¿De qué hablamos cuando planteamos la plurinacionalidad del Encuentro?
Fotografía de Dani Amdan
Por Florencia Rey
El lunes 14 de octubre se definió el cambio de nombre del Encuentro de “Nacional” a “Plurinacional”. Marilin Cañió y Nelly Curia son de la Nación Mapuche, y forman parte del grupo de mujeres indígenas que lleva diez días ocupando pacíficamente el Ministerio del Interior.
Los reclamos del grupo que integran Marilin Cañió y Nelly Curiason son los mismos que se presentaron durante el Encuentro por parte de la comunidad indígena que llevó adelante la campaña plurinacional por el cambio de nombre. En esta entrevista, AGENCIA PACO URONDO dialogó con ambas integrantes de la Nación Mapuche sobre las implicancias de la plurinacionalidad en el nombre del Encuentro.
Agencia Paco Urondo: ¿Cuál es el reclamo que traen en esta ocupación pacífica?
Marilin Cañió: A 500 años de resistencia y a 140 de la mal llamada “campaña del desierto”, la realidad de los pueblos indígenas sigue siendo la misma. Porque la respuesta que siempre da el Estado es bala, cárcel, persecución, muerte y desapariciones forzadas. Los territorios están siendo fuertemente amenazados por proyectos extractivistas, que dañarían completamente el territorio. Tenemos desalojos en puerta.
APU: ¿Cómo fueron sus experiencias en Encuentros anteriores?
MC: No fuimos bien recibidas. En Chubut se negó nuestra participación. Acá estábamos peleando cuestiones que no veíamos productivo llevar allá, estábamos llevando la plurinacionalidad acá. Lo que planteamos no es sólo un cambio de nombre, sino de estructura: que empecemos a discutir cómo queremos habitar los territorios, qué es la libre determinación de los cuerpos, cómo queremos que sea nuestra medicina, cómo queremos parir, cómo queremos criar, cómo queremos habitar y despertar conciencia en las demás compañeras. Vinieron muchas compañeras feministas a acompañarnos y consideraron muy productivo el compartir con nosotras y entender nuestro pensamiento. Nosotras decimos que no somos feministas, somos antipatriarcales. Para plantear el antipatriarcado hay que descolonizar mucho. Se trata del compartir, no pensar iguales, pero sí respetar lo que piensa la otra, y construir desde ahí. Nosotras estamos pelando con el Estado racista.
APU: ¿Cómo vive el reclamos de Plurinacionalidad del Encuentro y de qué manera atraviesa las luchas que están llevando adelante?
MC: Nosotras en los territorios nos reunimos siempre, y seguimos transitando la lucha todo el tiempo. En el Encuentro está el taller de pueblos originarios, donde es todo más folklórico: la fotito, la banderita, el rostro infige y nos vemos el años que viene. Pero no se trata de eso, tenemos que visibilizar la lucha que llevamos, difundir lo que pasa en los territorios y llegar ahí. Nosotras venimos acá y nos exponemos. Quizás hubiésemos sido desalojadas pero las cámaras no lo hubiesen captado, eso en el campo es imposible. A eso vamos, a contar la realidad de los territorios que no es lo que pasa en la ciudad. Nosotras venimos a contar del día a día.
APU: Participaste del Encuentro en La Plata, ¿cómo fue su experiencia?
Nelly Curia: Me acerqué de modo personal hasta La Plata, entre a talleres a pedir la palabra y tuve mucha buena recepción en algunos. El domingo en la plaza había un micrófono abierto por la Plurinacionalidad. Pude dar la palabra a lo ultimo, gracias a que varias compañeras presionaron para que así fuera. Fui en busca de sororidad, para decir lo que estamos haciendo acá. Hermanas de muchas naciones estaban comunicando, buscando solidaridad y acuerparse sobre los mismo temas por los que estamos acá. Pero nosotras seguíamos solas aca. El año que viene veremos si podemos acompañar al Encuentro de mujeres, si llevaremos talleres, aún no lo tenemos resuelto. Las mujeres que estamos acá estamos abocadas a resolver las problemáticas.
Decidí ir al Encuentro porque podria tener mas prensa, de otros medios nacionales, y si tenía el apoyo de todas esas compañeras podríamos lograr un acompañamiento más masivo de la prensa.
Después de eso no tuvimos una gran recepción desde las organizaciones, pero sí muchas chicas que estaban ahí después se acercaron a charlar con nosotras. En algunos talleres se generaron debates y algunas compañeras salieron de los talleres para venir a apoyarnos, porque sintieron que era aquí la lucha.
APU: En caso de presentar un taller el año que viene en el Encuentro, ¿que temática le gustaría abordar?
NC: A mi, como tema central me gustaría pensar qué pasa cuando traemos estos temas de violencia, de dolor, de agotamiento de recursos naturales. Si hoy hacemos esa catarsis de acompañarnos, es porque muchas vuelven a su casa y no se hacen comisiones, no se arman las redes, las hermanas se van como vinieron. Yo me autoconvoco acá porque creí que era un lugar para buscar una respuesta eficiente y efectiva, probar si nos iba a salir. Decidirme a que esto era algo concreto.
APU: ¿Cree que con el cambio de nombre más hermanas se verán convocadas a generar esas redes?
NC: Creo que si. Y es importante para que todas las mujeres feministas puedan conocer que hay pueblos preexistentes donde tenemos luchas enormes, ancestrales. El taller de mujeres indígenas en Trelew fue masivo, y se escuchó en la marcha el grito de la plurinacionalidad. Ahí me encontré con el Movimiento y me acoplé. Nosotras sí logramos encontrarnos y abrazarnos con otras hermanas de otras naciones. El taller de plurinacionalidad que empieza en el Movimiento por el Buen Vivir tuvo frutos, encontrarnos con nosotras. A partir de eso se armó un Parlamento de Mujeres Originarias, nos reunimos en julio en Las Grutas donde asistieron casi 250 mujeres de diferente naciones. Ahí pudimos censar todos los temas que nos aquejan.
APU: ¿Cómo vivió el cambio de nombre desde la ocupación?
NC: Lo viví con sencillez porque estábamos con toda nuestra espiritualidad acá, puesto en esto. Con todos los planteos de si la plurinacionalidad va a ser un grito más de mujeres o si va a haber una hermandad que la estamos esperando que se sienta, desde acá. Los mismo temas que atraviesan al Encuentro son los que estamos planteando acá. Yo replantearía si esa plurinacionalidad va a ser sorora, inclusiva con todas las naciones, o si sólo hay que ir y estar ahí en los Encuentros, si no se va a transformar en un cliché. Que no sea un “nos encontramos y nos vemos recién al año siguiente”. Hay una brecha que hay que resolver ahí.