Challú: "Si el peronismo quiere tener futuro debe incluir la voz de los empresarios nacionales"
AGENCIA PACO URONDO habló con el empresario y economista peronista Pablo Challú sobre la reorganización del justicialismo de cara a las políticas libertarias de Javier Milei. ¿Por qué cuesta tanto el diálogo entre el peronismo y los empresarios? "Hay muchos empresarios grandes, muchos eh, que tienen una visión peronista de la economía", aseguró.
APU: El economista y dirigente político Guillermo Moreno habla de la necesidad de reorganizar el peronismo y hay que hacerlo reconstruyendo la lógica de ramas, sindical, femenina y juvenil. Pero sumando nuevas ramas, como la empresarial. Es decir, sumar al debate del peronismo a los empresarios que tengan una visión justicialista de la realidad. Vos sos economista y también un empresario peronista. ¿Ves posible esa posibilidad? ¿Por qué es importante?
Pablo Challú: Si el peronismo quiere tener futuro, si va a enfrentar un nuevo desafío después de esta catástrofe, tiene que pensar en un proyecto de producción y empleo. Para ello, hay que poner la vista sobre nuestro sector privado, sobre las capacidades de generar producción y empleo. Una voz que no puede estar ausente es la del empresariado argentino. Ese desencuentro se dio por la reticencia de muchos empresarios de sumarse a una visión nacional pero también de muchos políticos, que ven muchas veces al gobierno como un coto de caza reservado para ellos. Es importante que los trabajadores y los gremios tengan un rol, que muchas veces no la tienen, pero también los empresarios. Siempre bajo una determinada doctrina, que es la peronista.
APU: Vos tenés una trayectoria en el peronismo. Cuesta ver que existan otros empresarios que se definan peronistas. ¿Hay muchos? ¿Estarían dispuestos a participar de esa reconstrucción del peronismo?
PC: Le hizo mucho mal al movimiento nacional y al empresariado toda una corriente de opinión, muy exacerbada desde los medios, que vinculan al peronismo con el populismo y la corrupción. Eso hizo que muchos empresarios que están cercanos a la doctrina se alejen. Esa campaña le hizo mal al peronismo y al país. También te dijo lo siguiente. Hay que cambiar ciertas conductas en el sector empresario. Formo parte de organizaciones empresariales hace 60 años. Hay una idea que hay que cambiar que tiene que ver con ser siempre amigo de todos los gobiernos. Es una posición especulativa de los empresarios que le hizo muy mal al país. El gobierno de Javier Milei llevó tan lejos su política que está poniendo en juego el patrimonio de muchos empresarios. Por eso los veo con ganas de jugar en un lugar donde una doctrina asegure el crecimiento económico, la creación de empleo, el bienestar del pueblo. Hay muchos empresarios que se están acercando.
APU: ¿Qué perfil de empresarios se acercan?
PC: Hay de todo. Los que van a tener una actitud más pública, serán empresarios pymes. Pero hay empresarios grandes que apoyan aunque no quieran mostrarse.
APU: ¿Pero hay empresarios grandes, poderosos, que coinciden con una mirada peronista de la economía?
PC: Son más de los que pensamos. Sobre todo después de estos inventos libertarios o lo que fue el gobierno de Macri. El mundo demostró que el neoliberalismo tuvo un fracaso estruendoso. Muchos que creían que con la libertad era suficiente ahora creen que no. Y eso pasa en todo el mundo, donde se vuelve al nacionalismo económico ante el fracaso del liberalismo fundamentalista.
"Las medidas de Milei ya fracasaron. No resuelven la súpercrisis, agravan todos los problemas. Buscan un país insostenible"
APU: Hay grandes empresarios nacionales que parecen jugar fuerte a favor de Milei, como Galperín, Rocca o la poderosa Asociación de Empresarios Argentinos (donde está Magnetto, también).
PC: Ahí se juegan otras cosas. Hay grupos que están defendiendo sus propios negocios sobre los intereses nacionales. Nosotros queremos formar la rama empresaria del peronismo. Pero el requisito es uno: poner sobre los intereses sectoriales el bien común. No queremos juntar empresarios por juntar. No puede haber lugar para posiciones especulativas, como pasa ahora, de empresarios que buscan salvar un negocio de la propia empresa sin importar lo que pase con el resto. Además, veo que hay muchos empresarios que empiezan a darse cuenta ahora de lo que significa Milei. Nadie se salva solo en una comunidad que no se salva.
APU: Te llevo a tu evaluación del gobierno de Milei, siempre desde el punto de vista de los empresarios. ¿Cuál es tu opinión? ¿Qué está haciendo el gobierno?
PC: El gobierno está aplicando su ideología. No es un tema de errores, el problema de raíz es la doctrina que está detrás del gobierno. Esa doctrina libertaria o neoliberal, no funciona. Son medidas fracasadas, ya fracasaron. No resuelven la súpercrisis, agravan todos los problemas. Buscan un país insostenible, donde solo prosperan algunos sectores de la Pampa Humeda, de la minería y del sector financiero.
APU: Hablar de economía peronista es hablar de industrialización. ¿Por qué le cuesta tanto a la Argentina lograr que la industrialización sea una política de Estado?
PC: Argentina necesita industria para que podamos darle a nuestro pueblo la plena ocupación productiva. De eso depende la felicidad del pueblo y que se elimina la pobreza. ¿Por qué nos cuesta tanto? Mucha gente no entiende que el país tiene una estructura productiva desequilibrada y eso tiene que ver con cuestiones geográficas y climáticas. Dios le dio a la Argentina una zona fantástica, como la Pampa Humeda, que tiene una productividad extraordinaria. Eso le genera al país todo un problema para la política productiva. Porque si uno pone el tipo de cambio bajo, que le sirve a la Pampa Humeda porque su productividad se lo permite, eso perjudica a la industria, que no puede competir con el mundo. Si en cambio, uno tiene un tipo de cambio alto, eso le da una rentabilidad fenomenal a la Pampa Humeda y perjudica a los trabajadores. Hay que reconocer ese diferencial de productividad para hacer política económica. Si no tomamos en cuenta eso, vamos a seguir en esa lógica de ciclos cambiantes.
APU: Ahí retomó ideas del ingeniero Marcelo Diamand, que estudió muy bien esa estructura productiva desequilibrada. Ahí vamos a un instrumento económico que siempre genera controversia en Argentina, como son las retenciones a las exportaciones del agro. ¿Se puede pensar en el desarrollo industrial sin retenciones?
PC: Es con retenciones y aranceles. Pero quién paga las retenciones: las tienen que pagar los dueños de las tierras de la Pampa Humeda, no los productores. Eso termina con la discusión, que no afecte la producción. Pero hay otro aspecto importante: el sistema financiero. Argentina funciona sin crédito, eso no es posible en una economía capitalista. Hay que reformar el Banco Central. El sistema financiero vive de los negocios que les da el Banco Central. Eso hay que cambiarlo de raíz. Tiene que haber crédito abundante y accesible para la industria. En definitiva, hay que reconocer el diferencial de productividad y hay que cambiar al sistema financiero.
APU: Lo llevo a lo empresarial-gremial. ¿Por qué la Unión Industrial Argentina no toma como banderas todas estas discusiones?
PC: Es una pregunta difícil. En la mesa chica de la UIA predominan personajes que están acostumbrados a una lógica que dijimos antes. Quieren estar bien con todos los gobiernos para ver qué le pueden sacar. Es una concepción que prevalece, lamentablemente.
APU: Por último: Moreno suele decir que estamos ante un gobierno muy breve (de meses). ¿Coincidís?
PC: Ya fracasaron estas medidas. Para Caputo, un solo factor explica la crisis, como la fiscal. Es ingenuo pensar eso. Hizo un recorte fenomenal del gasto y aumentó los impuestos. Eso va a hacer caer los ingresos del sector privado y de los trabajadores. Si el sector privado no tiene ingresos, quién le va a pagar impuestos al sector público. Es un esquema que no tiene sentido. La situación fiscal va a caer en un círculo vicioso.