Massot imputado: matar y morir….
Por la redacción de APU
El martes se tomó declaración indagatoria a partir de las 10:15 en la sede del Juzgado Federal Nro. 1 de Bahía Blanca, a Vicente Gonzalo Massot, luego de que se diera lugar al recurso presentado por los fiscales José Nebbia y Miguel Ángel Palazzani ante la Cámara Federal de Apelaciones. Finalmente el menor del clan Massot debió presentarse a rendir cuentas ante la justicia tras haber sido imputado por delitos de Lesa Humanidad ocurridos en la última dictadura.
Pesan sobre el ex funcionario menemista, fundador de la revista Cabildo, golpista de cuna, defensor y amigo confeso de Massera, imputaciones que según consideraron probado los fiscales lo configuran como coautor del homicidio de los obreros gráficos Enrique Heinrich y Miguel Ángel Loyola, “instigándolo, determinándolo, prestando aportes indispensables para su concreción material y encubriendo a sus autores inmediatos”, y por haber efectuado “aportes esenciales”, que “consistieron en el ocultamiento deliberado de la verdad”, en los secuestros, torturas y homicidios de 35 personas.
Ayer la justicia bahiense vivió un hito. El largo y obstaculizado camino que demandó lograr que el gran intelectual de la derecha más reaccionaria llegue a sentarse en el banquillo de los acusados, fue una tarea emprendida por funcionarios del Ministerio Público Fiscal que lleva ya varios años. Si tomásemos la pluma cargada con devoción sacro santa que caracteriza a Massot, podríamos decir que la labor llevada adelante fue mesiánica.
Hugo Cañón y Abel Córdoba son los ex funcionarios que comenzaron con la investigación y recolección del inmenso caudal de prueba que dejó al descubierto que el aparato represivo tenía en su engranaje un actor que operaba desde las sombras de la dirección del pasquín La Nueva Provincia. Fueron luego, José Nebbia y Miguel Palazzini quienes finalmente pusieran un punto final a las peripecias judiciales que solo le garantizaron a los Massot la impunidad, truncando así los años de complicidades locales. La sociedad bahiense tuvo la dicha de contar con el trabajo de estos funcionarios, que son de esos pocos comprometidos con la misión social de buscar justicia. Justicia de la real.
A partir de las 9:00 del día martes los organismos de DDHH de la ciudad: APDH, H.I.J.O.S. Bahía Blanca y la Red por el Derecho a la Identidad de Abuelas de Plaza de Mayo filial Bahía Blanca, junto a organizaciones políticas y sociales se convocaron a la Sede del juzgado en Alsina al 300, a repudiar al cómplice de la dictadura y esbirro de la Armada.
Los militantes congregados esperaban con ansias que el director y propietario del diario La Nueva Provincia (imputado de integrar junto con los mandos militares una asociación ilícita con el objetivo criminal de eliminar un grupo nacional y de haber sido parte del grupo medular con poder de decisión en el matutino al momento de producirse desde sus páginas lo que un Tribunal Oral Federal de la Nación consideró una “comprobada campaña de desinformación y propaganda negra” como modo de operatoria psicológica en favor del régimen de la represión clandestina), preste declaración con un poco más de dignidad que descargando culpas sobre su madre y su hermano como lo hiciera en una de las últimas entrevistas realizada por una investigadora, que posteriormente fuera publicado en el diario Página 12, el pasado 24 de noviembre.
Recordamos que tanto su madre Diana Julio y su hermano Federico Massot, también fueron investigados y recayó sobre ellos el mismo grado de participación y responsabilidad golpista, no pudiendo llegar a la instancia justicia, porque ambos están fallecidos.
Algunos militantes, fotógrafos y medios locales y nacionales esperaron desde las 7:00 de la mañana para verlo ingresar, encuentro que nunca se dio, por lo se estima entró de madrugada. Pasadas las 13:20 Massot salió del Juzgado rodeado de policías y pudo ser visto por unos minutos tras sus lentes negros, algunos “retoques” en sus canas y sin barba, llegó hasta un patrullero sin dar declaraciones y tratando de camuflarse ante los cantos de “MASSOT basura, vos sos la dictadura….MASSOT fascista, vos sos el terrorista”. El vehículo de pocos lujos tomó dirección en contramano y se perdió por las mismas calles por las que hasta hace unos meses él frecuentaba floreando su impunidad.
(*Matar y Morir: es el nombre que lleva el libro publicado por Vicente Massot en el año 2003, leído y corregido previamente por Félix Luna)