Memoria, Verdad y Justicia para Santiago Maldonado
Santiago Maldonado era un joven nacido en Buenos Aires, con sueños y compromiso. Era artesano y bohemio y por sobre todas las cosas solidario. Eso lo llevo a recorrer el país. Se encontraba viviendo en la provincia de Chubut, cuando el gobierno de Mauricio Macri en agosto de 2017, desató la represión brutal contra la comunidad Mapuche y la brutalidad de las fuerzas represivas de Gendarmería comandada por la ex ministra de seguridad Patricia Bullrich. En esa situación se produjo la desaparición forzada seguida de muerte de Santiago Maldonado.
Si hablamos de Maldonado la realidad nos lleva también al asesinato de Rafael Nahuel que, en noviembre de 2017, sufrió junto a otros integrantes de la comunidad mapuche, una represión brutal. No portaban armas de fuego, ni eran integrantes de células terrorista cómo decían las fuerzas de seguridad y la justicia en ese momento ellos necesitaban hacer todo eso para entregar esas tierras y proteger al aliado y amigo de funcionarios cambiemos Joe Lewis el magnate pirata.
Pasaron seis años de la desaparición seguida de muerte de Santiago dónde hubo mucha falacia, una justicia infame y cómplice.
Seguimos exigiendo saber qué pasó y cómo murió Santiago Maldonado. Los funcionarios de macrismo y la Justicia le deben dar respuesta y decir la verdad a la familia y al pueblo argentino.
No queremos más crímenes impunes.
Necesitamos urgente una ley contra la violencia institucional con perfilamiento racial, en este caso, cómo en caso el de Lucas González, el de Ramón “Sugus” Santillán y tantos otros casos. En todos esos casos queda demostrado que las fuerzas de seguridad: persiguen, torturan, desaparecen y asesinan por portación de cara, color de piel, vestimenta y lugar dónde habita. Este gobierno quizás no avale estos hechos de violencia institucional pero la realidad es que siguen sucediendo.
Por eso exigimos esta ley que es una herramienta fundamental y necesaria para la defensa y derecho del pueblo, es inadmisible que a 40 años de democracia no haya una ley que nos proteja de las violaciones a los derechos humanos que ejerce las distintas fuerzas de seguridad del Estado.
No queremos más casos como los de Santiago, Rafael, Sugus, Sebastián, Miguel, y tantas otras víctimas que hubo en el transcurso de los 40 años de democracia. Por la memoria de todos ellos decimos “basta”.
Necesitamos y deseamos vivir en una Argentina dónde salir a trabajar, estudiar o divertirse no nos cueste la vida.