El Facundo Fierro
Por Branco Troiano
El gaucho Sarmiento
En ti pienso pa recitar
pa cantar de contrapunto,
cimarrón de nuestras tierras
animal llamao Facundo.
Tu gloria ha sío tan extraña
no has obrao más que con cucañas,
y asín hay quienes te lloran
gauchos brutos, ariscas señoras
que enterraos en el guadel que has dejao
hacen barullo,
¡qué manga e bárbaros!
Pero mucho no preocupes
mas ande el Rosas por aquí,
ese bien te representa
siempre dice “porque sí”.
Ustedes van enancaos
tu desde allí arriba, él desde aquí abajo,
estaquiando sueños y futuros
Transformando sonrisa en rostro duro.
En nombre de la República
cuánta carne de cogote han dejao,
en esta Buenos Aires bella
antes llena de hombres entonaos.
Y como un caballo desocado
asín es que andamos todos,
echando panes y llantos
arrastrando brazos, embuchaos.
Por Sebastián Castillo
El Facundo por José Hernández
Déjenme contarles de ese tal Facundo. Pues al pueblo hace falta cantarle de monstruos y torturas. Y en ese lugar de la historia se ha encontrao este gaucho. Que por algunos años ha caminao entre la muerte y la vida. Algunos lo han encontrao andando en los desiertos de la patria, después de muerto. Otros tantos lo han visto en Don Juan Manuel de Rosas. A ese guapo yo lo conozco. Alguna que otra vez lo he tratao. Dicen que anda igualito a él por la Buenos Aires y el mundo. Haciéndose el domador del pueblo y su mejor entendedor a todos les habla.
Pero a este supuesto genio yo lo conozco. Y acá está el cuento y la cuestión. Pues por más que buen entendedor sea, atrás hay un verdadero traidor.