A 27 años de la Masacre de Wilde: “Queremos que haya Justicia y los culpables paguen”
Por Juan Borges
Ciro Annicchiarico, abogado de la familia de Edgardo Cicutín, víctima de la Masacre de Wilde, conversó con AGENCIA PACO URONDO y ofreció su mirada de cara al juicio oral que lleva casi tres decadas de demora.
APU: ¿Qué fue la llamada “Masacre de Wilde”?
CA: Fue un caso de gatillo fácil ocurrido hace más de 27 años en el que cuatro personas fueron asesinadas por policías de la Brigada de Investigaciones de Lanús. El hecho sucedió el 10 de enero de 1994. Entre las víctimas se encuentran el remisero Norberto Corbo y sus pasajeros Claudio Mendoza y Enrique Bielsa. Asimismo, también el vendedor de libros Edgardo Cicutin quien se trasladaba en un Dodge 1500, junto Claudio Díaz otro vendedor de la misma editorial y el único sobreviviente. Actualmente hay imputados nueve ex policías, ocho de los cuales se encuentran libres.
Los acusados son los agentes Osvaldo Lorenzón, Eduardo Gómez, Marciano González, Roberto Mantel, Hugo Reyes, Pablo Dudek, Julio Gatto, Marcelo Valenga y Marcos Rodríguez, este último es el único detenido después de estar 20 años prófugo. Todos ellos acusados de cuádruple homicidio y un homicidio simple en grado de tentativa.
APU: ¿Qué hubo detrás de aquel múltiple homicidio?
CA: La realidad es que fue una ratonera, porque venían persiguiendo a una banda para quedarse con su botín. Era el modus operandi propio de las brigadas en ese contexto. Eran épocas de la policía de Pedro Anastasio Klodczyk. Las brigadas solían quedarse con el botín de las bandas. Les hacían un seguimiento y después se quedaban con todo. En este caso era la brigada de Lanús tenía el dato de un Dodge en el cual supuestamente se trasladaba una banda que tenía droga y dinero en su auto. Los perseguían con autos particulares y vestidos de civil con el único objetivo de quedarse con la droga y el dinero que traía la banda delictiva. La idea era matarlos a todos y fraguar un enfrentamiento. Esa era la metodología de la banda del comisario Rivelli. Eso fue la Masacre de Wilde.
Con la desgracia de que Edgardo Cicutin que era un vendedor de libros tenía que repartir en esa misma zona. Justo en un Dodge 1500 amarillo como el que estaban persiguiendo. Lo encierran y directamente los balean. Claudio Díaz pudo salvarse de milagro. Cicutin fue acribillado por la espalda. En el otro auto Peugeot 504 los pasajeros fueron masacrados también. Miembros de la misma brigada se llevaron un maletín en otro auto que se alejó rápidamente del escenario del crimen. El maletín nunca apareció.
APU: ¿Qué balance puede realizar sobre esta primera audiencia?
CA: Después de casi veintiocho años y de siete de que la Core Suprema de Justicia provincial ordenara realizar el juicio por la “Masacre de Wilde”, finalmente llegamos a la primera audiencia preliminar el día 26 de octubre. La fiscal Viviana Simón y nosotros los abogados de las victimas expusimos nuestra prueba una vez más. Desestime algunas evidencias que a esta altura consideraba innecesarias. Agregamos una prueba nueva que es pedir un informe a la AFI, ex SIDE, para solicitar escuchas de ese momento referido al caso que nosotros investigamos. Debido a que hubo fuertes vinculaciones al caso AMIA y la Masacre de Wilde.
APU: ¿Qué aseveraciones puede realizar sobre las defensas de los acusados?
CA: El tribunal manifestó que había libertad de tomar la palabra de la manera que considerara cada uno. Después de varias horas de audiencia el tribunal permitió expresarse a todos con total libertad. Fijo una nueva fecha de audiencia para el 12 de noviembre a las 9 de la mañana, sería la segunda parte de la primera audiencia preliminar. Después de esa audiencia el tribunal tendrá cinco días para fijar la fecha de inicio del juicio. Yo considero que eso será recién el año próximo.