Talleres clandestinos: las marcas de ropa, en el banquillo de los acusados

Por Enrique de la Calle

APU: ¿Cuáles son las causas que hay en la Justicia en relación a grandes marcas de ropa y su responsabilidad en la contratación de talleres clandestinos?

Lucas Schaerer: Es extensa la respuesta, porque hay muchas causas aunque no se sepa mucho. Hay 117 marcas de ropa denunciadas en la Justicia Federal. Te cito algunos casos emblemáticos. El modisto Benito Fernández fue denunciado por la Alameda por talleres clandestinos. Esto cayó en un juzgado de Quilmes. La alta costura, que te vende un vestido a 30 mil pesos, contrata trabajo esclavo. Las marcas que te venden en los shoppings, también. La Salada o la Saladita, que autoriza Mauricio Macri en Capital, tienen el mismo método.

APU: ¿Por qué son causas que se tramitan en la Justicia federal?

LS: Violan distintas leyes. Por un lado, la de trata de personas, de 2008. Después se viola la ley del inmigrante, esto es dar trabajo a una persona que no está documentada. Esto pasa mucho en los talleres con migrantes bolivianos. Y por último, la ley de trabajo a domicilio que dice que cualquier empresa que terceriza su producción es responsable de las condiciones de esos trabajadores. Esa ley es clave, es muy importante y se conoce poco. Las grandes marcas suelen decir que no saben que esos talleres que contratan tienen trabajo esclavo. Eso es falso.

APU: ¿Cuál es la respuesta de la Justicia?

LS: Muchas veces los juzgados cortan esa ley de trabajo a domicilio. Dejan la responsabilidad en los talleristas, en los capataces, que generalmente son miembros de la propia comunidad migrante. Ellos hacen el trabajo sucio. Pero ellos trabajan para una gran marca. Son responsables, pero no los únicos. Ahora se independizaron con La Salada y la Saladita. Crearon su propia marca y la venden en el mercado. Los grandes empresarios dicen que se viola la ley de marca, no que se viola la ley de trabajo a domicilio u otras leyes más graves.

APU: Habló de otras causas...

LS: El Juez Oyarbide, salvado en el Consejo de la Magistratura por el kirchnerismo y otras fuerzas políticas, fue el primer juez que salvó a una gran marca de ropa, a Soho. Eso fue en 2007. Hizo algo muy grave: argumentó que la explotación en talleres no tenía que ver con los dueños de Soho (ahora Soho es una cooperativa) sino que era una costumbre propia de la comunidad boliviana. La primera causa que inicio La Alameda tenía que ver con talleres que trabajaban con Montagne y Rusty. El juez dejó afuera a las empresas y condenó a los talleristas. Te doy otro caso: Narrow tiene un taller esclavo en Parque Chacabuco. El juez Lijo incluyó a la marca y procesó al empresario. El juicio está en marcha.

APU: La marca de ropa Zara tiene causas en varios países, ¿no?

LS: Así es, en Argentina, en Brasil y en varios países más. En España también. Es la segunda marca de ropa más importante del planeta. Es un gigante a nivel mundial. En Argentina todavía la causa no concluyó pero por ahora la Justicia entiende que la marca está involucrada.

APU: Siempre se habla de la empresaria Juliana Awada, mujer de Mauricio Macri, cuando se consideran casos de explotación laboral.

LS: En esa causa está Kosiuko, Portsaid, Como quieras que te quiera y Cheeky, que es la marca que más factura en ropa para nenes. Cheeky era propiedad de Daniel Awada cuando se descubrieron los talleres esclavos en Mataderos. Daniel es el cuñado de Macri. Esta causa empieza en 2007. La jueza en primera instancia le salvó las papas a los empresarios. En Cámara pasó lo mismo. Ahora vamos a apelar en Casación. Ahora desde 2012 hay otra causa contra Cheeky por otro taller en Mataderos. Igualmente, en ese caso tampoco la Justicia avanzó.

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