"Querían rodearnos de miedo"
Por Nahuel Placanica
Agencia Paco Urondo: ¿Cómo evolucionó el conflicto en la textil Elemento?
Eduardo Toro: El conflicto arrancó en julio cuando una compañera se prendió fuego debido al maltrato que se daba en la fábrica por parte de los empleadores. En ese momento, con los compañeros decidimos empezar a organizarnos para que se respete nuestro convenio.
La patronal empezó a detectar a los organizadores y comenzó la persecución. Buscaban excusas para separarte y aislarte de las bases. En ese contexto, tomaron la determinación de despedir a la compañera María, trabajadora boliviana. Por apoyarla, me despidieron a mí y amenazaron con despedir más compañeros. Querían rodearnos de miedo. El sindicato se puso del lado de la patronal.
Nosotros comenzamos una campaña para visibilizar lo que pasa en la industria textil en general y sobre nuestro caso en particular. Con la lucha logramos que el Ministerio de Trabajo se pronuncie a favor nuestro, pero la empresa no acató la conciliación obligatoria. Ahora la cuestión pasó a una etapa judicial. La Justicia dictó una cautelar y la empresa tampoco la acata. Tuvimos una reunión con el oficial de Justicia. Falta el próximo dictamen que implicaría una orden de allanamiento. Estamos esperando esa posibilidad. Seguimos con esta lucha para que todos los trabajadores de la industria textil se animen a levantarse ante esta realidad. Hay otras fábricas con conflictos que se reflejan mucho en nosotros. Eso hace que las patronales se unan, dificultando el caso. Estamos en esa pelea.
APU: ¿En qué condiciones de trabajo estaban en la fábrica?
ET: Ahora las condiciones cambiaron gracias a la lucha y la organización. El tema de las 12 horas que no te reconocían horas extras, más el sábado, cambió. Los compañeros ahora cobran las horas extras y no trabajan los sábados. Lo mismo en el sector planchas. Antes se trabaja diez horas y media y no daban permisos ni para ir al médico. Van habiendo cambios pero todo gracias a la lucha que damos.
APU: Decía antes que es una problemática general de toda la industria…
ET: Sí, se manejan así. Por eso cuando salimos a denunciar, salen todas las industrias textiles a defenderse. Buscan atemorizar a los empleados y se aprovechan de compañeros que son inmigrantes.
APU: ¿Pudieron articular con otros sectores para llevar adelante el reclamo?
ET: Sí, con muchos sectores que tienen experiencia de lucha. Si no tenés experiencia, podes cometer errores. Nosotros nos rodeamos de solidaridad para articular, discutir el tema y tener una herramienta más fuerte.
APU: ¿Conocen a los dueños de la empresa?
ET: Sí, son Ricardo Sun Chung y Agustina Li. Están en la fábrica, los vemos. Trabajan para marcas importantes como Cheeky, que es de Awada. Es una marca fuerte y una patronal fuerte. Son empresas grandísimas, es difícil pelear contra ellos.