"Habitar un pájaro": la danza como lenguaje de la utopía y la inspiración

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Foto: Cecilia Gamboa

ARTES DEL MOVIMIENTO

"Habitar un pájaro": la danza como lenguaje de la utopía y la inspiración

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01 Septiembre 2024

Habitar un pájaro (o la metamorfosis del Sr. López) con coreografía y dirección general de Gustavo Friedenberg, estrenó en la Sala Solidaridad del Centro Cultural de la Cooperación. Ganadora del Programa Iberescena en la línea de coproducción internacional, la obra está inspirada en el cuento “La metamorfosis del Sr. López” del dramaturgo español Rubén Pérez Pombo (Premio Xuventude Crea 2015, Galicia) y explora las posibilidades narrativas y poéticas de la danza en su encuentro con los títeres y el teatro de objetos. Gustavo Friedenberg es Licenciado en Composición Coreográfica y Magister en Crítica y difusión de las Artes. Formó parte del directorio de PRODANZA en la gestión 2021/2023. Como bailarín se dedicó profesionalmente al flamenco, aunque no es el lenguaje que suele explorar para sus creaciones. En 2012 creó Animales Danza Teatro, una plataforma de producción creativa desde la que impulsa todas sus obras e investigaciones, realizando también colaboraciones con artistas de todo el mundo que lo llevaron en giras por Japón, Europa, Estados Unidos, América latina y el Caribe. Se formó también en España y participó de workshops en el Odin Teatret (Dinamarca) y el Directors Lab West (EEUU), entre otros. En 2022 estrenó su primera película “Acúfenos” y recientemente realizó la puesta coreográfica de Partir(Se), de Belen Galain (1er. Lugar del XV Premio Germán Rozenmacher de Nueva dramaturgia) que se encuentra programada y co producida por el FIBA 2024. En 2004, tras realizar la cursada de Técnica de Clown en el IUNA, es becado por Cristina Moreira para continuar indagando las diferentes propuestas de la técnica de Jacques Lecoq en el marco de su estudio particular. Allí conoce a Eliana Pereira Rejala y Daniela Fiorentino, ambas actrices, titiriteras y artista plásticas. Los tres artistas colaboraron entre sí en distintas producciones, pero 20 años después, es la primera vez que se embarcan en una obra juntos. AGENCIA PACO URONDO conversó con el coreógrafo sobre Habitar un pájaro que se presenta todos los jueves de agosto y septiembre en el Centro Cultural de la Cooperación.

Agencia Paco Urondo: Habitar un pájaro fue una de las 5 obras ganadoras de Iberescena, programa que promueve el intercambio, la creación y la profesionalización de las Artes Escénicas Iberoamericanas. ¿Podrías contarnos cómo es esta experiencia en relación a la construcción de tu nueva obra?, ¿cuál es el apoyo, el sostén y en qué lo ves reflejado a la hora de crear?

Gustavo Friedenberg: Lo primero es que recibir Iberescena te permite llevar adelante coproducciones internacionales que, en el contexto del teatro independiente argentino, resultaría muy complicado. En nuestro caso fue una coproducción con España, de dónde es Rubén Pérez Pombo, autor del cuento original y co-dramaturgo de la obra. También trabajamos con un músico Gallego y un equipo de producción de allá. En un principio planeábamos hacer parte del proceso en ambos países pero las circunstancias precarias del nuestro durante el primer semestre del año, en relación con todas las instituciones destinadas a velar por el arte y la cultura, nos obligaron a reprogramar. Por suerte fue posible trabajar a distancia y vamos a sentir que el trabajo está completo cuando hagamos nuestro estreno también en España.

Después, hay algo que tiene que ver con cómo Habitar un pájaro se alineaba fuertemente con algunos de los ejes temáticos del programa; en algún momento de nuestro proceso creativo, que comenzó mucho antes de ganar Iberescena, nos desviamos un poco en otra dirección pero creo que, justamente, preparar el proyecto para su postulación nos hizo volver a nuestro eje: esta obra tiene un trasfondo relacionado con género y diversidad, además de una manera muy sutil de abordarlo. Este es un momento importante para atender estos asuntos porque el contexto político y social los vuelve a poner en jaque. Entonces, de algún modo, participar de la convocatoria nos ayudó a volver a poner en el centro algo que para nosotros siempre había sido importante.

Finamente, una obviedad pero no por ello menos cierta, siempre es más fácil producir cuando contás con recursos económicos.

APU: En cuanto al lenguaje de Habitar un pájaro: danza, objetos, títeres, teatro. ¿Cómo se expresa en la obra este cruce de experiencias?

G.F.: En el imaginario de esta obra todo se da muy naturalmente, tal vez porque a mí no me preocupan los “manuales del buen uso”; si al titiritero se lo tiene que ver o no, si hay que ocultar el truco, si hay mucha o poco danza y qué estilo de danza es… a mí todo eso deja de importarme en la medida que la obra empieza a hablar por sí misma, poniendo en primer plano un cuento precioso que se construye, en parte por su dramaturgia pero, fundamentalmente, por la belleza de la imagen y porque todos los movimientos componen una gran coreografía en la que hay momentos de mayor despliegue físico y momentos en los que sólo vemos una diagonal trazada por la caminata de una actriz.

En todo caso, es parte del proceso descubrir a qué lugares les conviene ser habitados por la palabra y que otros les viene mejor ser elaborados con otros recursos que potencien y les permitan multiplicar los sentidos y construir otro tipo de poesía diferente de la que celebra la oralidad. Creo que el mundo de los títeres se asocia tanto a los chicos porque ellos no tienen nuestras limitaciones a la hora de jugar; no les resulta más divertido el juguete más caro del mundo que un par de piedritas y una lata y mucho menos les preocupa pasar de una cosa a la otra sin pensar en una lógica que justifique el cambio. Lo que nosotros hicimos fue dejar que emergiese una lógica propia de la obra, a partir de los diferentes recursos que nos interesaban.

APU: Sin adelantar, podrías contarnos por qué Habitar un pájaro: ¿a qué remite el nombre, muy poético por cierto, de la obra?

GF: La idea de habitar un pájaro tiene que ver con el concepto de hacerse de un cuerpo que, en principio, al personaje no le resulta propio. Es como entrar en una casa nueva; la encontrás vacía. Tiene marcas de alguien que vivió antes o ninguna marca y conforme la empezás a habitar la vas llenando de vos: tus cosas, la disposición de los muebles para que te sea cómoda, tus colores favoritos, en definitiva, tus decisiones. Nuestro protagonista llega a un punto en el que, o bien se dedica a disfrutar pacíficamente los últimos años de su vida esperando el final, o bien, se ocupa ferozmente de encontrarse con su propio deseo aunque ese deseo no necesariamente le sea cómodo, porque exige transformaciones.

La idea del hombre convertido en pájaro no sólo es poética y está cargada de imágenes preciosas sino que, además, se vincula directamente con esa fantasía que despiertan las aves y que, seguramente, a todos nos maravilla, que es su capacidad de volar; la utopía máxima. Entonces nuestro protagonista asume un riesgo. Habitar un pájaro es una idea llena de poesía pero también de tragedia; implica una metamorfosis que, desde luego, se paga con la vida, porque algo debe morir para dar lugar a un algo nuevo.

Información general:

Dirección general y coreográfica: Gustavo Friedenberg

Dirección de títeres: Daniela Fiorentino y Gustavo Friedenberg

Asistencia de dirección general y coreográfica: Mónica Romero

Intérpretes: Daniela Fiorentino, Eliana Pereira Rejala y Gustavo Friedenberg

Asistencia general: Ícaro Puig Mujica (Uruguay)

Realización de títeres: Alejandra Farley

Diseño escenográfico: Gabriella Gerdelics

Diseño de Vestuario: Gabriella Gerdelics

Música original: David Alonso Garzón (España) y Carlos Britez (Argentina)

Diseño de luces: Ricardo Sica

Diseño de identidad visual: Elena Centelles Vázquez (España)