Retiro: $300 por voto

Por Luisina Colombo

El llanto y la angustia empezaron cuando el presidente de mesa, con el visto bueno de los fiscales de los distintos partidos, decidió impugnarle el voto a una vecina de la Villa 31 por entrar al cuarto oscuro con una boleta de la lista de Horacio Rodríguez Larreta a plena vista, durante las elecciones primarias del domingo pasado. Todos los fiscales coincidieron con la decisión y consideraron que se trataba de un voto cantado. La mujer repitió varias veces la frase, rogando que le dieran el troquel que se entrega luego de elegir, que era la manera de demostrar fehacientemente que había entrado al cuarto oscuro. A los pocos minutos se retiró, luego de que se formalizara la anulación.

Irupé Zapata, que se desempeñó como fiscal general de la lista del frente Alternativa Buenos Aires, presenció el hecho y fue una de las autoridades que le exigió a la delegada electoral dispuesta por el Tribunal Superior de Justicia en esa escuela, Soledad María del Rosario Gerban, que realizara la denuncia. Para esto  tuvieron que insistir ya que la empleada se resistía a labrar el acta correspondiente.

“Un rato más tarde nos enteramos que en la escuela de al lado había pasado algo similar, y se empezó a rumorear que alguien estaba llevando a la gente a votar. Ahí decidimos con un grupo de compañeros ir a recorrer la calle principal de la villa para ver si veíamos algo raro”, comentó. Una vez allí, en la calle donde termina la estación de ómnibus y comienza la feria por la que se ingresa al barrio, la militante asegura que vieron a una mujer que vestía una remera amarilla con el nombre del precandidato del PRO ofreciendo traslados gratis a las escuelas de votación en combis amarillas estacionadas a algunos metros.

Otro fiscal que estuvo presente al momento de la anulación del voto -que prefirió no dar su nombre- afirmó que en la recorrida también vieron como los delegados del barrio vinculados al PRO buscaban a los vecinos en sus casas y los llevaban a las camionetas. En muchos casos elegían a personas con movilidad reducida o alguna incapacidad, para intentar entrar con ellos en el cuarto oscuro como acompañantes para “ayudarlos”, situación que en muchos casos se logró evitar.

Según se pudo consultar a algunos habitantes del barrio, los punteros de la lista elegida por el actual jefe de gobierno Mauricio Macri ofrecían $300 a cada votante, a los cuales les garantizaban también el transporte de ida y vuelta a las escuelas y algunos alimentos.