Franco Cesario: “Prix D´Ami fue el mejor club de rock, el CBGB argentino”

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APU ENTREVISTAS

Franco Cesario: “Prix D´Ami fue el mejor club de rock, el CBGB argentino”

18 Agosto 2024

El productor audiovisual y director Franco Cesario, en conversación con AGENCIA PACO URONDO, reflexionó sobre el documental Una noche en Prix d’Ami, mítico lugar que fue refugio para el rock de los 90.

“Que esto vea la luz sirve más que nada para que se conozca y nutrir de cultura a las nuevas generaciones, y a la nuestra llevarlas a la nostalgia de todo aquello que tuvimos y que en su momento no supimos valorar”, nos dice el realizador.

Agencia Paco Urondo: No hace tanto mostraste el working progress, el borrador de este documental y podemos decir que por fin salió ¿Después de cuánto tiempo?

Franco Cesario: El proyecto empezó a tomar vida por mayo del 2019, casi fortuitamente. Poseo un material de archivo de más de 300 horas de rock argentino e internacional, ya que hace más de 30 años que empecé a trabajar en el medio con una inquietud lógica y básica, que era ir a filmar o grabar. Éramos curtidores de viejas galerías después de un recital, porque estaba quien había conseguido el (cassette) pirata que grabó el de la consola. Fortuitamente me encontré con uno de los dueños del último Prix D´Ami, con Pablo Yulita, el Chulo, que me preguntó si tenía imágenes del club. “Bocha”, fue mi respuesta. “¿Y por qué no me armas algo, que al final nunca me quedé con nada?”, me dice. “Armo un DVD y te mando”. Terminaron yendo dos.

Lo vio y mi hermano (trabajaban juntos) me contó que quedó encantado. Se me ocurrió llamarlo: “Mirá, quería contarte algo”… No me dejó terminar la frase: “No me contés nada, venite, armamos números y vamos a hacer algo”. Yo pensé está loco, no sabe lo que voy a proponer. Empecé a digitalizar material, abrí la caja de Pandora, obviamente, y aparecieron cosas maravillosas. Ya en la muestra aparecieron cuatro artistas, no quería mostrar demasiado y sin embargo tenía mucho de mi material, el 80% del archivo audiovisual era mío y agradecí que me respetaran los créditos, la artística, se me consultó qué poner y que no.

Lo cierto es que nació este bebé que tiene más de 176 testimonios y lo que se ve es un resumen, comprime en casi dos horas, ocho capítulos de una serie documental. Nos parecía necesario extractar y mostrar lo más importante, por lo que al principio del documental hay un cartel que afirma “esto es un resumen, lo más cercano…”, porque sabíamos que alguno iba a quedar afuera.

Agencia Paco Urondo: ¿Cómo conectas con Prix D´Ami y cómo empezaste a trabajar ahí, filmando?

F. C.: Mi padre me llevó al primer recital que yo concurrí, los últimos tres show de Serú Girán. Me esperó en la puerta, pobre, porque eran tiempos duros, más para un chico de 13 años. Eso me partió la cabeza y me volví inquieto, empecé a ir a lugares en el 85, ya estaba en quinto año de secundaria y una noche no nos dejaron entrar en Palermo a ver a Charly Giovanni y los de Plástico, una formación que tuvo Charly con los GIT y Fito post Clic modernos, y caí al primer Prix D´Ami, al de Arcos. Pedimos entrar con un primo mayor y un amigote con los que estaba y vimos a Don Cornelio y la Zona. Impresionante, yo dije ¿Qué hace The Cure tocando en Buenos Aires?

URL de Video remoto

No volví a ir, quizás porque, como decía, en los primeros años de democracia era complejo ver rock. Volví ya al segundo, el de Ciudad de La Paz al 2600, el que se convierte en mítico. Se arma de un nombre y los músicos querían tocar ahí. Vi de todo: Fito (Páez), Charly (García), Fabi (Cantilo), Don Cornelio, Man Ray. Aparte, era impresionante las microguías que hacía la Rock & Pop, uno se preguntaba ¿qué será este lugar?

Era muy alucinante, había unos televisores pasando Batman y Robin, Los Tres Chiflados o Pepe Biondi. Después, tenías una barra y en declive, al final, el escenario al fondo. Era un lugar que querías ir, porque aparte tenía una calidad de shows impresionante. En ese entonces no conocía dueños ni nada, pero ya tenía una pequeña cámara, una Panasonic, y entré a filmar un par de veces. Un día me ofrecieron hacer cámara.

Ese local cierra en 1991 y se convierte en la disco Mix y arranca la historia del tercer Prix D´Ami en Monroe 2315. Ahí ya conocí al Chulo, que me decía “Camarita”. Yo hacía copetes para unos programas de Cablevisión. Empecé a filmar y todo eso se fue guardando. Ya trabajaba para Music 21 y mucho del material que filmaba allí se utilizaba en Rock and Roll, en Sold out, también se hacía ahí el programa de Dani y José García Moreno.

APU: Ese material de Music 21 ¿existe todavía, hay algo?

F.C.: Parte la tengo yo, lo mío; parte lo tiene el dueño que anda pululando por ahí. Él era como un seleccionador, el que guiaba la nave maestra, pero se rodeó de jóvenes que evidentemente tenían algún talento. Entre el 91 y 1996 filmamos más de 300 shows de lo que te imagines. Los músicos que venían del exterior eran filmados por nuestro móvil, salvo cuando al show iba a salir por Telefé y o Canal 13, que la dirección de cámaras terminaba siendo hecha por Mazitelli o Caserta, que dirigían como si estuvieran grabando Grande, pa. Nosotros teníamos en el background entre 15 o 20 camarógrafos que hacíamos recitales, sabíamos de planos, de estética de shows.

Luego terminé trabajando en MTV, por ende, las cosas no las hacía tan mal. Recordemos que en el 92 hay una nueva ola del rock nacional a través de Tango Feroz, todas las compañías querían rock nacional. BMG crea Iguana, ya estaba Radio Trípoli, Melero estaba con su sello y tuve la suerte de vivirlo, firmarlo y registrarlo. Mucho de eso pasaba por Prix D´Ami. En el tercero, vi a los Brujos con Cerati, a Pil Trafa tocando con Charly. Tenías que ver las caras con que se miraban. Pero apagás las cámaras y, como siempre, están las peleas, “vos sos punky”, vos esto otro.

APU: A los artistas internacionales también los podías encontrar ahí, después de los shows.

F.C.: Nick Cave, Morphine, los Red Hot Chili Peppers con los Kuryakis, Iggy Pop, los dos Nirvana menos Kurt Cobain mirando a Los Perros Calientes tocar, Carámbula haciéndoles fuck you desde arriba. Era muy loco, Prix, Hilda cantando “Todo cambia” y David Byrne moviendo la patita en el público. Era un lugar cultural muy importante. King Crimson vuelve a tocar en 1993, después de casi siete años de no hacerlo y el primer lugar del mundo en el que toca es Prix D´Ami. Después tocan en el teatro Broadway para un selecto grupo de gente.

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Documental Prix D´Ami

 

Pero no solo pasaba el rock, imagínate que lo que hoy es Fuerza Bruta, que en ese entonces era De la Guarda, tenía un lugar los miércoles, dado por el Chulo y el Gallego para que mostraran lo que hacían. Carlos Casella con El descueve, Daniel Aráoz haciendo sus perfomances de lo que hoy sería un stand up. Pinturas, esculturas, era un espacio multiarte a todo trapo. Sonido JBL varilite, un escenario que subía y bajaba hidráulicamente; en planta baja había videowalls mientras comías. Era muy moderno, muy Nueva York, pero en pleno Belgrano.

APU: Vos que recorriste los tres ¿Cómo los podrías describir a cada uno si tuvieras que hacer un trazado imaginario?

F.C.: Yo lo cuento, pero la línea argumental del documental está basada en eso. Los músicos trazan una línea argumental que nos lleva por las tres etapas. El primero fue la génesis, el hippie, el bohemio, no entraban más de 100 personas, escenario al mismo nivel del público, puertas con candil, Lebón cocinando pan en la cocina. Último lugar en el que tocan Los Redonditos de Ricota antes de pasar a las grandes ligas. Fue el iniciático, el más jipón, creo que en el que más perdieron, en el que más razzias hubo.

El segundo ya lo llevaron más al centro, a Belgrano, estaba muy bien ubicado, ya tenía otra calidad de sonido, otras luces, otra dinámica. Arrancaba a las 10 de la noche y eran las 6 de la mañana y había gente. Terminaban de tocar las bandas y la gente se quedaba porque, por ahí a las 3 de la mañana, a Fabi se le daba la loca, se subía al escenario y tocaba. Para Fabi, Charly, Pipo Cipolatti, Gabriel Carambula, La Clota Ponieman, Fito, era como su casa. Y eso había generado una cultura de que vos ibas a Prix porque sabías que algo podía pasar, más allá de la entrada que pagaras.

El tercero yo lo llamó la nave nodriza, una cosa de locos. Muy moderno, único local en los 90 abierto las 24 horas. Me encantaba Rochi, por ejemplo, en Congreso, pero estaba abierto viernes, sábado y domingo. Prix estaba abierto de lunes al lunes.

El mejor club de rock, el CBGB argentino, ni más ni menos. Hoy no hay lugares así. No tienen esa cultura, no tienen los dueños, el negocio ha mutado. Por otra parte, la mayoría de las bandas tiene que pagar para tocar. El Gallego decía “la entrada va a estar tanto y los músicos se van a llevar tanto; y si no llegamos a eso, se les da igual”.

Hay cosas que vi y nunca más volví a ver, que mi hija de 20 años las ha visto en video me decía “estoy impresionada, qué bueno esto”. Cuando en el 93 se hacen unas modificaciones y se reinaugura, Charly y los Robertones graban un CD con Mario Breuer en Panda que era la tarjeta para entrar. Tenía todas estas microvías de Prix D´Ami, pero estaba Samalea, Lupano, Jorge Minissale, Charly y el Zorrito (Von Quintiero) Muchos de esos bocetos terminaron siendo parte de La hija de la lágrima. Con ese CD entrabas al boliche. Allí hizo la conferencia de prensa Serú Girán para su vuelta en el 92, también tocó por primera vez Maná en Argentina, tocó La Ley,Café Tacuba.

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Franco Cesario

APU: Ahí también se intentó cocinar un proyecto que finalmente se truncó: la película famosa sobre Soda Stereo.

F.C.: Al irse Daniel Morano, que fue el dueño del primero y el segundo, se lo vende a lo que eran los socios de Rock & Pop, Roberto Costa, lo que es Pop Art. Era complicado, había que encontrar fecha. De hecho, ya llamándose Dr. Jekyll (aunque no dejaba de ser Prix D´Ami) se cierra un mes para que Soda ensaye arriba para el último concierto. Eso está en el documental.

Cambia de nombre porque se va el Chulo, se va a la Rock & Pop, queda sólo el Gallego que se asocia (por lo que sabemos) a los que eran Margarita Rock and Roll. La estructura del lugar cambia, vienen a tocar bandas un poco más pesutis en cuanto a género y después el mismo negocio se fue viniendo a pique. No nos olvidemos que después del 96 en Argentina, como empezaba a cantar Bersuit, se venía al estallido y había algunos que ya lo sabían y otros que estábamos en ascuas.

APU: ¿Con qué nos encontramos quienes queramos ver el documental?

F.C.: Fricción con Richard Coleman, Charly García y Gustavo Cerati cantando “Héroes”. Charly García tocando con Herbert Vianna “Satisfaction”. La reunión de Serú Girán, Fito Páez, Fabiana Cantilo, único recital de Don Cornelio filmado a cuatro cámaras con sonido de consola que hay dando vueltas. Chilli Peppers, los Kuryakis, más de 150 músicos. Un documental de la hostia.