“La Patria Grande es una idea central del pontificado de Francisco”
Por Diego Kenis
Aunque no obtuvo proporcional cobertura en los medios hegemónicos argentinos, la visita del Papa Francisco a Chile y Perú, en enero último, se constituyó en uno de los puntos más relevantes de la agenda latinoamericana de este 2018.
El periodista italiano Salvatore Izzo (foto 2) acompañó el tránsito del pontífice por los países andinos, atestiguó el encuentro entre el Papa y las multitudes que lo recibieron y narró cada punto del viaje para los lectores italianos de la Agenzia Giornalistica Italia (AGI) y el diario digital Faro di Roma. Izzo tiene larga trayectoria en la temática: sus primeros trabajos de cobertura se remontan a épocas de Pablo VI, es vaticanista desde 1986 en la AGI, para la que a su vez edita el blog Il Papa pop, y es coautor de la transmisión A sua immagine, de la RAI.
AGENCIA PACO URONDO lo contactó para repasar los aspectos centrales de la histórica visita. El periodista italiano subrayó la importancia del concepto de “Patria Grande” en la multilateralidad que impulsa el Papa contra la voracidad estadounidense y dejó sus conclusiones respecto a las razones por las que Francisco posterga su retorno a Argentina. “No tendría sentido compartir la fiesta de ese esperadísimo regreso con un régimen que expresa exactamente lo contrario de los valores que él encarna”, indicó.
AGENCIA PACO URONDO: ¿Qué distingue a este reciente viaje de Francisco respecto del resto de la actividad papal?
Salvatore Izzo: Hubo algunos gestos absolutamente nuevos en este vigésimo segundo viaje apostólico del Papa Francisco. El primero, en Chile: el abrazo reparador con el pueblo Mapuche, que sufrió un exterminio sistemático y aún hoy es discriminado por el Estado chileno y explotado por mutinacionales como Benetton, en Argentina. Luego, el discurso programático en la Universidad Católica: uno de los más importantes de su pontificado, porque propuso un modelo de formación integral, que traduce la identidad católica en la capacidad de participar en la construcción de sociedades unidas y plurales, donde los conflictos no se ocultan sino que se manejan en el diálogo. En Perú, el extraordinario discurso de Puerto Maldonado, que reafirmó la dignidad de las poblaciones nativas del Amazonas, y en realidad abrió el Sínodo Especial, del cual esperamos finalmente la ordenación sacerdotal de los hombres casados. Finalmente, en Lima, las duras palabras a las autoridades y a la sociedad civil, que denunciaron la corrupción endémica que envenena a ese país, donde los pobres sufren graves injusticias y continuas ofensas, la última de las cuales fue poco antes de la llegada del Papa: el momento en verdad oscuro de la liberación del criminal (Alberto) Fujimori, culpable de violaciones sin precedentes a los derechos humanos.
APU: ¿Qué recibimiento despertó Francisco en los pueblos de Chile y Perú?
SI: En Chile un poco contenido. El Papa ha pagado por los errores de una Iglesia que ha herido a la población con su alianza de veinte años con los militares de (el dictador Augusto) Pinochet. En Perú, más cálido, según el carácter de esa gente magnífica.
APU: ¿Qué episodio de la agenda papal en Chile y Perú marcaría en particular?
SI: Si tengo que elegir sólo una cosa para recordar este viaje, entonces digo la humildad del Papa Francisco, que admitió haber cometido un error en la respuesta sobre el obispo de Osorno, ofensiva para quienes lo denunciaron, y primero se disculpó con las víctimas de la pedofilia. Al regresar, y luego llegar a Roma, modificó la decisión tomada al reabrir la investigación, como habían pedido a los fieles disidentes (que no había querido recibir). (NdR: el obispo de Osorno, Juan Barros, está acusado de encubrir abusos sexuales perpetrados por miembros del clero).
APU: ¿Cómo fue el encuentro del Papa con los sobrevivientes del terrorismo de Estado y referentes de los pueblos originarios?
SI: Francisco conoce bien, por haber vivido en Argentina, la compleja dinámica del estallido de una dictadura sangrienta como la que afrontó Chile. Pero el hecho de que el episcopado local estuvo en gran medida comprometido con el régimen de Pinochet hizo de esta parte de la visita un momento demasiado “privado”.
APU: Por primera vez, un Papa nacido en esta parte del mundo ha visitado el sur de América. ¿Cree que esto se ha reflejado de alguna manera en la agenda papal en Chile y Perú?
SI: Sí, creo que sólo un Papa surgido del pueblo latinoamericano podría pedir perdón con esta fuerza por el genocidio de los pueblos originarios.
APU: En Perú, el Papa visitó el proyecto social del sacerdote suizo Xavier Arbex, de la Teología de la Liberación. ¿Cómo fue ese encuentro?
SI: Fue un gesto emblemático, que tuvo lugar durante la etapa amazónica con una visita al Hogar “El Principito”. También debería leerse como un gesto de reconciliación con la Teología de la Liberación, injustamente juzgada en Roma. Francisco está produciendo importantes actos de discontinuidad con los pontificados anteriores.
APU: Francisco nació en Argentina, como San Martín, que también libertó Chile y Perú. Las crónicas de AGI y Faro di Roma han subrayado la importancia del concepto de “Patria Grande” en el discurso papal. ¿Por qué?
SI: Simplemente porque aquella intuición de Simón Bolívar es una de las ideas centrales de este pontificado. Una visión capaz de empujar la historia de una manera completamente opuesta a la política hegemónica de Estados Unidos, que muestra su ferocidad con el asedio de Venezuela y Cuba. Realizarla al menos en parte, relanzando concretamente el multilateralismo, significaría hacer una contribución decisiva a la paz en el mundo.
APU: La mayor parte de los medios argentinos, especialmente los oficialistas, ofrecieron poca información sobre la visita papal, y algunos criticaron que el Papa aún no haya visitado su país. ¿A qué cree que se deba la decisión de Francisco de posponer su regreso a Argentina?
SI: Creo que el Papa irá a su país solo una vez concluido el actual mandato presidencial, porque no tendría sentido compartir la fiesta de ese esperadísimo regreso con un régimen que expresa exactamente lo contrario de los valores que encarna (Jorge) Bergoglio.
APU: ¿Cuáles serían los puntos que destacaría como centrales en los mensajes del Papa a los pueblos de Chile y Perú?
SI: La promesa de que “la Iglesia nunca dejará de alzar su voz por los excluidos y los que sufren”. “De esta preocupación surge la opción primordial por la vida de los más indefensos”, dijo el Papa en Puerto Maldonado, instando a todos los católicos del mundo a una solidaridad activa con los pueblos indígenas, para “continuar defendiendo a estos hermanos más vulnerables”, cuya presencia nos recuerda, subrayó, “que no podemos disponer de los bienes comunes al ritmo de la codicia del consumo. Es necesario que existan límites que nos ayuden a defendernos de cualquier intento de destrucción masiva del hábitat que nos constituye”.
“No sucumban a los intentos de erradicar la fe católica de sus pueblos”, ha pedido por su parte a los representantes de los pueblos originarios. “La Iglesia -enfatizó- no es ajena a sus problemas y a sus vidas, no quiere ser extraña a sus formas de vivir y organizarse”.