Ignacio Muruaga: “Macri siente que si gana Milei es una reivindicación”
APU Stream, el programa de la Agencia Paco Urondo que sale los sábados de 11 a 13 hs por el canal de Youtube y Twitch de Gelatina, dialogó con Ignacio Muruaga, analista político, quien abordó los resultados de las elecciones generales y el escenario de cara al ballotage.
Agencia Paco Urondo: ¿Qué análisis hace de los resultados? ¿Era de esperase una reconfiguración dentro de Juntos por el Cambio?
Ignacio Muruaga: Sí, en este escenario con ellos saliendo terceros tan cómodos. Me parece que las tensiones eran inevitables, sobre todo porque yo solía decir que Juntos por el Cambio siempre fue como una mezcla inestable de dos partidos distintos. Eran como dos alianzas en una que lo único que tenían en común era, quizás en algún otro momento de la historia reciente, la pulsión de derrotar al kirchnerismo y de construir un proyecto de poder nuevo. Lo que los mantenía unidos de alguna forma era la posibilidad de que eso fuese real, de que juntos podían ganarle
Después del domingo pasado, donde quedaron terceros y esa posibilidad dejó de existir, eso que los abroquelaba dejó de estar. Ahora empieza a estar bien nítido que, en realidad, ahí había de dos coaliciones distintas. Una mucho más dura, mucho más extremista, que sí está mucho más definida por el antikirchnerismo, donde vos podés poner al Pro o a los elementos más duros del Pro. Después, otra distinta donde están los radicales, la Coalición Cívica, una parte grande del PRO también, que me parece que tiene otros condimentos.
APU: En estos dos grandes polos, tampoco hay que descartar radicales más antikirchneristas y más cercanos a votarlo a Javier Milei.
IM: El radicalismo es un universo complejo. Hay algunos que, en los últimos diez años, se han comido demasiado el cuentito macrista del antikirchnerismo y que, probablemente, estén más del lado de los duros. Lo curioso ahí es que ninguno de esos tiene capacidad de ganar elecciones ni mucho menos de gestionar. Creo que es muy lineal la idea de que los radicales que están de ese lado, del que hay que prender fuego todo, son quienes no tienen responsabilidades institucionales.
Por ejemplo, muchos de Córdoba. Es un radicalismo que no gestiona hace mucho y que en el fondo tampoco se imaginan gestionando. Un radical que ganó su intendencia o gobernación, o que quiere hacer eso en el futuro cercano, no van a salir ahora con lanzallamas porque entienden cuál es la lógica del poder que tienen y que si se queman de más después eso les pone un techo.
APU: Tanto Maximiliano Pullaro como Alfredo Cornejo, gobernadores electos, se han bajado de esa línea post elecciones.
IM: Lo de Pullaro es el caso paradigmático porque además él salió a decir, textualmente, “yo voy a cuidar mi coalición”. Está hablando desde un lugar de responsabilidad, que es que sabe que tiene que gobernar y que va a tener que cuidar lo que lo llevó al gobierno, que fue haber construido una coalición tan amplia. Además, va a tener que cuidar sus vínculos con el futuro gobierno nacional. Eso marca mucho también el tono de lo que está pasando porque hay un montón de gobernadores e intendentes de Juntos por el Cambio que no van a querer salir con lanzallamas en el ballotage. Están pensando que se la pueden jugar por Milei pero si después gana Sergio Massa tienen que gobernar cuatro años con él.
APU: De cara al ballotage, ¿cómo considera que puede influir la estrategia de Milei de pasar de “anti casta” a “antikirchnerismo”, que es la misma que usó Patricia Bullrich y salió derrotada.
IM: El primer aspecto a analizar es que es lo único que le queda. No es que tenía otra opción, pero la está ejecutando de una forma muy torpe y lineal, y eso es lo que le genera costos. Esa ejecución es de esa forma porque él está un poquito desesperado, entonces se armó una ambulancia rápido y salió a ver qué es lo que puede juntar. La ejecución me parece que sí le trae daños a su narrativa. Llegaste hasta donde estás con un discurso anti casta y, en menos de 24 horas, sos el jefe de la casta y además pactas con gente que la mayor parte del país percibe como casta.
Su principal sostén político ahora mismo, que es Mauricio Macri, sigue siendo la figura más con más imagen negativa de todo el país. Sigue siendo una de las figuras más repulsivas para gran parte de la sociedad. Estuviste hasta hace una semana diciendo “son todos casta, me los voy a llevar puestos” y ahora vas y pactas con posiblemente la persona que, si salís a la calle y le preguntas a la gente quién es el más casta de todos, te van a decir Macri o Cristina todos. Tu cuento se cae también. No sé eso qué costo le puede traer electoralmente, pero sí lo deja lo deja en un lugar raro que es difícil de narrar.
APU: ¿El discurso antikirchnerista no es forzar un debate que hoy la política no se lo está dando? ¿Cómo convive con su discurso anti casta y quién es el jefe de la misma?
IM: Me parece que ese va a ser uno de los temas que va a tener ahora en la campaña. El mismo peronismo va a salir a que ahora el candidato es Macri. Me imagino, sobre todo en el debate, que el ataque va a ser ese. El slogan es Milei al gobierno, Macri del poder. Eso le quita mucho brillo, porque el problema es que, por las características públicas de Macri, es muy fácil construir eso. Es un chabón que abarca, todo lo que empieza a trascender, sea verdad o no, del acuerdo que hicieron es que es Macri diciéndole que si es presidente va a ser dueño del 80% de su gobierno.
APU: Macri salió a apropiarse de la idea de cambio nuevamente, queriendo dar la sensación de que el dueño de los votos es él y no Milei. Lo mismo de Bullrich hacia los radicales.
IM: Todas esas son cosas de tener una ejecución tan pobre. Alguien de ellos decía que esto podría haber sido más ordenado. Podrías haber salido el domingo a decir una cosa mucho más abierta de convocar a los que más o menos tenemos una misma idea de país, esperar un par de días, decir primero que vas a dar libertad de acción, y después ir ordenándolo de a poco. El hecho de que hayan salido en 48 horas tan agresivamente con las cosas tan atadas con alambre, sobre todo Macri y Bullrich, es lo que hace que ahora todo parezca tan inestable, raro y poco natural. Se anunciaron encima, pero en un contexto donde hace una semana se estaban matando.
APU: ¿Considera que fue una estrategia de Macri para sacarse de encima al resto de la coalición?
IM: Sí, ahí para mí hay muchos condimentos personales de él. Es como que ha reinterpretado toda su vida política y muchas de las cosas que antes objetivamente lo hacían exitoso ahora las reinterpreta como que fueron sus grandes errores. Macri era inviable hasta que se empezó a moderar y empezó a ganar elecciones como loco, básicamente hasta que le empezó a dar bola a Jaime Durán Barba y a Marcos Peña que lo transformaron en otra cosa. Le sacaron todo su fetiche y sus obsesiones de encima y lo hicieron Barack Obama en ese periodos de seis años donde estaban todos diciéndolo.
Eso es cierto objetivamente, ganó elecciones siguiendo ese camino y se transformó en un actor de poder importante en el país. Y ahora reinterpreta que no, que llegó ahí pero por culpa de esos mismos después perdió. Si hubiese sido yo mismo, hubiera ganado igual. Creo que es la lectura que hace él y siento que vive con frustración lo que pasa con Milei. Este tipo, que es peor que yo, peor que lo que era yo, está ganando.
APU: Está celoso.
IM: Sí, está un poco celoso y con Juntos por el Cambio sigue y está incómodo con lo que terminó siendo por esto mismo que él dice. Todos los que lo moderaron son los culpables de que le haya salido mal. Es interesante ver como una figura como esa, sin un entorno que lo modera y lo lleva a determinados lugares, se termina transformando en un gran destructor.
APU: El recorrido en distintas gestiones de Massa, que podía ser visto como una debilidad en el discurso anti casta, ahora resulta una fortaleza.
IM: Creo que la ventaja que tiene Massa es que, en este ballotage, con un contraste muy fuerte con Milei, que Durán Barba lo dijo hace un par de semanas, no podés ganar una elección prometiendo una sociedad amish. Milei sigue insistiendo con quemar el Banco Central, dolarizar, prender fuego todo, y siento que hay algo del cansancio con utopías, donde la misma es “te vas a tener que sacrificar y hacer un esfuerzo sobrehumano para llegar al paraíso”. Massa, del otro lado, es una cosa mucho más moderada.
APU: ¿Sería acertado por parte del peronismo salir a pegarle a Macri o Bullrich cuando el candidato sigue siendo Milei, que quizás es lo que dio resultado hasta ahora?
IM: Creo que ahora lo más inteligente que podría hacer el peronismo, que es lo que está haciendo, es nada y mantenerse en silencio. Tuvimos una semana de silencio militar y absolutamente disciplinado sin nadie diciendo boludeces. Creo que no pasa desde la desde la presidencia de Cristina, que no hay un orden tan firme. Para mí hay que seguir en esa hasta que se termine de ordenar lo que están armando Macri y Milei, y después ver.
Creo que hay una parte donde la campaña va a ser ahora muy en contra de Macri, sobre todo si él sigue exponiendo tanto. Esa también es una cosa rara que ellos están haciendo, porque pensaba hace un par de días que la cosa iba a ser Bullrich apoyándolo, alguna cosa en combo con Milei, y Macri atrás. Sin embargo, salió abiertamente. De nuevo, creo que ahí hay muchos de sus condimentos personales, que él quiere salir porque siente que es una reivindicación de él también, que si él gana lo reivindican. Si sigue saliendo la campaña de masa va a ir orientada a que el ballotage es Massa o Macri en este momento, y Milei va a quedar muy desdibujado.