez sí lo dignificó.