España: Carta Abierta a los votantes del PSOE
Por Carlos Iaquinandi (*)
Carta abierta a los amigos y compañeros que han votado o votan PSOE
No puedo ser indiferente a la maniobra de un grupo de dirigentes del PSOE, para colocar definitivamente al viejo partido a disposición de los grandes poderes económico financieros. Es por eso que decidí compartir estas reflexiones.
Lamento profundamente que las decisiones de una parte de la superestructura del partido estén completando una operación de demolición de lo que restaba de los principios y valores socialistas que han ido quedando por el camino en los últimos años.
Como votante de izquierdas, veo que cada día que pasa se aleja más de su electorado, que contempla desconcertado esta especie de “suicidio político”.
La operación de frustrar cualquier entendimiento con fuerzas de izquierda y no intentar el posible apoyo de partidos catalanes y vascos, fue torpe, muy torpe.
Propia de un sargento chusquero, como bien lo describió Josep Borrell.
Con esa maniobra colocaron al partido en un callejón sin salida. Previsible.
Tan previsible que a quienes ya tenemos unos años, nos huele a operación diseñada para terminar en esta “abstención”, en la que además, intentan aplastar todo atisbo de disidencia, que en definitiva es dignidad y coherencia con las promesas preelectorales.
No han comprendido lo que significaba el 15M. Han juzgado desde la soberbia a los jóvenes justamente indignados. Y se alejan de esos ciudadanos que conforman el futuro inmediato de esta sociedad. Y les confinan a un exilio forzado como técnicos o profesionales, o a parados de lujo para reponer góndolas de supermercado o para camareros de temporada. Ni hablar de los mayores, que si fueran conscientes de lo que está sucediendo con el Fondo de Reserva de sus pensiones, no dudarían en sumarse a “rodear el congreso” o si hiciera falta a la propia Moncloa.
Vaciar en 4 años la “hucha”, pasando de 70 mil millones a 13 mil es un récord de ineptitud, pereza e irresponsabilidad. Pero más lo es complotarse para facilitar la continuidad del PP y no haber exigido con firmeza el cumplimiento del Pacto de Toledo, o al menos el debate inmediato para encontrar una solución al previsible “crack” en el pago de las jubilaciones y pensiones de 9 millones y medio de ciudadanos y sus duras consecuencias para ese colectivo que trabajó y aportó durante sus años laborales.
Esta abstención parece el prólogo de un acuerdo estable para “blindar” algunas políticas que determinados sectores del poder económico quieren imponer.
Habrá oposición, “ma non troppo”. Algunas votaciones en el Parlamento serán reveladoras. Tiempo al tiempo. Quieren institucionalizar un bi-partidismo descaradamente al servicio de los que nunca dejaron de mandar. La modificación con nocturnidad y alevosía del artículo 135 de la Constitución fue un anticipo. Colocó al estado español bajo la tutela de los Juncker, Draghi y demás testaferros de quienes verdaderamente deciden y condenan al retroceso social y económico a millones de europeos.
Queda claro que al renunciar deliberadamente a la unidad de la izquierda, o al menos al intento de construir una verdadera alternativa a este engendro de una derecha corrupta, ineficaz, y sumisa al capital, el PSOE facilitará que todo siga como está. Probablemente por muchos años. Eso sí, necesitará también votar nuevas leyes “Mordaza” y más restricciones de derechos y libertades, para contener las justificadas protestas populares. El pueblo es paciente pero todo tiene un límite.
La única esperanza es que haya en el PSOE/PSC dirigentes y militantes que digan no a esta vergonzosa operación de rendición incondicional.
Y que sean respetados por quienes desde la “gestora” optaron por dejar a Rajoy y a su corrupto PP en el poder.
Pretender que el PSC (que afronta el peso de un PSOE que tiene posiciones irreales frente a la realidad catalana) “está obligado” a ser partícipe de esa entrega, y que los restantes diputados disidentes también voten contra su propia conciencia, es una exigencia cuartelera, pero lo que es mas grave, innecesaria.
¿Se pretende simplemente el famoso “desbloqueo” a cambio de nada, o se está aprovechando la ocasión para convertir al PSOE en un partido unidireccional sin democracia interna que ejecute las políticas que resuelvan un grupo de dirigentes con el apoyo casi unánime de los grandes grupos mediáticos?
Catalunya, España, Europa, necesitan una alternativa de izquierdas que plante cara a esta deriva neoliberal, que viene cargada de racismo, y que cuando haga falta, también recurrirá a los viejos demonios fascistas del autoritarismo, la represión y la censura.
El aparato que ha tomado el control del PSOE tiene claros sus objetivos.
Como no los tengan claros también los dirigentes honestos y los militantes, la “Gran Coalición” en ciernes, será todo lo que quede del viejo partido, y de las siglas, solo quedará en pie lo de “partido”.
Pero en su acepción de roto, desestructurado, desecho, desbaratado.
Estas reflexiones, resumen mi preocupación personal, pero también la de mucha gente con la que converso diariamente. Y seguramente la de mucha más que un día puso su voto y su esperanza en el Socialismo.
Un saludo,
Carlos Iaquinandi Castro
25 de Octubre de 2016.
(*) Carlos Iaquinandi dirige el Servicio de Prensa Alternativo (Serpal) y encabeza el Centro Latinoamericano de Reus, Catalunya, donde reside.