Para The Guardian, la detención de Sala provocó tensión entre Macri y Francisco
Por Nicolás Adet Larcher
A casi un mes de la detención de Milagro Sala y luego de un duro pronunciamiento de sectores de la Iglesia Católica contra la criminalización de la protesta social, el periódico británico The Guardian publicó una nota sobre el tema. Según informó la detención de la dirigente social “ha provocado tensión entre el nuevo presidente argentino de centro-derecha, Mauricio Macri y otro argentino destacado: Francisco”.
El primer paso lo dio el obispo Jorge Lozano, presidente de la pastoral social, quién publicó hace unos días una columna en el diario La Nación que el medio británico cita al abordar la preocupación de la Iglesia frente al accionar del gobierno de Macri. “Hay que tener cuidado de no caer en lo que Francisco llama ‘sutil xenofobia’ bajo el noble pretexto de la lucha contra la corrupción”, decía Lozano.
La detención de Sala se vuelve cada día más insostenible, y las causas para justificar su detención apenas tienen sustento ante la falta de pruebas concretas en su contra. Sumado a esto, el Gobierno omite que al ser diputada regional, Sala tiene fueros que impiden su detención, aunque no su procesamiento. Desde el 16 de enero a la fecha, se sumaron a las protestas organizaciones como Amnistía Internacional, miembros del Parlamento Europeo y el Secretario General de la OEA, Luis Almagro.
Para The Guardian, la liberación de Sala tendrá lugar antes del 27 de febrero, día agendado para una reunión entre Francisco y Macri. Desde el entorno del presidente, no están en condiciones de pagar el costo político que implicaría un reproche del santo padre quién tuvo una relación más fluida con Sala que con el propio Macri. “Sala y el Papa se conocían en Argentina, cuando el pontífice – conocido como Jorge Bergoglio – visitó los barrios pobres donde la organización de Sala presta asistencia a familias”, detalló el medio británico. La última vez que Sala y Francisco se encontraron fue en junio de 2014 cuando la dirigente social visitó al sumo pontífice en una reunión cordial.
The Guardian agregó que “el grupo de Sala dirige escuelas, centros de salud, fábricas textiles y ha construido barrios enteros con las subvenciones que recibió del gobierno nacional”; la organización “distribuye hasta 80 mil subsidios de desempleo que recibe del gobierno para sus partidarios”, concluyó el periódico.