"El sindicalismo está en crisis y no encuentra su lugar"
Por Enrique de la Calle
AGENCIA PACO URONDO: ¿Qué análisis puede hacerse de cómo le fue al sindicalismo en este cierre de lista?
Jorge Duarte: Si miramos la evaluación histórica teniendo en cuenta lo que fue el auge allá en el 73-75, con 45 diputados y tres ministerios, y lo comparamos con lo que pasa ahora, podemos decir que le fue mal. Pudieron colar algunos candidatos Caló y Moyano, pero el balance es malo.
AGENCIA PACO URONDO: Hagamos un raconto ¿Qué ocurrió en provincia de Buenos Aires?
JD: La CGT de Caló puso a Oscar Romero de SMATA en el puesto 11 de la lista kirchnerista. Si el oficialismo repite o mejora la elección de 2009, lo que es un escenario posible, estaría al límite de entrar. Después colocó a Zunilda Valenciano, de UPCN, en el puesto ocho de la lista a diputados nacionales por Capital Federal. También está Víctor Santamaría, de Suterh, como candidato a senador suplente. Se trata de dos candidaturas más testimoniales.
AGENCIA PACO URONDO: Después está Héctor Recalde.
JD: Claro, aunque no es un dirigente de la CGT. Él es abogado histórico de la CGT. Él renueva su banca porque está en el cuarto lugar. Dentro del kirchnerismo está el dato interesante en relación a un candidato del moyanismo. Hablo de Alejandro Amor, de Municipales, que va en el noveno lugar. Es imposible que pueda entrar. Es raro ver a alguien de la CGT Azopardo en esa lista. En la lista kirchnerista no hubo participación de la CTA de Yasky.
AGENCIA PACO URONDO: Eso es el kirchnerismo. El moyanismo sí participa con más fuerza en la lista que lidera Francisco De Narváez.
JD: Es la lista que ellos apoyan. En segundo lugar está Omar Plaini (Canillitas) y Susana Laburu (SOEME) está en el sexto lugar. Probablemente ambos entren. La curiosidad es que el propio Hugo Moyano está en el puesto 35, de manera testimonial. Por el lado de la CGT Azopardo está también el Momo Venegas (UATRE), quien presentó una lista propia. Hay que ver si supera las PASO, lo que parece difícil. Después tenés el caso del massismo, que fue apoyado por diversos sectores. Está Héctor Daer (Sanidad), un hombre de la CGT de Caló que quedó en el puesto 10. Sorprendió ese apoyo. La aparición de dirigentes en diferentes listas da cuenta de la fractura del sindicalismo. Otra cosa que sorprendió es la presencia de un hombre de Yasky en la lista de Massa: Fabían Alessandrini, dirigente histórico de ATE, zona norte. Yasky salió con un comunicado desligando a la CTA de esa decisión.
AGENCIA PACO URONDO: Esa modesta presencia sindical en las listas es ya un dato estructural de los últimos 20 o 30 años.
JD: Y no logran revertirlo. Cuando se produce la ruptura entre la CGT Azopardo y Alsina, el encargado de hacer el lobby para estas cuestiones, Omar Viviani (taxistas), salió a decir que ellos iban a pedir el histórico 33% de presencia del movimiento obrero. Lo que pasó en la realidad es que prácticamente no fueron tenidos en cuenta.
AGENCIA PACO URONDO: Esa deficiencia tiene que ver con cuestiones estructurales del modelo ecónomico argentino. Pienso en la informalidad laboral, la tercerización y cómo eso repercute sobre el poder de los gremios. Quería preguntarte: ¿Cuánto tiene que ver con la incapacidad de los dirigentes sindicales?
JD: En realidad ese primer dato que dabas es muy importante para dar cuenta de cómo el movimiento obrero fue perdiendo poder, no solo de movilización sino también de representación. La mayoría de los trabajadores no se ven representados por los dirigentes sindicales. Se trata de conducciones que tienen poco contacto con las bases. Se ha dado además un cambio cultural muy importante y los partidos políticos y los sindicalistas no se terminaron de adaptar a ese cambio. Incluso las PASO así lo reflejan: no hay internas, hay sondeos de opinión previos a la elección. Al sindicalismo le pasó lo mismo. Está en crisis y no encuentra su lugar. Tiene una historia de alejamiento de sus bases que no logra revertir.