"La consigna de que un diputado gane lo mismo que un docente en qué cambia las cosas"
Por José Cornejo y Enrique de la Calle
APU: Para muchos fue un batacazo la derrota del Partido Obrero en las PASO del Frente de Izquierda. ¿Cómo analiza el triunfo del PTS?
Diego Rojas: Esa no sería una caracterización con la que podría adherir, hay que ponerlo en un contexto muy amplio. Toda la izquierda retrocedió, claramente se impusieron los partidos que plantean una defensa, en términos generales, del régimen. En ese marco hasta la centro-izquierda de Claudio Lozano retrocedió, el MST retrocedió, el MAS retrocedió y también se puede notar un cierto retroceso para las fuerzas del FIT.
Aquello que muchos caracterizábamos como un ascenso de la izquierda, en estas elecciones se ve demorado. En ese marco hubo dos campañas dentro del FIT que mostraron posiciones divergentes. Una era la de Jorge Altamira, el que todos pensábamos que iba a ganar, pero que tuvo una campaña donde planteó una denuncia al ajuste; luego, otra campaña que trajo elementos que no son los que hacen a una postura de la naturaleza que usualmente ha tenido la izquierda, esto es, plantear consignas que un parlamentario tiene que ganar como un docente, la renovación, en contra de la casta política. Me parece una política de adaptación a cierto universo más amable y que escapa a la cuestión de un programa de raigambre obrera y socialista que es la base del FIT.
APU: ¿En algún momento hizo una comparación del PTS con PODEMOS de España?
DR: No una simetría, pero sí estoy convencido que hay elementos en común con lo que recién describía con el programa de Podemos. La idea de una renovación generacional, por ejemplo.
APU: La crítica a la gerontocracia.
DR: Me parece equivocado plantearlo de ese modo pero es lo que se estableció en la campaña. Esa renovación me parece un discurso vacío porque uno podría pensar que María Eugenia Vidal también planteó, en cierto sentido, una renovación contra ciertos intendentes de Buenos Aires. Hay una ola que podría decir que es interesante pero es difícil de explicar de qué manera la izquierda se prende a una ola general que no responde a una cuestión de programa y de planteamiento contra el régimen.
La consigna de que un diputado gane lo mismo que un docente en qué cambia las cosas. Para mí ese es el reformismo más intenso.
APU: Está planteando críticas sobre lo programático. ¿Piensa que puede estar en riesgo el FIT como experiencia de un sector de la izquierda?
DR: Para nada, en absoluto, todo el mundo dentro del FIT va a votar la candidatura de Nicolás Del Caño. Por otro lado, todo el mundo sabe que Del Caño no va a ser presidente, en cambio, la militancia del FIT apuesta a poner más diputados en el bloque parlamentario nacional, más concejales, etc.
APU: ¿Usted cree que el kirchnerismo pudo haber participado para favorecer al PTS en las PASO?
DR: Creo que es así, tengo una relación amable con diversos sectores del FPV, más allá de que mis críticas puedan ser cruentas. Conozco gente oficialista que ha votado por Del Caño en las PASO y que en octubre va a votar por Scioli.
Hubo una cierta injerencia de algún sector que no es de izquierda, que no se reclama socialista, que no se reclama troskista y que tienen un rechazo por el troskismo que es extensivo a la figura de Altamira.
APU: ¿Cree que después de esta derrota del Altamira, el PO va a iniciar una renovación de sus cuadros?
DR: Yo conozco al PO de cerca y te puedo asegurar que una cantidad de cuadros juveniles forman parte de sus órganos de dirección nacional. Incluso la Federación Universitaria de Buenos Aires está dirigida por el PO en alianza con La Mella.
Hubo un salto de la dirigencia juvenil en los órganos de dirección del PO. Pero me parece que está fura de la órbita y de la conciencia socialista pensar que una renovación tiene que ser generacional. La construcción de una organización socialista se basa en la conjunción de las experiencias del pasado con las del presente para plantear un futuro común.