"El voto en blanco no es opción; la indiferencia es funcional a Macri"

Por el Movimiento Evita Capital El 22 de noviembre se realizará el balotage presidencial entre el candidato del FpV, Daniel Scioli, y el de la Alianza Cambiemos, Mauricio Macri. Luego de las victorias obtenidas en las PASO de agosto y en las elecciones generales de octubre, es necesario un último esfuerzo para llevar adelante una campaña electoral que interprete los resultados obtenidos, que amplíe el debate social, la persuasión política y la convocatoria a participar a todos los hombres y mujeres que aún no nos votaron.

Entendemos que la candidatura de Mauricio Macri, lejos de potenciar los cambios que la Argentina demanda, esconde sus verdaderos intereses y objetivos: el endeudamiento del país, la devaluación de nuestra moneda, la pérdida de la capacidad adquisitiva de los trabajadores y un proceso de privatización de la economía. Estas recetas ya fueron aplicadas en nuestro país y terminaron en una de las mayores crisis política, económica, social e institucional de nuestra historia reciente.

Por el contrario, el candidato del FPV expresa la firme voluntad de que el verdadero cambio sea la profundización de lo conseguido hasta ahora. Es lo que Daniel Scioli denomina la “segunda etapa del desarrollo” y que contempla la presencia del Estado en el ordenamiento de la economía, la industrialización del aparato productivo, la expansión de los derechos de los trabajadores y la distribución de la riqueza. Eso se traduce en medidas concretas ya anunciadas por nuestro candidato como la devolución del IVA para los jubilados y beneficiarios de planes sociales, incrementando su poder adquisitivo, y el aumento en el mínimo no imponible a $30.000, que volcarían miles de millones al consumo interno.

Para dar este debate y ganar la compulsa electoral, las diversas expresiones del campo popular nos tenemos que reorganizar de cara a la sociedad. Ya no alcanza con disfrutar de los enormes logros obtenidos, sino que debemos acometer las tareas pendientes que nuestra sociedad reclama. Solo así podemos entender que consolidar un proyecto político y profundizarlo resultan parte del mismo objetivo: que el pueblo sea feliz en una nación que se fortalece. Estamos dispuestos a ser una parte sustancial del cauce en el que todos esos sectores confluyan, se unifiquen y se potencien hasta convertirse en un torrente capaz de cambiarlo todo.

No ignoramos que las dificultades a superar son grandes y duras, pero sin duda no tan firmes ni tan grandes como nuestra voluntad de enfrentarlas y vencerlas. El voto en blanco no es opción; la indiferencia resulta funcional a Macri y su política de retroceso y estancamiento. Por ello haremos lo posible para que los anhelos e intereses sociales del país se cumplan a través del voto, colocando a Daniel Scioli como próximo presidente de los argentinos.