"La cultura se compone de las expresiones de la gente sencilla y cotidiana"

Por Diego Akerman y Guillermo Imperial

AGENCIA PACO URONDO: ¿Qué había antes acá y por qué este espacio estaba cerrado?

Gonzalo Piñeiro: Acá siempre funcionó el museo, estuvo cerrado desde fines del 2009 al 2010 por un problema edilicio que sufrió la infraestructura por la rotura de un caño. De ahí en más las paredes se han roto y se han perdido algunas obras valiosas, se han roto caños, una catástrofe. A raíz de eso, por falta de subsidios y por falta de fondos de la propia comisión, se decidió cerrarlo en el corto plazo hasta que haya una solución o algún proyecto que pueda renovar estas instalaciones. En el 2012, nosotros acercamos a la comisión administrativa de la fundación un proyecto para poder abrir el museo y acondicionarlo y darle vida nuevamente.

APU: ¿Cuánto tiempo hace que están trabajando el tema edilicio?

GP: A partir de junio del 2012 que nos aprobaron el proyecto y nos dieron la llave para empezar a trabajar. De ahí en más empezamos a buscar pinturerías, pintores, gente que se sume. Fuimos juntando apoyo e hicimos una colecta de dinero para poder comprar la pintura y demás materiales y con la ayuda de compañeros y gente que se acercó empezamos a trabajar en los arreglos. Tenemos obras en restauración que pronto se van a poder exhibir.

APU: ¿La editorial de ustedes ya está en funcionamiento o va a estar en funcionamiento junto con el museo?

GP: No, la editorial ya está en funcionamiento. A partir de diciembre del año pasado hicimos la primera tirada de libros que fueron cuatro títulos que sacamos. Fueron dos propios, uno escrito por Juan y otro escrito por mí y otro compañero, después hicimos dos reediciones de libros que ya existían. La idea es hacer conjuntamente la reinauguración desde el museo y hacer una presentación formal de la editorial con siete títulos.

APU: Juan, tu libro ¿De qué se trata?
Juan Tristán: Mi libro es una especie de fábula adolescente. Es la historia de un chico que se viene haciendo un montón de preguntas existenciales de orden político y filosófico que más o menos a los 20 años deja el trabajo y sale a recorrer el mundo como un quijote. Ahí escribo un montón de poemas que el pibe va reflexionando con las cosas que pasa. Hay un poemario sobre lo que se va viendo de sus reflexiones, lo que es encontrarse con un barrio, con una cooperativa de trabajo, con la devoción al gauchito Gil. Lo que es darse cuenta que hay un montón de situaciones sociales que no tienen visibilidad y que previamente él no había podido ver y que va descubriendo y escribiendo, es la aventura de un poeta.

APU: La idea sería, el museo sumado a la editorial. ¿Qué otras actividades se van a sumar?

GP: En principio el 17 de junio vamos a lanzar tres talleres. Un taller literario, un taller de dibujo y pintura y un taller de caricaturas específicamente que es la materia del museo naturalmente. Por otro lado, vamos a armar actividades culturales de nuestra editorial, la primera va a ser un ciclo de charla de arte popular.

La primera charla va a ser sobre Leonardo Favio como paradigma del cine popular y una genealogía o un mapa del cine popular de autores que siguen esa misma línea. La segunda: una sobre Discepolo y el tango popular y la tercera sobre Roberto Arlt y la literatura popular. Esa sería la primera actividad en el museo realizada por nosotros. El museo como tal está abierto a la propuesta de organizaciones, de editoriales, de programas de radio o lo que fuere que quieran desarrollar en cuanto a actividades en el museo.

Lo que tienen que hacer es contactarnos y nosotros ponemos el espacio a disposición de quien quiera organizar actividades culturales. Estamos predicando y tomando una idea que ya está instalada que es la del museo vivo, no la del museo donde van a ver obras muertas que están colgadas en la pared, sino que esas obras cobran vida en tanto el museo tenga vida en sí mismo. Nuestra idea es proponer talleres, seminarios, ciclos de charla, presentaciones de libros, proyecciones audiovisuales.

Estamos diseñando para más adelante ciclos de cine de animación para trabajar sobre la propuesta específica del museo que es un faro que nunca queremos perder de vista. Este es un espacio que tiene un legado que es el humor gráfico, ahí hay un universo muy rico que queremos explorar. Pero a la vez la idea es ligar el humor gráfico a las otras disciplinas culturales que también tienen mucho que aportar y que nos ayudan a verlo en perspectiva.

Esto ya está en nuestra imaginación. Otras cosas que nos gustaría generar serían lecturas en vivo de literatura que se hace mucho en centros culturales con algún dibujante haciendo dibujos en vivo. Actividades que liguen las disciplinas, como la música con el humor gráfico o el cine y el humor gráfico, esa es la propuesta que tenemos para el museo. Más allá de que sea un espacio que tenga obras colgadas en la pared, también sea una casa de cultura que permita encuentros de varias disciplinas. Todo aquel que quiera venir acá con una propuesta será bien recibido, se lo va a escuchar e intentar integrarlo a esta propuesta.

APU: ¿Los talleres y las charlas van a tener algún costo en particular?

GP: En realidad eso es a convenir con los docentes, probablemente sí van a tener un costo y si más adelante conseguimos la posibilidad de subsidiarlo desde afuera, nuestra intención es que sea gratuita. Los ciclos de charlas sí van a ser gratuitas, en principio la idea es cobrar los talleres porque, naturalmente, los docentes cobran un sueldo por sus servicios. También nos gustaría poder conseguir un subsidio, ya sea estatal o privado, desde ya que nuestra preferencia es que sea estatal. Nos encantaría poder brindar talleres gratuitos pagándole el sueldo correspondiente a los docentes. No es la idea lucrar con el espacio ni que tenga un fin lucrativo, pero hay que ver cómo se financia eso, porque de alguna manera, alguien lo tienen que financiar.

APU: A parte de lo que sería el área artística ¿Cuál es el lugar de la militancia en el museo?

GP: El museo es una institución que no es un espacio militante, lo que sí ejercitamos por un posicionamiento filosófico es un posicionamiento cultural regional, una posición que siempre eleva la cultura nacional porque creemos que es la constitución de nuestra identidad. Muchas veces en el ámbito cultural ha habido una tergiversación que nos quiere hacer creer que la cultura a adoptar es una cultura extranjera y eso sí es parte de un posicionamiento político que tiene que ver con la extranjerización de lo nuestro y con una baja autoestima de lo que es el ser nacional. Nosotros tenemos bien en claro que este lugar va a trabajar con prioridad sobre las expresiones culturales argentinas y latinoamericanas sencillamente porque somos argentinos y latinoamericanos.

El museo en sí no es una institución militante, es una institución que tiene un posicionamiento cultural que consideramos lógico. Nosotros creemos que la cultura se compone de las expresiones de la gente sencilla y cotidiana. La cultura en sí es un hecho popular.

APU: Cuando el museo abra sus puertas, ¿con qué se va a encontrar la gente? ¿Tienen un inventario de la cantidad de obras que hay?

GP: El museo cuenta con un patrimonio de más de 450 obras, de las cuales obviamente no podemos estar exhibiendo todas porque se satura el espacio, de repente las obras entre ellas se hablan y así como ves una no ves diez más que te puede interesar o gustar. Nuestra idea es respetar lo que venía haciendo el museo en cuanto a una distribución más específica con un salón de Caras y Caretas que es donde están los originales pero tratando de darle luz al espacio, que haya una buena distribución, que puedan venir, tomarse su tiempo para ver las obras.

APU: ¿Quién fue el curador?

GP: En eso nos asistió Federico Parodi, que es un pintor que va a estar a cargo del taller de dibujo y pintura dentro del museo. Tenemos las obras separadas en serie porque creemos que se tienen que ir administrando y exponiendo gradualmente. Este museo tiene la característica de que todas las obras que están acá fueron donaciones de los autores.

Nuestra intención, en la medida en que lo vayamos poniendo en funcionamiento, es que los autores actuales continúen donando obras y el museo avance en su patrimonio, porque esa era la forma histórica del funcionamiento. El museo abrió hace 68 años, en abril del año 45 y todos los autores, inclusive Walt Disney, trajeron y donaron las obras, no hay nada que el museo haya comprado y nosotros vamos a continuar con esa política.

APU: Recordanos la dirección.

GP: Lima 1037, entre Humberto 1º y Carlos Calvo. En principio, previo a la inauguración, tenemos abierto los viernes de 17:30 a 20:30 hs. Es la preinauguración, lo estamos haciendo a modo de prueba para que la gente se acerque. A partir de la inauguración, vamos a lanzar además del cuerpo de talleres, los nuevos horarios que van a tener una amplitud mayor en la apertura del museo.

APU: ¿Hay algún teléfono para que la gente se pueda contactar?

GP: Hay teléfono, mail, Facebook. El correo electrónico es mdelacaricatura@gmail.com y lo mismo en Facebook.