A favor de los trabajadores: embargaron las cuentas de Lácteos Vidal

Este miércoles se conoció el fallo del Juzgado Nacional del Trabajo Nº 69, a cargo del magistrado José Ignacio Ramonet, del embargo de las cuentas bancarias de las empresa Lácteos Vidal para pagar una compensación económica a los trabajadores despedidos de forma ilegal por realizar una huelga.

Hasta el momento la empresa siempre se negó a reincorporar a los trabajadores tal como había sido indicado en un fallo de Febrero del mismo juez y avalado por la Cámara Nacional de Apelaciones. 

Desde el inicio del conflicto la firma que pertenece a la familia Bada Vazquez se negó de manera sistemática a cumplir los requerimientos canalizados a través del gremio Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA), , principalmente sobre recategorizaciones dentro de la planta que se encuentra en la localidad de Monteczuma, en Carlos Casares.

Por estas negativas uno de los últimos fallos de Ramonet establecía el pago de una multa de 10 mil pesos por día por cada uno de los 29 trabajadores despedidos. Estas sanciones económicas, que tienen como objetivo que la firma cumpla el fallo judicial, son conocidas como astreintes.

Lácteos Vidal continuó con diversas presentaciones tendientes a dilatar los procedimientos ante lo cual el mandatario judicial avanzó, como último recurso, con el embargo de las cuentas bancarias y así proceder a abonar el salario de los trabajadores estipulado en 300 mil pesos mensuales que se indexaran comtemplando la inflación. 

De esta manera, el fallo se convierte en "histórico" ya que nunca se habían utilizado -las astreintes- en un conflicto laboral dado que llegada una instancia la firma cumple lo que le ordena la Justicia o entabla una negociación con los trabajadores para terminar con la huelga. 

Sin dudas que la participación directa de el ex presidente, Mauricio Macri, y las candidatas Patricia Bullrich y Florencia Arietto, aprovecharon políticamente el conflicto y lo condujeron a un "callejón sin salida" para la familia Bada Vazquez. 

Un largo conflicto con Lácteos Vidal incumpliendo fallos judiciales 

Sin dudas que el ingreso de la mediática abogada y, ahora candidata a diputada provincial, Florencia Arietto, dirigente del grupo Movimiento Empresarial Antibloqueos (este semana la IGJ le negó la inscripción como figura jurídica ya que consideró que su objetivo "se contrapone con el ejercicio de derechos colectivos de los trabajadores") fue lo que condujo a la firma lechera en base a las negativas y las dilaciones y, por no cumplir el pedidos de los trabajadores sobre sus derechos laborales, reclamos que fueron avalados por el juez José Ignacio Ramonet y las instancias superiores, la firma se encuentra en una situación delicada. Más teniendo en cuenta que el Derecho a Huelga está consagrado en la constitución. 

Arietto, además, condujo la estrategia empresarial de convertir demandas laborales en causas penales, tal como lo expresó recientemente en entrevista con AGENCIA PACO URONDO, el secretario gremial de ATILRA, Heber Ríos. En Febrero de este año la Fiscalía Nº 3 de Trenque Lauque, Fabio Arcomano, consideró que no hubo amenazas ni usurpación de la propiedad en la planta de Monteczuma tal como lo planteaba la abogada mediática y se amplificaba desde Clarín, La Nación e Infobae que repetidas veces titulaban utilzando el termino: "bloqueo".

Llamativamente, el 15 de Marzo, el fiscal general de la provincia de Buenos Aires, Roberto Miguel Rubio, le ordenó a Arcomano que reabriera la investigación que había archivado, y la recaratuló como "compulsión a la huelga", aunque claramente la investigación había determinado que "no hubo hechos de violencia fìsica".

Sí quedó demostrado que Alejandra Bada Vazquez, cortó con cuchillos las banderas del gremio y amenazó verbalmente a los huelguistas.  

Los primeros reclamos de ATILRA en la planta ubicada en el partido de Carlos Casares comenzaron en 2018 y tenían que ver concretamente con las recategorizaciones de los trabajadores, pero la tensión aumentó cuando los trabajadores comenzaron una huelga por tiempo indeterminado que cumplirá un año el próximo 18 de julio.  

"En el caso de Lácteos Vidal, la misma Alejandra Bada Vázquez declaró que las ganancias por día de la empresa eran de más de 33 millones de pesos, mientras que las diferencias salariales que reclamaban los trabajadores por mes rondaban los 600 mil pesos", informó en una reciente investigación de Ana Natalucci y Gabriela Llamosas que fue publicada en TELAM. 

La familia Bada Vazquez suele presentarse como una pyme del interior boanerense, pero en realidad representa un mega emporio que desarrolla distintas actividades que incluyen hasta la minería y son propietarios de 50 mil hectáreas de campo. 

La lucha de ATILRA

"Lo que se reclamaba era muy sencillo, era ser categorizado en la categoría que corresponde de acuerdo a lo que marca el Convenio Colectivo de nuestra actividad. Y después, en relación con las maniobras que hace el sector empresario de poner bajo el monotributo a los trabajadores y no en relación de dependencia directa de la empresa", expresó en diálogo con AGENCIA PACO URONDO, Heber Ríos, referente del gremio ATILRA.  

"Lo que concretamente queremos nosotros y los trabajadores es que se respeten las leyes de nuestro país y que la parte patronal reincorpore a los trabajadores y a las trabajadoras. Hay un porcentaje importante de empresarios que sí cumplen con la legislación vigente y creo que ellos (Lácteos Vidal) son un mal ejemplo para aquellos empresarios y también para todos los ciudadanos de nuestro país que cumplimos con las leyes. Estamos en Argentina y las leyes hay que respetarlas, nosotros las cumplimos y respetamos como buenos ciudadanos, respetando normas de convivencia como deben existir en cualquier sociedad, pero hay que tomar nota de cuando te encontrás con un sector poderoso que se rehúsan, que tienen la espalda para poder pagar esas multas", finalizó Ríos en diálogo con APU.