El Gobierno no proporcionó medicación para 15 mil personas que se encuentran en tratamiento con el VIH
La destrucción del Ministerio de Salud y su absorción secundaria por parte de Desarrollo Social presentó un nuevo conflicto vinculado con faltantes de medicamentos para el tratamiento del VIH. La Fundación GEP (Grupo Efecto Positivo) consultó a la Dirección Nacional de SIDA y el organismo no tuvo otra opción que presentar los números: están en falta desde hace un año stock de tres medicamentos antirretrovirales. Los medicamentos faltantes en el país son el de efavirenz, el de la combinación darunavir/ritonavir, y tenofovir/emricitabina/efavirenz desde junio último. Estos medicamentos son fundamental para la sobrevida de los pacientes. Son 15 mil personas las que se encuentran afectadas por esta ausencia.
Si no se llegara a tomar medidas urgentes, para después del 10 de diciembre se agotará el stock de 15 medicamentos. Actualmente hay 86.338 personas con VIH que se encuentran en tratamiento antirretroviral en la Argentina. El recorte de la salud pública fue de 1.724 millones de pesos solo en el 2019. Esto no solo afecta a remedios vinculados al VIH, sino a Tuberculosis y la Hepatitis C.
La Fundación GEP expresó que ante el faltante de medicamentos, son los propios médicos que se ven obligados a modificar compulsivamente la composición de los esquemas de tratamiento. La Directora Ejecutiva Lorena Di Giano expresó que: “Lamentablemente estamos comprobando que lo que se preveía cuando supimos del recorte que el gobierno hizo en el presupuesto de Salud para 2019. Las personas con VIH no están recibiendo sus medicamentos en los hospitales y centros de salud de las distintas jurisdicciones del país. El ajuste es inaceptable y viola los derechos fundamentales de lxs ciudadanxs que necesitan de un Estado activo para asegurar sus necesidades. El accionar del gobierno es delictual y premeditado”.
Desde el 2015 la Fundación estuvo presentando documentación al Observatorio de Acceso y Compras Públicas por irregularidades en la ejecución de los presupuestos. “En estos cuatro años renunciaron 3 directores de la Dirección de Nacional de Sida y ETS. Todos los años hubo faltantes en los tratamientos y reactivos, todos han tenido dificultades en la realización de las compras”, expresó el comunicado. A esto se le suma la falta de vacunas, medicamentos para otras patologías, la degradación de Ministerio a la Secretaria de Salud. “Estamos frente a un plan sistemático de desmantelamiento y vaciamiento de la salud pública. Estas maniobras sólo buscan imponer la CUS; la privatización encubierta de la salud a través de un sistema de aseguradoras. Este gobierno considera que la Salud es un gasto y no un derecho. Sin medicamentos, nos morimos”, dijo en tanto José María Di Bello, Presidente de la Fundación GEP.