“El hábito del tiempo”, cuentos de Giselle Aronson
Por Boris Katunaric
El tiempo como hábito y también como hábitat es la temática central de este libro de cuentos de Giselle Aronson. Cuentos que habitan un tiempo preciso en cada una de las personajes de esta obra. Tiempos clave para mujeres que narran su tiempo y su momento.
Entonces contar un cuento es contar también su tiempo, tanto histórico como íntimo, el reloj interno de cada mujer que habita estos tiempos-cuento: “Conservo el hábito del reloj pulsera, me gusta como accesorio. No me basta con la hora en el celular, en la computadora, en todos lados. No es hora si no está en un reloj, en el cuerpo. El reloj, como un destino, marcándole el tiempo al cuerpo” dice Aronson en “otra noche en Jasse Joyce”. Es el paso de las horas que se narran como si cayeran lento, el pasar de horas con palabras internas, que bordean el ahogo, el ensueño, el rencor y demás.
Son fundamentalmente historias cotidianas de mujeres, personas comunes con problemas comunes para sus edades. Pero al decir comunes no decimos sencillos, son problemas habituales, es decir que se habitan, en nuestro tiempo y que a la vez son universales: la política, las infidelidades, las enfermedades, la vejez, el amor y el desamor, el agotamiento, el cansancio, los recuerdos, las mudanzas, las pérdidas.
Dos partes separan la obra: “El contar” y “La cuenta, el conteo” dejando para esta última los dos relatos finales. Como dice Flor Canosa en la contratapa “Escribe como si te surrurara al oído y de pronto soreprende con un grito. Deja suspendido en el aire un eco que el lector completa con todo aquello que lo convoca. Personajes que giran en círculos, siempre a un paso del precipicio emocional”.