"Nos proponemos empoderar a las mujeres con discapacidad"
Por Melany Grunewald
AGENCIA PACO URONDO entrevistó a Andrea Grassia, periodista con discapacidad visual, integrante de REDI (Red por los Derechos de las Personas con Discapacidad), creadora de la APP “Nueva decisión” dirigida a mujeres con y sin discapacidad apuntada a brindar información sobre sus derechos sexuales y reproductivos.
AGENCIA PACO URONDO: ¿Como surge la idea de crear la APP “Nuestra decisión”?
Andrea Grassia: La APP surge a raíz de una necesidad concreta que veníamos viendo en cuanto a la falta de información con respecto a los derechos que existen y a la legislación. Actualmente, estamos llevando adelante un proyecto junto con la organización Casa FUSA, que trabaja en el área de salud sexual y reproductiva con adolescentes. Este proyecto se llama “DESEAR con inclusión” (la sigla describe los derechos sexuales y reproductivos en Argentina), y la idea es dar talleres a mujeres con discapacidad de diversas regiones del país como CABA, el Conurbano bonaerense, Santa Fe, Córdoba, San Luis, San Juan, Entre Ríos y NOA. En 2019 tuvimos la oportunidad de hacer una serie de estos talleres, lo que resultó ser una experiencia muy interesante. Luego, en 2020, estos continuaron de forma virtual.
En esos talleres se planteaban distintas actividades con el objetivo de que estas mujeres con discapacidad fueran comentando si se sentían identificadas con lo que exponíamos. La propuesta tenía que ver con conocer cómo consideraban ellas el cumplimiento o no de sus derechos y, por el otro lado, que contaran experiencias personales. Si bien pretendíamos hacer un diagnóstico de situación y también nos proponíamos empoderar a esas mujeres con discapacidad, lo que nos llamó la atención fue el enorme desconocimiento de sus propias familias con respecto a su autonomía en tanto son personas que pueden tomar sus propias decisiones. Entonces, por ejemplo, había casos de mujeres con discapacidad con familias que no querían que salieran solas con un novio o que asistieran solas a la consulta ginecológica, como también tenían prejuicios con respecto a la maternidad. Estas son experiencias muy fuertes que muestran que evidentemente hay mucho desconocimiento también de los derechos propios.
Por otro lado, los talleres también mostraban el desconocimiento sobre trabajadores y trabajadoras de la salud, en tanto muchas veces, en los consultorios ginecológicos, no se les daba la información a ellas sino al acompañante. Otro tema era la falta de accesibilidad de los centros de salud, ya que no hay camillas adaptables ni mamógrafos regulables para mujeres con discapacidad motriz o con baja talla.
Todo esto nos llevó a pensar qué podemos hacer para que estos derechos se conozcan y también para que se nos pueda informar cuando algún centro de salud no cumpla con las condiciones de accesibilidad.
APU: A su entender, ¿las personas con discapacidad son percibidas con una consideración sesgada como sujeto de derechos?
A.G.: La realidad es que se percibe mucho más en las mujeres con discapacidad que en los varones con discapacidad. Es decir, existe una sobreprotección mucho mayor hacia ellas, junto con un temor enorme de que queden embarazadas. Esto con los varones no sucede, ya que, si dejan embarazada a una mujer, se considera que debe hacerse cargo la mujer. Definitivamente, en estos casos se ponen en juego los estereotipos de género.
APU: ¿La cantidad de derechos que informa la APP “Nuestra decisión” a qué población se aplica?
A.G.: Muchos de esos derechos no tienen que ver exclusivamente con personas con discapacidad, sin embargo, nos atañen igual. Está claro que algunos tienen que ver con la Convención Internacional Sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, pero muchos otros tienen que ver con legislaciones nacionales dirigidas a la población en general. Por ejemplo, la Ley de Salud Sexual con una resolución del Ministerio de Salud en referencia a los anticonceptivos. Otro ejemplo es la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, que tiene un artículo especifico en cuanto al consentimiento informado en las personas con discapacidad, pero es una ley general.
Ahora estamos gestionando una campaña para que se modifique la ley nacional 26130, que es una ley general sobre anticoncepción quirúrgica. Esta ley, en el art. 3°, menciona que en el caso de las mujeres con discapacidad que tengan restringida su capacidad jurídica, la decisión la debe tomar su representante legal o el curador. Lo que sucede concretamente es que hay un gran número de esterilizaciones que se hacen sin el consentimiento de la mujer. Dentro de los talleres, varias mujeres con discapacidad contaron que se dieron cuenta ya siendo adultas que habían sido esterilizadas sin su consentimiento porque no quedaban embarazadas en la vida adulta.
En la APP, entonces, quisimos explicar de forma simple incluso lo que tiene que ver con la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo. Creo que esta APP es una de las primeras herramientas que existen con información actualizada sobre esta ley y explicado en un lenguaje sencillo, lo cual es imprescindible para llegar a todas las mujeres.
APU: ¿Qué respuesta tuvieron desde que se lanzó la APP en marzo hasta ahora por parte de los diferentes tipos de usuarios con y sin discapacidad y desde los centros de salud?
A.G.: Hasta ahora no hemos recibido comentarios de los equipos de salud. De todas formas, entendemos que, entre todo lo que fue la implementación de la Ley IVE y la situación actual de recrudecimiento de la pandemia, tiene que ver con la falta de tiempo y agotamiento del personal de salud. Sí, en cambio, recibimos muchos comentarios y agradecimientos de las propias usuarias, y también tuvimos muy buenas devoluciones por parte de las organizaciones feministas y de derechos humanos que forman parte de la campaña sobre la Ley de Esterilizaciones, como la APDH (Asamblea Permanente por los Derechos Humanos), el CELS, ASIG, Casa FUSA, entre otras. Además, la APP tuvo una gran repercusión mediática en medios nacionales y provinciales.
Sabemos que en CABA hay mucha información circulando, pero, por el contrario, en las provincias esto es muy diferente y han mostrado mucho interés en la propuesta. La realidad de las provincias en cuanto a la discapacidad es ingrata entre los mismos vecinos incluso, en tanto siempre se responsabiliza a las mujeres, junto al hecho de que la religión está fuertemente arraigada. En esta APP, para concluir, lo más interesante es la posibilidad de poder reportar todas aquellas situaciones en las que los derechos no fueron respetados.