¿A quién le daría la Inteligencia Scioli?
Por Santiago Gómez – Desde Florianópolis.
Según manifestó el Jefe de Gabinete de Ministros Aníbal Fernández, el abogado Gustavo Alfredo Horacio Ferrari, Asesor General del gobernador Daniel Scioli, sería nombrado Director de la Agencia Federal de Inteligencia en caso de ganar el Frente Para la Victoria las próximas elecciones. Proveniente del sector privado, vinculado al ala conservadora de la Iglesia Católica, Ferrari fue director de Quilmes Industrial S.A, de quien representó sus intereses en Luxemburgo, asesoró a la Asociación de Bancos de la República Argentina, presidió la asociación civil Unidos por la Justicia, de la cual forman diversos miembros del poder judicial, y que además mantiene estrechos vínculos con el Consulado Británico y la fundación alemana Konrad Adenauer, mencionada en los Wikileaks por espionaje. A través de De Narváez hizo el paso de los negocios a la política, pasó del colorado al naranja asumiendo la Asesoría General de Gobierno de la provincia de Buenos Aires. No tiene como Stiusso una empresa para importar todo tipo de equipos relacionados con las telecomunicaciones, pero sí la creó su socio Fernando Oscar Rozas, con quien comparten domicilio legal sus empresas. De su voto contra la nacionalización de YPF a la posibilidad de que Scioli le delegue la defensa del interés público.
Abogado de empresas
Según informa Gustavo Alfredo Horacio Ferrari en su sitio web, nació del 24 de marzo de 1957, es oriundo de Chivilcoy, estudió abogacía en la UBA, relaciones institucionales en la Universidad Austral, además de recibirse de mediador en la Escuela de Abogacía de Buenos Aires, de la cual fue director ejecutivo entre 1995 y 2000. No menciona que fue tesorero de la Fundación Aletheia, que recibía financiamiento de Gregorio Pérez Companc, habitual financiador del Opus Dei, a quien le agradecen sus aportes en la edición del libro “El trabajo humano: clave de la cuestión social de fin de siglo” de 1999, mientras Goyo colaboraba con aumentar la desocupación. Ferrari fue además director de la sociedad Quinsa con sede en Luxemburgo, junto a Diego Miguens, sociedad controlante de Quilmes y Pepsico. Ferrari fue también director del Grupo De Narváez.
A mediados de 1997 el Consejo Empresario Argentino (desaparecido en el 2002 y reemplazado por la Asociación Empresaria Argentina) solicitó al Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires y al Foro de Estudio Sobre la Administración de Justicia (FORES), realizar un proyecto de reforma judicial. Ferrari actuó como director Ejecutivo del programa. Recordemos los vínculos del Colegio de Abogados de Buenos Aires con la dictadura, documentado en diversas oportunidades por el periodista Horacio Verbitsky, tanto en sus notas como en el libro “Cuentas pendientes”. En los créditos por el trabajo que los empresarios encargaron a esas instituciones, se informa que la sección “Justicia y Empresas” fue dirigida y elaborada por el Dr. Enrique V. del Carril, pero “debe resaltarse la colaboración del Dr. Germán C. Garavano” y que “el Dr. Gustavo A. H. Ferrari es el responsable de los Capítulos 5, 6 y 7 de dicha sección. Germán Carlos Garavano fue Fiscal General de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y también miembro de Unidos por la Justicia. Resulta verosímil a la distancia, la versión de diversos medios de comunicación respecto a lo bien recibida que fue la noticia del nombramiento de Ferrari por parte de los empresarios.
Información judicial
La presencia de los servicios de inteligencia en los pasillos de Tribunales se debe a la importancia de contar con información sobre procesos judiciales. Saben los abogados de los estudios más prestigiosos del país de la importancia de tener amigos dentro de algún palacio de justicia para saber anticipadamente el resultado de un fallo, para que sus clientes planifiquen inversiones o cambien sus estrategias de negocios. Ferrari es un hombre que garantiza contactos dentro del poder judicial, ya sea por su vínculo con la editorial El Derecho, perteneciente a la Universidad Católica Argentina, como por los distintos miembros del poder judicial vinculados a Unidos por la Justicia a los que Página/12 hizo referencia (click aqui). Tan solo es cuestión de entrar al portal de Unidos por la Justicia, para saber quiénes son sus miembros. Su actual presidente, Alan Martín Nessi, debió renunciar al concurso CMCABA N° 42/2010 para cubrir cargos de Fiscal en la Justicia de Primera Instancia en lo Penal Contravencional y de Faltas, luego del cuestionamiento hecho por el Observatorio de Derechos Humanos de la Ciudad de Buenos Aires –ODHCBA- tras el escándalo desatado por presentar respuestas afines a un cuestionario que había sido desechado por el jurado interviniente. “Alan Martín Nessi es presidente interino de la asociación Unidos por la Justicia, la ONG que integra y responde al fiscal general porteño Germán Garavano. El cargo por el que concursaba justamente era para cubrir vacantes dentro del Ministerio Público Fiscal, organismos que conduce Garavano” precisó el ODHCBA a través de un comunicado.
Nuestros amigos los sajones
El día 30 de mayo de 2005, se llevó a cabo en el Salón Auditorio de Avenida de Mayo del Ministerio Público Fiscal, la conferencia “Lavado de dinero: Prácticas y Procedimientos Internacionales”, a cargo del doctor Andrew Mitchell, nombrado Asesor Letrado de la reina de Gran Bretaña. Mittchell visitó la República Argentina en el marco del Programa “Anticorrupción y lavado de dinero: Desarrollo de una nueva legislación y entrenamiento de autoridades judiciales y ejecutivas de la Argentina”, organizado por Unidos por la Justicia, Asociación Civil y la Embajada del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, “quienes han posibilitado gentilmente esta reunión en favor de los miembros del Ministerio Público Fiscal”, se lee en el informe anual del MPF. Garavano, Director Académico de Unidos por la Justicia, estudió en Inglaterra gracias al British Counsil . Dicha institución a becado a distintos profesionales ligados a la política argentina, sean de derecha o izquierda. Ferrari, que conoce al dedillo los mecanismos a través de los cuales se lavan dinero, presentó proyectos de ley para combatirlo.
Existe además otra institución con la que Unidos por la Justicia mantiene fuertes vínculos, como la Fundación Konrad Adenauer (KAS, por su sigla en alemán). La KAS pertenece al Partido Democrata Cristiano alemán, al que pertenece Angela Merkel, de profundos vínculos con la iglesia argentina, tal es así que aparece entre quienes adhirieron al libro mencionado que financió Pérez Companc. La KAS no es la única fundación alemana que financia actividades a partidos políticos locales, a través de las cuales se garantiza el acceso a información mediante el diálogo con los principales actores políticos y económicos del país. En el año 2010 la KAS ocupó los diarios europeos luego de que se denegara el ingreso de su presidente en Ucrania, Nico Lange, acusado de espionaje por el servicio secreto ucraniano del gobierno de Viktor Yanukovich, cuya dirección era condicionada por el gobierno ruso, tal como afirmó Vladimir Putin en el documental que relata el regreso de Crimea a la Federación Rusa, que APU recomendó.
Sospechado de espionaje pero Scioli lo recibe
En los cables filtrados por Wikileaks se hace mención a Nico Lange como “un analista”, término utilizado para hacer referencia a los agentes de inteligencia. Previo a una visita de Yanikovich a Alemania, se le prohibió el ingreso a Lange a Ucrania, donde desarrollaba sus tareas en la KAS desde hacía unos años. El periódico The Ukrainian Weekly hizo referencia a la detención como al regreso de la guerra fría, identificando que la detención por diez horas de Lange en el aeropuerto se debió a indicaciones de los servicios de inteligencia rusos. Según informaron, debió intervenir Angela Merkel para su liberación y autorización de entrar al país.
Este no es el único caso en el que la KAS queda vinculada a actividades de inteligencia, dos de sus miembros fueron condenados a prisión en Egipto, aunque los mismos se encontraban en Alemania, por actividades ilegales dentro de ese país, junto a miembros de otras ONG's, acusadas de no respetar la legislación local. Por si no bastaran las denuncias que hace tres años realizó el gobierno venezolano de la colaboración de la KAS con la oposición, el mismo presidente de la KAS en Venezuela reconoció que el telegrama con el cual el candidato de la derecha a la Presidencia de Venezuela, Henrique Capriles Radonski, felicitó al arzobispo argentino Jorge Mario Bergoglio por su elección al Papado, fue redactado en la sede de la fundación alemana Konrad Adenauer Stiftung (KAS), en Caracas.
“Alemania debería promover una actuación internacional concertada de cara a Venezuela”, declaró Henning Suhr, director de la sede caraqueña de la KAS a la cadena alemana Deutsche Welle en febrero pasado. Por ello no sorprende que Scioli no haga mención a Venezuela en sus discursos, ya que en marzo pasado su hermano José “Pepe” Scioli mantuvo una reunión con la referente de la Fundación Konrad Adenauer Argentina (KAS), Kristin Wesemann, y con el encargado de la comunicación política de dicha entidad, Nico Lange, el mismo que fue acusado de tareas de espionaje en Ucrania.
Inteligencia y lavado.
La KAS en Argentina auspició la creación de una “herramienta de Inteligencia de negocios”, llamada DipuDatos, la cual “permitirá el acceso de los ciudadanos a la información parlamentaria de manera interactiva. Mediante el acopio y procesamiento de información oficial”. Sirva el caso de ejemplo para mostrar que el procesamiento de información parlamentaria, pública y oficial, es vista como inteligencia de negocios. Mientras los medios de comunicación privados centran la inteligencia en la actividad de los distintos aparatos del Estado, es de público conocimiento entre los empresarios el valor de la información. Los bancos, los empresarios, especulan en función de la información que manejan, baste como ejemplo los pocos que no quedaron adentro del corralito. Es conocida también la batalla entre Proctle & Gamble y Unilever por la información, sus prácticas de recolección de la basura de su competidora, lo que dio vida a empresas como Shred-it, que viven de destruir documentos a través de camiones trituradores, ya que de nada servía la máquina para cortar el papel en tiras, porque las empresas se tomaban el trabajo de rearmar las hojas.
Los empresarios conocen de las distintas estrategias para ocultar información sobre sus bienes, ya sea a través de la creación de empresas fantasmas o de los mecanismos necesarios para el desvío de fondos a paraísos fiscales. Junto con ellos acceden a esa información sus contadores y abogados. Ferrari siempre perteneció a esa zona gris en donde la información se maneja.
Ferrari el empresario
En el Boletín Oficial La Plata, del 29 de octubre de 2003 se hace saber que en la Asamblea General Extraordinaria de fecha 2/11/99 se resolvió la disolución de la sociedad Latina Cosmetics S.A y se designó a los miembros del Directorio de la Sociedad, Gustavo Alfredo Horacio Ferrari y Pablo Rubén Muñoz, como liquidadores. En enero de 2001 el fiscal Leandro Daniel Heredia ordenó la detención de Mario Ricardo Guevara, Judith Amelia Bellagamba y Marcelo Guevara por administración fraudulenta y vaciamiento de la empresa Latina Cosmetics S.A, ya que eran propietarios del 50% de la empresa. El otro cincuenta correspondía a la sociedad anónima “Societé Generale Patrimoniale” con sede en Luxemburgo, una empresa de inversión financiera que en el año 2000 llevó sus millones a Brasil.
Esa no es la única empresa de la que Ferrari formó parte, en octubre del 2009 inscribió SUMA ARGENTINA SOCIEDAD DE RESPONSABILIDAD LIMITADA, en sociedad con Fernando Oscar Rozas, que también fue legislador denarvaista, y Julián Lecea, con domicilio en Callao 852 piso 3, de la CABA. Julián Lecea fue designado en el 2014 como parte del cuerpo de asesores del Fiscal General de la CABA y en el año 2010 fue inscripta la sociedad EQUITY CAPITAL COMPANY LlMITED, con domicilio en Nueva Zelanda, “que tiene como objetivo distintas actividades económicas” y de quien fue nombrado Lecea como representante legal, empresa de la que no se encuentra en internet otra mención que no sea la del Boletin Oficial.
El objetivo de la empresa SUMA es “la organización y el desarrollo de actividades empresarias, incluyendo la provisión de servicios de gestión y/o de implementación o mejoramiento de procesos administrativos, productivos y comerciales, pudiendo a tal fin realizar análisis, estudios y diagnósticos”. Un mes después se inscribiría la empresa PRODEVENT, en sociedad de Ferrari con Florencia Noemí Maidana, una empresa “relacionadas con la recreación y el esparcimiento especialmente enfocadas en la ejecución integral o parcial de eventos y celebraciones públicas o privadas, corporativas, institucionales y sociales”.
Mi socio y los juguetes.
En mayo de 2009 Fernandos Oscar Rozas, quien sería socio de Ferrari en SUMA cinco meses después, creó la empresa QUILA PEÑI S.R.L., junto con Martín Adolfo Rozas y Carlos Matías Quiero Silva, con el mismo domicilio que las empresas de Ferrari: Callao 852 piso 3. En el Boletín Oficial se informó que “la sociedad tiene por objeto dedicarse por cuenta propia y/o a través de terceros o asociada a terceros, en el país o en el extranjero, a las siguientes actividades: Comercialización, representación, consignación, alquiler, importación, exportación y distribución de todo tipo de componentes electrónicos, equipos relacionados con la telecomunicación, cable, computación e informática, sus partes, repuestos, insumos, accesorios, programas y sistemas de informática”. Baste recordar que el ex director de la Secretaria de Inteligencia, Antonio Stiusso, fue procesado por contrabando a través de empresas que se dedicaban a la importación de elementos y equipamientos que sirvan a las comunicaciones. Como gerente de Quila Peñi se designó a Quiero Silva, Director General de Administración de la Asaesoría General de Gobierno de la provincia de Buenos Aires, que Ferrari tiene a su cargo. En ese mismo domicilio también está registrada la empresa AUREA SUD Construcciones S.R.L, que tiene entre sus clientes a un importante número de laboratorios y al Grupo Arcor, que ocupa la vicepresidencia de AEA, asociación que agrupa a Techint y el Grupo Clarín, entre otros.
Poniendo estaba la garza
Según informó el sitio Dinero y política, perteneciente a Poder Ciudadano, Gustavo Alfredo Horacio Ferrari hizo un aporte de $100.000 a la campaña de Francisco De Narváez en el año 2009, por lo que resulta difícil creer en los valores que informó en su declaración jurada del año 2011 al Congreso de la Nación. En dicha oportunidad Ferrari afirmó poseer $140.000 en Caja de Ahorro, U$S7.000 en una caja de ahorro en dólares y $42.950 en efectivo. Lo cierto es que en el Informe Previo de Ingresos y Egresos de Campaña correspondiente al Frente Para la Victoria, Ferrari aparece con un aporte de $40.000, a la campaña a Presidente de Scioli, los $60.000 restantes que faltan para alcanzar lo aportado a De Narváez hay que buscarlos entre los aportes realizados por sus colaboradores de despecho, entre ellos Carlos Matías Quiero Silva, socio en Quila Peñi, que aportó $10 mil.
El nombramiento de un empresario al frente del organismo máximo de inteligencia, sirve para mostrar que el sector privado tiene un importante interés en hacerse de información, en tiempos en que las grandes empresas de informática, como Oracle o IBM, venden servicios de BIG DATA, es decir, le ofrecen a las empresas que puedan pagarlo el servicio de almacenamiento de su información para su mayor seguridad. En tiempos en que las fuerzas que se resisten a la intervención del Estado en el mercado y juegan su poder de influencia en el poder judicial, Daniel Scioli nombraría a un abogado de estrechos lazos con el poder concentrado y con vínculo con fundaciones acusadas de espionaje.