A un año del asesinato de Nehuen Rodríguez, víctima de la policía metropolitana

Por Santiago Asorey

“Esto no es un homicidio culposo, esto es un asesinato”, con esas palabras, explicó la madre de Nehuen el destino fatal de su hijo. Nehuen fue embestido por una camioneta Ford Ranger de la Policía Metropolitana hace exactamente un año. El 15 de diciembre del 2014 fue asesinado en la esquina de Brandsen y Carillo en el barrio de la Boca. Había terminado el secundario unos días antes. Tenía pensado seguir estudiando. Quería seguir la carrera de Seguridad e Higiene. Le gustaba jugar al futbol. Había jugado en las inferiores de Huracán.

La causa lleva su curso en el Juzgado Criminal de Instrucción N° 4 de la Ciudad y la Fiscalía de Instrucción en lo Criminal N° 23. Daniel Castgnasso, el oficial imputado por su asesinato no se encuentra con prisión preventiva, sigue trabajando en la fuerza de seguridad porteña.

Cuando ocurrió el hecho la multisectorial “La Boca resiste y propone” emitió un comunicado denunciando que “el patrullero de la Policía Metropolitana venía a 100 km/h y que no traía sirenas ni luces”. En el desarrollo de la causa la querella presentó testigos que contradijeron la declaración del acompañante del vehículo, el subinspector José Daniel Barba. El agente habría intentado desligar responsabilidades declarando que “tenían las balizas y las sirenas encendidas”. Sin embargo, el único testigo presencial desmintió haber escuchado sirenas, ni visto balizas.

El caso de Nehuen Rodríguez fue un antecedente al intento de asesinato de Lucas Cabello (20) a manos del efectivo metropolitano, Ricardo Ayala. Pero no fue el primer caso de la fuerza de seguridad metropolitana. Bruno German Pappa (26) fue asesinado en septiembre del 2011. El joven fue rematado por el agente metropolitano, Enzo Fabián Álvarez, cuando estaba en el piso en estado de indefensión. Álvarez fue condenado a cadena perpetua por “homicidio agravado” en esa misma causa. Su caso fue el primer caso de gatillo fácil de la fuerza porteña que llegó a un juicio oral y público.

El CELS (Centro de Estudios Legales y Sociales) publicó hace unos meses un informe en el cual se remarca que “desde su creación en 2010, la Policía Metropolitana ha sido responsable de al menos 28 casos de uso de la fuerza letal. Entre ellos, al menos 6 fueron ejecuciones. En estas situaciones han muerto: Rose Marie Chuña y Bernardo Salguero en la represión del Parque Indoamericano, Bruno Pappa, Ezequiel Liri Foppiano, Roberto Autero y Carlos Calizza. Como consecuencia de las intervenciones violentas de esta fuerza, al menos 111 personas resultaron heridas. En algunos casos, como lo ocurrido ayer con Lucas Cabello, estas heridas son de gravedad y tienen consecuencias perdurables en la vida de las personas.”