A 26 años del crimen de Sebastián Bordón: “Transformamos el dolor y la muerte en lucha”

Florencia Bordón, hermana del joven que fue víctima de desaparición forzada seguida de asesinato en octubre de 1997, dialogó con AGENCIA PACO URONDO en un nuevo aniversario del crimen.  

APU: ¿Qué recuerdos y reflexiones se le vienen a la mente en un nuevo aniversario del crimen de Sebastián?

Florencia Bordón: Cuando mi hermano salió de viaje de egresados lo desaparecen y lo mata la policía de Mendoza. Estuvo desaparecido diez días. A Sebastián lo encuentran un 12 de octubre en un barranco en el Cañón del Atuel. El excomisario Hugo Trentini recibió la pena de cadena perpetua por el homicidio de mi hermano en el año 2000.  Posteriormente, Trentini fue condenado en un juicio de lesa humanidad, en junio de 2017. Cuando lo juzgaron por los crímenes durante la dictadura estábamos muy emocionados y Ángela Urondo (hija del militante montonero Paco Urondo) me dijo: “Si los hubieran condenado antes a los genocidas tal vez Sebastián estaría con vida”. Piensos en esas palabras y las contrapongo con las palabras que escuché en el debate en el cual el candidato libertario (Javier Milei) dijo que “no eran 30.000 desaparecidos” y suena increíble que eso sea parte del debate hoy.  

Algo a tener en cuenta, es que lo de Sebastián ocurrió en democracia, pero utilizaron la misma metodología que en dictadura. Tatiana Sfiligoy -que fue la primera nieta recuperada- fue mi psicóloga muchos años en el Centro Ulloa. Ella me acompaño en todo mi proceso para sanar lo que había sucedido con mi hermano. Yo no conocía la historia de Tatiana y cuando estuve en la Patagonia voy a una escuelita, donde ella contaba su historia y ahí conozco la verdad de su vida.

Para nosotros fue muy importante también el acompañamiento del periodista Sebastián Moro y sus hermanas. Cuando eran los homenajes de mi hermano en San Rafael de Mendoza, Sebastián Moro acompañaba a las madres. A él lo mataron cuando fue el golpe de Estado en Bolivia. Quería mencionarlo porque nos acompañó mucho. Esta vida me quito a mi hermano de sangre, pero me dio muchos otros.

También, fue muy importante para nosotros la militante de derechos humanos Renée Ahualli, también nos acompañó muchísimo en la exigencia de justicia. Ella era compañera de militancia de Paco Urondo y murió este año. La queremos mucho.  

APU: Transitaron un camino de dolor, pero también de lucha…

F.B.: La vida me dio una gran enseñanza de aquello que no queremos que le suceda a los jóvenes. Apostamos a la salud, la educación, el trabajo. Se cumplen también 21 años de la fundación de la ONG “La casita de Sebastián” que es un jardín maternal para niños de bajos recursos, con un comedor. Allí transformamos el dolor y la muerte en lucha. Apostamos al futuro.

Para mí esta fecha representa lucha, convicciones y cosas que no queremos que le sucedan a los jóvenes. Pensamos que es muy importante reeducar a las fuerzas de seguridad con valores en derechos humanos. Porque no queremos que le trunquen la vida a ningún joven más. Las fuerzas de seguridad están para cuidarnos y no para arrebatarnos la vida. Cuando pienso en estas fechas también pienso en lo que le hicieron a Santiago Maldonado, cuando sucedió su situación de desaparición y muerte para mí fue revivir lo que ya había pasado.

APU: Usted era una niña cuando sucedió lo de su hermano…

F.B.:  Cuando sucede lo de Sebastián yo tenía 8 años, era muy chica y no podía poner en palabras lo que veía y sentía. Una vez que crecí entendí lo joven que había fallecido. Sebastián una persona muy risueña y simpática. Acompañaba siempre a mi madre en el cuidado de sus hermanos. Mi madre era maestra y trabajaba doble jornada y entonces Sebastián nos cuidaba. Le truncaron la vida y sus sueños a mi hermano. Le gustaba la cumbia y jugar al futbol. Cuando fui adolescente estuve muy enojada con la vida por lo que había pasado.  Cuando a los 24 años tuve a mi hija Almendra me pude reconciliar con la vida y entendí que había que pedir justicia, ya no tanto de una manera rebelde y agresiva sino acompañando a familiares de víctimas. Era poniendo en palabras lo que nos había pasado a nosotros como familia. Encontré en el camino muchos otros hermanos del corazón.

APU: Las Madres de Plaza de Mayo y los HIJOS iluminaron el camino…

F.B.: Inevitablemente pienso en las Madres de Plaza de Mayo que le han enseñado a mi madre el camino de exigir justicia. También pienso mucho en las Madres en Lucha, yo crecí con ellas. Al principio cuando a uno le sucede esto piensa que solo a nosotros nos sucede algo tan terrible. Sin embargo, en el camino te vas encontrando a otros exigiendo justicia. Aprendimos el camino que construyeron las Madres y los Hijos de los desaparecidos. Nos fuimos acompañando. Nos mueve el mismo pedido de justicia. Te das cuenta que no estás solo.

APU: ¿En noviembre se va realizar un festival de homenaje a Sebastián?

F.B.: Vamos a hacer un festival en la ONG “La casita de Sebastián” dónde va a tocar una banda de música popular para homenajear a Sebastián.