Causa AMIA: "Macri nunca me pidió la absolución de nadie, pero Garavano hablaba por el presidente"
En las últimas horas el exsenador y extitular de la UFI-AMIA Mario Cimadevilla dio a conocer un escrito en el que reclama por la conducta de su partido, la UCR, y el silencio que la dirigencia mantuvo en medio de las presiones que dijo haber sufrido por parte del ministerio de Justicia para forzar la absolución de los exfiscales Mullen y Barbaccia, imputados en el juicio por encubrimiento del atentado a la mutual hebrea.
En Radio 10, Cimadevilla habló de las presiones del ministro de Justicia Germán Garavano y deslizó un eventual pedido secreto que venía desde el Ejecutivo. "Creo que Macri estaba al tanto, el presidente nunca me pidió por la absolución de nadie, pero Garavano creo que hablaba por el presidente", dijo.
Más adelante, apuntó contra la figura del titular de la cartera de Justicia, y tuvo conceptos duros para su persona y su accionar al frente de ese ministerio.
“Más que un imbécil como dice Carrió, creo que Garavano es un poste. No maneja el Ministerio de Justicia, solo maneja las cuestiones burocráticas. En el poder judicial ya no quieren hablar con Garavano. Los operadores judiciales que tiene este gobierno como Torello, Pepin Rodríguez Simón o Angelici, desplazan en todas cuestiones al ministro”, sentenció.
Sobre la trama de presiones y tironeos respecto de la actitud que debía tomar la querella en el juicio el dirigente radical explicó: “Estuvé al frente de la Unidad Fiscal AMIA para colaborar con la investigación del atentado y la intención que teníamos era la de sostener la querella contra los que habían encubierto el atentado como el juez Galeano, Menem, Anzorregui, los fiscales Mullen y Barbaccia cuando llegó la época de los alegatos, desde el Ministerio de Justicia –que ya venía dificultando la tarea de la querella del ministerio fiscal- se nos dice que teníamos que sostener la absolución de los fiscales Mullen y Barbaccia. Nosotros nos negamos, y entendíamos que no habían elementos para pedir la absolución, y se violaban compromisos asumidos por el país ante la Comisión Interamericana de DDHH”.
En relación al escrito dado a publicidad, sostuvo que “veníamos poniendo en conocimiento de esto a las autoridades del Comité Nacional de la UCR y de los bloques, y al presidente de la Convención porque entendíamos que el partido debería saber lo que estaba pasando en la causa más importante en tribunales. Todos guardaron un reprochable silencio a excepción del Doctor (Jorge) Sapia, que acompañó nuestra posición”.
“El juicio terminó con condenas para las personas a las que el ministro pedía absolución. La sentencia tiene alcances jurídicos únicamente para las imputados, pero también está haciendo una condena moral hacia la UCR, porque es un partido que guardó silencio frente a lo que estaba pasando”, fustigó respecto de la falta de reacción de sus correligionarios ante sus denuncias públicas.