“Lula, Haddad y Manuela representan en este contexto electoral la marca de la renovación”
Por Adrian Dubinsky - Enviado especial
Lo veo venir entre una marea de personas que intentan abrazarlo y sacarse una foto con él: la manera renovada del autógrafo. Se va a acercando adonde estoy y se para como si mi actitud le adelantase mis intenciones. Me presenta Alejandro, un compañero argentino militante del PT, y accede cordialmente a que le haga unas preguntas. Debido a que el encuentro es en medio de una actividad política y a que hay cientos de personas esperándolo, la charla es breve.
APU: ¿Usted cree que el caudal electoral de Lula es transferible a la fórmula Haddad – D’ Avila?
Jacques Wagner: Yo considero que la transferencia se va a realizar rápidamente. A pesar de ser físicamente otra persona el programa de gobierno, el proyecto de país, el cariño para tratar a las personas es el mismo. Por supuesto, nada sustituye el carisma de Lula. El problema es que la justicia fue tan flagrante, la persecución tan férrea, que no me cabe duda que la transferencia se dará rápidamente por lógica oposición al encarnizamiento con que han tratado al PT.
Más allá de eso, Haddad es un cuadro extremadamente preparado, fue prefecto de la mayor ciudad de América Latina, prácticamente un Estado con casi 15 millones de personas. Tuvo un gobierno que es considerado por todos los analistas internacionales, y de aquí, como sumamente innovador, positivo, visionario. Él tiene un bagaje de experiencia muy grande a pesar de ser joven. A mi me da mucha tristeza no tener a Lula como candidato, pero puedo decir que Lula, Haddad y Manuela, terminan representando en este contexto electoral, la marca de la renovación, la marca del modelo de la jovialidad, de la juventud, y eso va a contar positivamente para esa transferencia. Actualmente del 25 al 27% de la población prefiere al PT, (Lula cuenta con un 40% y en crecimiento), pero Haddad ya arranca con ese piso, y a lo largo de la campaña la transferencia va a ser mucho mayor. Votar por Haddad es ser solidario con Lula, es homenajearlo y, a la vez, combatir lo que está pasando. Va a ser sorprendente. Para aquellos que quieren el programa de Lula, votando a Haddad van a ver colmadas sus expectativas por la rapidez con la que se harán las transformaciones necesarias para salvar al país.
APU: Las declaraciones del Gral. Villas Boâs (jefe de las FF. AA) amenazando con un golpe militar en caso de que gane Haddad son preocupantes. ¿Qué opina al respecto?
JW: Yo no veo espacio para un movimiento militar que vuelva a interrumpir la democracia. La democracia ya fue interrumpida en Brasil por el autoritarismo judicial, pero no creo que para aquellos que promovieron el golpe, quienes están detrás, tengan interés, por el momento, de algo más que un régimen de fuerza. Para ellos es mucho mejor la hipocresía, un autoritarismo disfrazado de democracia que una dictadura militar.
APU: Por último: ¿cómo ve a Bahía de aquí a diez años?
JW: Creo que ni bien llegamos al poder con nuestro grupo político, a la gobernación en 2007, ya hicimos grandes cambios de infraestructura, pero también en el ejercicio de la política. Un proceso de apertura, de democratización, transformando al gobierno del Estado en un gobierno inclusivo, participativo. Es imposible volver a un modelo antiguo. Preparamos toda una base y además contamos con la cuarta mayor población el país, el quinto mayor territorio, riquezas naturales y una población preparada para la industria y los servicios. Obvio que todo depende de la economía. Si la economía no crece en el país y sigue deprimida, el Estado por sí solo no va a crecer. Pero retomando el proceso de crecimiento iniciado en 2003, tenemos las condiciones necesarias para crecer.