Recomendación de amigo: El regreso

Por Santiago Gómez, desde Florianópolis

En la cultura occidental la valentía es sinónimo de virilidad; todos los varones hemos escuchado alguna vez el desafiador "dale cagón". Con esa conocida escena comienza la primera película que dirigió Andrei Zvyagintsev del año 2003, en la que muestra a un grupo de niños que suben arriba de una estructura de madera muy alta para saltar al agua. Entre los chicos están Andrei e Iván, dos hermanos, Andrei tendrá unos catorce años e Iván doce. Iván no se anima a saltar, le pide al hermano que lo acompañe a bajar por las escaleras. Querés que te digan cobarde, le pregunta el hermano. Andrei salta, Iván no. Se queda tiritando de frío mientras baja el sol en Rusia hasta que la madre sube hasta allá arriba a decirle que baje, que no es necesario que salte, que nadie se enterará.

Los hermanos volverán otra tarde de jugar, una pelea entre ellos los hará llegar corriendo a su casa y encontrarse a un hombre sentado en el living de la casa, la madre rígida, también la abuela: el padre ha vuelto. Ellos tienen que ir a su cuarto a buscar una foto en la que ellos son niños para confirmar que ese hombre sea quien dice ser, no lo recuerdan. Andrei está feliz porque el padre ha vuelto, Iván no se olvida del tiempo transcurrido, quiere saber de dónde volvió y para qué.

El padre le dirá a sus hijos que lo acompañen, no saben a dónde, la excusa es ir a pescar y en ese viaje quedarán a la vista la valentía y la cobardía de cada uno de los hermanos respecto a la verdad, que es a fin de cuenta frente a lo único que el coraje vale algo. Cuando la verdad está ahí, cuando las cosas se muestran como son, están los que prefieren evitar el conflicto y los que no retroceden porque la verdad se los impide.

Para quienes tienen hermanos y han vivido conflictos con sus padres que implicaban tomar posición entre hacerse o no el boludo, esta película les parecerá fenomenal. Para quienes se analizan, para psicoanalistas, para psi de toda clase, película obligatoria, a fin de cuentas cada uno construye sus respuestas.

El regreso es una película excelente, con unas imágenes lindísimas y con una actuación descomunal como la de Iván Dobronrávov, el niño que hace de Iván. Las caras que consigue lograr ese chico son increíbles. El trabajo de dirección que hizo Zvyagintsev fue maravilloso. A quienes les guste esta película, puede buscar la última de este director ruso llamada "Leviatan", que generó mucho revuelo por mostrar el cuadro de Vladimir Putin en una oficina pública mientras se observa la conducta incorrecta de un funcionario público. {youtube}LTQsaohfwH4{/youtube}