"El decreto de Aramburu generaba un régimen casi feudal"

Agencia Paco Urondo: ¿Qué importancia tiene la aprobación de este nuevo régimen de trabajo?

Héctor  Recalde:  Lo primero que uno tendría que decir es que nos sacamos de encima una regla estatal oprobiosa que venía de la dictadura de Aramburu. Generaba para las trabajadoras de casas particulares un sistema casi feudal. El hecho de saldar esta deuda de la democracia me parece fundamental.

El segundo eje de la ley, es la igualdad. Es insólito que haya una diferenciación entre los trabajadores. Esta ley iguala derechos. Una trabajadora doméstica (hablo de trabajadoras porque el 95% son mujeres) no pueden ser distintas a una trabajadora textil, metalúrgica o de comercio. La jornada de trabajo, las vacaciones, las licencias, las indemnizaciones y todo lo que le corresponde al trabajador, se extiende a este sector con las particularidades    propias de este trabajo.

Fue votada por unanimidad, con alguna disidencia parcial. Es una satisfacción que haya sido la primera ley que aprobamos en este periodo ordinario de sesiones.

El proyecto es de Cristina Fernández de Kirchner, del año 2010. Tardamos bastante en sacarlo. Lo aprobamos en diputados, fue a senadores y ahora volvió. Va en línea con la recuperación y ampliación de derechos que comenzó en 2003 Néstor Kirchner. Esto significa: Igualdad, inclusión y justicia social.

APU: ¿Sobre qué marco legal se movía previamente el sector antes de la ley?

HR: Un estatuto que había sido establecido por un decreto ley, el 326/56, de la dictadura de Aramburu.

APU:  Hay un amplio porcentaje de trabajadoras no registradas en el sector.

HR: Si, es altísimo. Por eso la ley le da al empleador un lapso de 180 días corrido para que regularice la situación.

APU: ¿Destacaría algún otro punto de la ley que le parezca importante?

HR: A los empleadores se le simplifica el trámite para evitar que la complejidad de inscribir a una trabajadora genere trabajo en negro.

APU: Una de las particularidades del sector es que las relaciones se dan muchas veces entro dos trabajadores….

HR: Eso es muy importante. Tiene que ver con la filosofía de los noventa. Uno tiene que distinguir entre los distintos y no entre los iguales. No hay trabajadores pequeños, medianos y grandes, decíamos cuando se flexibilizaban derechos de pequeñas y medianas empresas. En este caso es lo mismo, la trabajadora de una casa tiene los mismos derechos sin importar quién sea el empleador.

Es distinto a ver cómo se puede hacer para que el trabajador, que a su vez es empleador, tenga alguna ayuda de acuerdo a sus ingresos. Hay que contemplar esa realidad porque es una situación diferente a la del empleador común y corriente.

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