Taller de poesía en contexto de encierro
Por Pedro Nazar
¿Qué se puede decir de la poesía? Es una palabra que abre puertas y no se puede decir exactamente lo que significa. Para algunos la poesía es una cosa y para otros, algo completamente distinto: un arma cargada de fututo, catarsis, un método para ordenar el pensamiento, el razonamiento por analogías…
Cuando los participantes del taller de poesía en la Unidad 47 de José León Suárez piensan en poesía, hablan de cumbia, de rima, de lenguaje tumbero... No decimos que eso no es poesía, sino que tienen que romper esa lógica y buscar la propia. La poesía puede romper lógicas impuestas, debe hacerlo. La metáfora es un desplazamiento del sentido.
Que la poesía está alejada del mundo es cierto, que es poco práctico hablar con metáforas también. Pero la poesía construye un pensamiento, nos enseña a desplazarnos del centro, a buscar nuevas formas de decir y de comprender. En eso también radica la libertad.
Las cadenas se trasmutan
La roca y paredes
Que me reducen el horizonte
Se muelen como polvo
El río de mis antiguos temores
(mi largo camino)
Tiene sed
(Darío Guevara)
El objetivo del proyecto es que la voz de un poema (un poema siempre es algo solitario) se replique en muchas voces.
Mi vida desnuda
Al fondo del corazón
Corrió hacia la luz
Para gritar soledad
(Pablo Banchi)
Pluralizar la voz de un poema, no desde un compromiso moral o ético (la poesía no tiene moral ni ética) sino desde el compromiso con su libertad. Mostrar que una voz de dolor es la voz de muchos, cualquiera sea la pena. Una voz que grita libertad dentro de un poema, debe proclamarse.
Dibujos oscuros queman el hielo
Como montañas
De pastos ardientes
Gritando no
Como el tiempo que esperé
Oir hablar de los pájaros.
(Darío Guevara)
La metáfora percibe semejanzas y correspondencias donde ningún otro hubiera sabido encontrarlas, es una forma de conocimiento que nuestra cultura fue desplazando cada vez más hacia los márgenes.
En la imprecisión de un poema hay un sentido abandonado. Así nos detuvimos frente a la hoja en blanco, con ese ahínco, con esa certeza, todas las semanas, todos los jueves entre Abril de 2015 y Junio 2016 en la unidad 47 de José León Suárez, en el marco CUSAM del taller de poesía en las casitas.
La imposibilidad material de editar un libro impreso nos llevó a pensar en grabarlo. Nuevamente las condiciones de grabación dentro de un penal nos obligaron, luego de algunos ensayos, a desistir de esta opción.
Cansado del agua derramada de la vida
De las hienas de palabras
Del ocaso de las noches
Del perro mudo de aullar
Cansado de los golpes de la mano
De algodón
De las olas de cemento y
De los sapos
(Esequiel Somorrostro)
Surgió la posibilidad de contactarse con figuras de la cultura que replicaran en su luz, el sombrío rincón en donde fueron escritos estos poemas.
Lo que se escucha es eso, sus poemas en las voces de actores y músicos que generosamente contribuyen a la difusión de estas poesías:
Rita Cortese, Liliana Herrero, Cristina Banegas, Tata Cedrón, Eduardo Aliverti, Alberto Szpumberg, Pablo Dacal y Eva Shin
Todos los integrantes del taller, donde quiera que estemos siempre, les agradecemos su dicción y su oficio. Sin ustedes seguiría la soledad. Cada una de sus voces es un abrazo.
Donde antes había silencio, ahora, hay una señal.