Yasky: “No basta con ser representantes de los poderosos para imponer la mayoría de prepo”
Por Fernando Latrille
Mientras Juntos por el Cambio se hunde en una oposición virulenta que se niega a discutir, debatir, en el ámbito correspondiente para el que fueron elegidos, como lo hizo el martes 1 de septiembre, intentando boicotear las sesiones virtuales, amenazando con judicializar la sesión que se llevó adelante ayer en la Cámara de Diputados en forma remota. Mientras buscan impedir que se sesione con artilugios que solamente muestran sus contradicciones, el diputado nacional por el Frente de Todes, Hugo Yasky, con su vasta trayectoria en la defensa de los derechos de les trabajadores como secretario general de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), realizó una intervención que fue una descripción admirable y que se hace oportuno transcribir para quienes no haya tenido la posibilidad de escucharlo, pero también porque cada palabra expresada por Yasky merece ser escrita, porque seguramente quedará recordada en la historia.
Intervención completa del diputado nacional Hugo Yasky
Creo que el debate que se da a lo largo de todas estas horas parte de una premisa totalmente falsa. Y es intentar crear la idea de que esta sesión en la que estamos nosotros no tiene legalidad. Intentar crear la idea de que no existe una mayoría que está sesionando, simplemente por el hecho de que lo está haciendo a través de éste método que se acordó como un mal menor, frente a la existencia de la pandemia. Es decir, el método remoto.
Y hablan de reglamentarismo. Hablan de cumplimiento de normas. Hablan con prepotencia, de república. Como si realmente fuesen los dueños de la verdad. Como si estuviesen en condiciones de determinar qué es lo que se puede tratar y qué es lo que no se puede tratar en el Congreso. Como si tuviesen- siendo minoría-, el derecho a vetar los temas que queremos discutir en el Congreso.
Creo que evidentemente parten de una idea falsa. El pensar que como representan a los poderes dominantes, el pensar que como representan a los poderes fácticos de la Argentina, eso les da- aun siendo minoría-, la capacidad de imponer como impusieron históricamente en este país su criterio esos poderes fácticos.
Y en ese punto evidentemente están equivocados. Están equivocados porque es verdad que durante el 2015 al 2019, tuvieron el apoyo de esos grupos poderosos. Pero con el apoyo de esos grupos poderosos: desde la Sociedad Rural hasta las grandes cámaras empresarias poderosas, pasando por los grandes medios de comunicación más la Embajada Norteamericana, más el FMI que les financió al final, en la debacle, al señor Macri ese préstamo que nos terminó de hundir y ahora estamos saliendo. Con todo ese apoyo, se chocaron contra algo que no pudieron resolver que fue la voluntad de un pueblo que persistentemente, que mansamente salió a la calle, juntó multitudes, trató de buscar la forma de parar la hambruna. Trató de buscar la manera de parar ésta entrega, que hizo que la Argentina se convirtiera en el paraíso de la bicicleta financiera. Campeones mundiales de la fuga de capitales. Los argentinos somos hoy famosos porque
llenamos como nadie en el mundo las guaridas fiscales. Sin embargo, todo ese poder no les sirvió para parar lo que por la voluntad del pueblo cedió hace apenas diez-once meses: fueron derrotados en las urnas.
Y fueron derrotados en las urnas no por un capricho. Podrían haber ganado una nueva elección tranquilamente como lo han hecho la mayoría de los gobiernos en su primer mandato. Fueron derrotados en las urnas porque hambrearon al pueblo. Porque reprimieron al pueblo. Porque se mofaron del Congreso. Cuando se votó la ley de antidespidos el presidente (Macri) hizo un bollito y la tiró al tacho de la basura. Asumieron la deuda sin pasar por el Congreso. Generaron la mayor cantidad de decretos de necesidad y urgencia que se hayan conocido en un período presidencial. Se rieron en la cara de los organismos de derechos humanos. Se mofaron de la causa de los más pobres. No le dieron paritaria a los docentes que era ley. No cumplieron la Ley de Financiamiento Educativo. Le negaron a los jubilados derechos adquiridos porque se les ocurrió. Y cuando salieron a protestar, desde acá, desde el lado de adentro de las vallas, practicaban tiro al blanco con la gente que manifestaba. Todo eso no queda impune, y no alcanza con ser representantes de la clase dominante para tener mayoría de prepo. ¡No señor. La mayoría la logró el pueblo!
Hoy tenemos cinco bloques. Cuatro acordaron seguir sesionando y uno que son ustedes, los dueños de la república, los dueños de las leyes, los dueños del reglamentarismo, viene a decir que no. Viene a imponer que no. Viene a montar éste circo, éste aparataje indigno de nuestro pueblo, sufriendo como está sufriendo ahora, simplemente para decir: ‘nosotros somos los dueños de lo que pase acá’. Y lo dijo bien el compañero Leo Grosso: ‘todo esto lo hacen porque saben que vamos a discutir leyes trascendentes’.
Le quieren evitar a quien ahora está disfrutando en Europa de sus largas vacaciones tener que rendir cuentas ante la justicia de los desastres que se hicieron en éste país.
Les quieren evitar a los millonarios de éste país tener que ceder una gotita mínima en un aporte solidario para los que están más dolidos.
Quieren cuidarles las espaldas a los sectores dominantes y se enervan porque se declaró la conectividad un derecho público.
No basta con ser representantes de los poderosos para imponer la mayoría de prepo. Para venir a gritar. Y no es coraje venir acá a sesionar sin barbijo. Eso no es coraje. Coraje es enfrentar a los poderosos para favorecer a un pueblo. Coraje es gobernar para las mayorías. Coraje es no mentir. Porque hay que tener coraje para no mentir después del desastre que ustedes convalidaron.
Vienen acá a decir que éste es el país donde hay más números de muertos. ¡Mentira! La OIT, la Confederación Sindical de Trabajadores, los gobiernos de todo el mundo reconocen el esfuerzo que está haciendo la Argentina. ¡Leen los títulos de Clarín y los repiten como loros! ¡Dan vergüenza ajena! Lean el artículo entero de Clarín porque casi siempre en el quinto o en el sexto párrafo tienen que reconocer que éste es el país que ha tenido el menor número de muertos.
Dicen que le tenemos miedo a las marchas. ¡¿A qué le llaman marchas?! ¡¿A eso que hubo hoy en la puerta del Congreso?! ¡¿Eso es una marcha del pueblo?! ¡¿Esa es manifestación de mayorías populares?! La manifestación de mayorías populares las van a ver cuando salidos de la pandemia podamos abrazarnos en la calle y abrazar éste Congreso para defenderlo del
autoritarismo de ustedes, que siendo minoría quieren imponer la regla del juego de los poderosos.
No les tenemos miedo. El pueblo argentino luchó durante muchos años contra los abuelos de ustedes para recuperar la democracia. El pueblo argentino luchó durante cuatro años para terminar con el gobierno de ricos para ricos.
Y no nos importa que vengan a hablar acá con la prepotencia y el autoritarismo de los comisarios de la clase dominante. Nosotros sabemos que es lo que tenemos que defender. Tenemos que defender el derecho de nuestro pueblo, de nuestros jubilados. Tenemos que defender a los maestros y las maestras que hoy se están contagiando para repartir bolsones de comida porque ustedes dejaron el hambre por todos lados. Tenemos que defender a los médicos, a los enfermeros, que están poniendo el cuerpo y que están desesperados en ésta lucha desigual. Y tenemos que defender también el derecho de os argentinos a la esperanza.
Por eso queremos votar leyes que le sirvan al pueblo. La ley del turismo, la ley de la protección de la pesca, la ley para que haya un aporte solidario. Queremos un país en el que puedan vivir todos. No solamente esos opulentos en nombre de los cuales ustedes hablan, dándoles la espalda muchos de ustedes, a la tradición política de los partidos en los que alguna vez estuvieron.
Por eso lo que pedimos en nombre de todos los trabajadores. En nombre de los trabajadores del Congreso. Hoy los cuatro sindicatos el Congreso condenaron la actitud de ustedes. No vamos a decir cuántos enfermos hay. No vamos a decir cuántos murieron de los empleados del Congreso, pero ustedes lo saben igual que nosotros. Entonces lo que le pedimos es un mínimo de honestidad. Un mínimo de decencia. ¡Formaron parte de un gobierno que hambreó a nuestro pueblo en tiempo record!¡Que lo dejó endeudado! ¡Que lo destruyó. No quedó pequeña ni mediana empresa en pie!¡Mínimamente permitan que éste Gobierno que quiere sacar el país adelante tenga la posibilidad de hacerlo y sino el pueblo se va a encargar de que esa posibilidad exista!