Asterisco: octava edición del festival internacional del cine LGBTIQ+
Tras la edición online del año pasado, el festival internacional de cine LGBTIQ+ Asterisco, que comenzó en 2014, vuelve con un formato mixto que combinará salas de exhibición con actividades virtuales. Del 28 de octubre al 7 de noviembre, el objetivo sigue siendo multiplicar las formas de potenciar la llegada del cine LGBTIQ+ a distintos puntos a nivel nacional e internacional.
Este año las salas de funciones presenciales serán el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA), el Centro Cultural Kirchner (CCK), el Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti, el Complejo Histórico Cultural La Manzana de las Luces, y el café teatro Hasta Trilce. Además, en la plataforma Contar podrá verse una selección de películas que participan de esta edición y en la plataforma MICA (Mercado de Industrias Culturales) tendrá lugar íntegramente la sección competitiva “Películas en Proceso”.
De esta manera, en palabras de su director artístico, Diego Trerotola, Asterisco continúa ampliando su horizonte y los recorridos del cine que los representa e interpela. Al tiempo que destaca su importancia como “punto de encuentro, lugar de conexión y visibilidad emocional comunitaria”, el festival internacional permite ver la diversidad sin límites ni fronteras y seguir buscando un cine que pueda “inventariar lo existente pero también inventar lo que todavía es invisible”.
Junto a Trerotola, en el equipo de programación también nos encontramos a Albertina Carri, directora artística de las primeras tres ediciones y reconocida por películas como Las hijas del fuego y Cuatreros, Fernando Martín Peña, uno de los creadores de la Filmoteca Buenos Aires, y Andrea Guzmán, periodista especializada en cultura. Por su parte, de la producción general se encarga desde el año pasado Laura Bruno, una de las promotoras de la serie El eternauta para Netflix, actualmente en desarrollo y con la dirección de Bruno Stagnaro.
El festival cuenta con tres secciones competitivas: largometrajes, cortometrajes y películas en proceso. Las primeras dos, anteriormente internacionales, buscan destacar el nivel de las producciones locales, muchas de ellas realizadas en contexto de pandemia y que abordan una diversidad de prácticas, estilos y miradas. La tercera categoría tiene el objetivo de estimular y ayudar a que se puedan finalizar aquellas obras que “visibilizan la diversidad y la disidencia sexual y de género desde miradas que intentan emanciparse de las representaciones más remanidas”. Además, la Sociedad Argentina de Gestión de Actores Intérpretes (SAGAI) otorgará el Premio a la Mejor Interpretación Argentina.
Por otro lado están las secciones más tradicionales del festival. “La piel que habito”, como órgano que da visibilidad, que mezcla el panorama actual con una selección del pasado muchas veces olvidada, proponiendo un recorrido no sólo por distintos países sino también por distintos lenguajes. “Focos” apuesta por seguir miradas disidentes en la historia del cine y este año estará dedicado al colectivo catalan ELS 5 QK'S, realizador durante la transición democrática, y al actor y director Paul Bartel, referente desde una veta original del humor. Por último, “Pioneres queer” se ocupa del lugar de las políticas de la memoria, con un apartado dedicado a Libertad Leblanc.
Durante los próximos días, a través de su página web y sus redes sociales, se anunciarán las actividades especiales virtuales y presenciales. También allí se puede observar la grilla y la guía sobre las obras que participan del festival.