Maduro crece en todas las encuestas
Se acercan las elecciones en la República Bolivariana de Venezuela y comienza a reeditarse un clásico independientemente del país en el que se realicen los comicios: la guerra de encuestas. Pareciera ser que los encuestadores, lejos de tratar de alcanzar un vaticinio certero, lo que hacen es operar a favor de quien los contrató o en contra de quien no lo hizo. De otra manera no se explicaría las diferencias abrumadoras que se dan entre unas y otras. Esa práctica no necesariamente favorece a quien las encuestas dan por ganador, ya que, en casos de diferencias muy finitas, la divulgación de una encuesta que da por ganador a un candidato por mayor porcentaje que el que realmente tiene, puede redundar en que los votantes desistan de concurrir al acto eleccionario, ya que el triunfo se daría por descontado; por el contrario, también podría obrar para azuzar a los partidarios del supuesto perdedor para salir a votar en masa.
En los casos de yerros mayúsculos, no hay pena por mala praxis, y, en definitiva, el mayor damnificado termina siendo el propio elector y el sistema democrático en su conjunto. Lo que está sucediendo ahora en Venezuela, es que en todas las encuestas -incluso en las contratadas por la oposición que dan ganador al candidato González Urrutia- viene creciendo la intención de voto por el actual presidente de Venezuela.
En ese sentido, el director de la encuestadora Delphos, Felix Seijas, cuyo análisis da ganador a González Urrutia, afirmó en una entrevista que la intención de voto del candidato oficialista subió hasta un 26%. Para Seijas esto constituye una “alerta para la oposición”, ya que deberán "cuidar los votos" y "no caer en triunfalismo".
De entre las diez opciones electorales que están inscriptas, todas coinciden en ubicar en el primero y segundo lugar al actual presidente y al candidato impulsado por María Corina Machado, quien no logra trasladar el total de su intención de voto al candidato opositor, y que, aun haciéndolo, no le alcanzaría para impedir que Maduro sea reelecto.
Algunas encuestas, que parecen ser más coherentes entre sí, dan como ganador a Nicolás Maduro por diferentes márgenes. La encuestadora Dataviva posiciona al presidente como líder en intención de voto con más del 54%, alejándose muchísimo de González Urrutia, quien encabeza el voto opositor alcanzando un 19%. Paramétrica, por su lado le otorga a Maduro un 43% contra un 32% del candidato opositor. Ideadatos, por su parte, en el último sondeo de mayo, midió al actual presidente con el 52% de los votos, superando al segundo que lograría un 21%.
Es tanto el desparpajo con el que actúan algunas encuestadoras, que la agencia internacional AFP tiene un departamento denominado fact check, que investiga la metodología y la veracidad de los números difundidos por las mismas. Esta semana, publicó en Factual un artículo en el que cuestiona y demuele a cuatro encuestas difundidas por redes sociales que dan por ganador al candidato opositor Edmundo González Urrutia. Los resultados investigados por AFP demostraron que las respuestas de las encuestadoras Datincorp, Meganálisis, Datanálisis y Hercon fueron “tendenciosas”.
Más allá de los números de cada encuestadora, pareciera ser que los vientos de cambio soplan a favor de un presidente que ha sabido superar momentos álgidos de ataques de la oposición y foráneos y ha superado los cimbronazos que aquejaron a la economía. En un contexto de un mundo multipolar, el presidente se ha afirmado como líder del oficialismo y su avance, con paso cada vez más seguro, pareciera condecir con el fortalecimiento en todos los sondeos que tanto preocupan a la oposición. Falta un trecho para las elecciones, pero la posición del presidente parece verse consolidada y, por el contrario, a la oposición se la ve cada vez más preocupada, lo cual es alarmante, ya que cada vez que no le fue bien en las elecciones, apelaron a salirse de la norma y desconocer el veredicto popular.