Censo 2022: ventajas y desafíos del primer censo digital
Por Carolina Regalía
El censo 2022 tendrá lugar el miércoles 18 de mayo de forma presencial. Luego de postergar el censo 2020 durante dos años por motivo de la pandemia de COVID-19, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) ha decidido realizar el Censo Nacional de la década tras dos pruebas piloto. Esta no es la primera ocasión en que el Censo no se realiza en la fecha prevista, es decir, cada 10 años, como recomienda la División de Estadísticas de las Naciones Unidas. Los censos de 1991 y 2001 también debieron retrasarse un año por cuestiones coyunturales dadas por la emergencia financiera y las restricciones presupuestarias.
La novedad principal de este censo es su realización en dos fases. Primero, desde el 16 de marzo se podrá completar el Censo Digital que consta de una encuesta autoadministrada por internet. Para rellenarlo, el INDEC estima 20 minutos en el caso de un hogar unipersonal y aproximadamente 12 minutos adicionales (por persona) para hogares con más miembros. En segunda instancia, quienes no elijan esta modalidad por motivos de conectividad o preferencia recibirán la visita de los censistas acreditados el día del censo, que por otra parte será feriado nacional. Se estima que más de 600 mil personas desarrollan esta tarea, cuyo rol es fundamental para la correcta realización del trabajo de campo y el reaseguro de que las preguntas sean respondidas con sinceridad.
Es la primera vez que el Censo se realiza por internet. Esto presenta algunos desafíos: primero, la población debe ser capaz de interpretar adecuadamente las 61 preguntas y saber responderlas. De éstas, 24 son sobre la vivienda y 37 sobre sus habitantes. Asimismo, se incorporan las preguntas de autorreconocimiento étnico e identidad de género autopercibida.
El INDEC facilitó una guía de ayuda para responder al Censo Digital donde aclara los enunciados de cada pregunta y las opciones de respuesta. Esto soluciona en alguna medida la falta de un censista para clarificar las dudas. Segundo, al ser una encuesta autoadministrada no puede recabarse información complementaria de la vivienda y de la población a través de la observación y el desarrollo mismo de la encuesta cara a cara. Por otro lado, entre las ventajas del Censo digital se halla la llegada a áreas aisladas y personas difíciles de localizar, como las zonas rurales. Además, permite rellenar el cuestionario cuando la persona elija, pudiendo completarlo en diferentes momentos transmitiendo el sentimiento de mayor privacidad y anonimato de las respuestas.
Los datos obtenidos de este Censo nos permitirán obtener datos demográficos precisos sobre todos los argentinos y argentinas. A partir de ello podremos conocer cuántos somos y cómo estamos distribuidos, tanto territorialmente como estructuralmente. Además, se destacan los próximos resultados sobre el acceso a internet de las viviendas. Toda la información recabada orientará el presupuesto y las políticas públicas de los siguientes 10 años. Por lo tanto, no queda más que celebrar esta decisión e incentivar a todos y todas a participar.