Bailar para olvidar

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Bailar para olvidar

10 Febrero 2019

Por Lau Larrea

Es domingo y llueve mucho, pero es una de esas tormentas de verano en las que hace calor y está todo pegajoso. Ganó River y escucho los bocinazos y gritos.  El pulmón de manzana es abierto, da a Corrientes y Medrano. Llego perfecto a todos lados pero qué mierda el ruido. Sin que te des cuenta, esas cosas hacen que vayas perdiendo calidad de vida.

Más allá del chiste hippie, realmente irse cada tanto de campamento –a la naturaleza– es una forma de airear la cabeza y contrarrestar la locura.

De alguna manera el disco Hambre es eso, otra forma de darle poesía al momento y escapar a la locura.

Un llamado “...al sur, al sur...” grita Eté, "...un pie delante del otro / nadie nos dijo que iba a ser fácil (...) antes de la luz, después de la luz...", susurra en fade out.

Un rock que dice "...es tan fácil / dejar que las cosas caigan solamente...", aunque creo que a veces eso tiene su costo.

Suena el tema "Leine" y desde los primeros acordes pienso en "Cactus" de Cerati (Fuerza natural, 2009). "El río la va a llevar / Ropa blanca ..." y pienso en "Fina ropa blanca" del disco de Spinetta, Don lucero (1989).

"... Al final será el hambre/ que nos ponga de pie...",  manifiesta de forma contundente en el tema que da nombre al disco.

Lo sigue un tema muy Fito Páez en el comienzo, “... es que si vos cambias …” y esa primera melodía, pero que hermoso que suena. Acá ya fundó la nueva ciudad y ahora la refundó, otra vez una nueva ciudad.

"Mar del tiempo", 1.21 gigawatts con Tussi (cantante de La Hermana Menor) a los gritos.

"... hay algo mágico cuando te ves así ..." corea el tema "Ascensor".

Esa cuerda de tambores que se va. "Tiramos montañas de cosas ¿ahora qué tiramos? ..." punkie rock "... todo se puede romper / todo se rompe ya ves."

Arranca "Bailamos", una guitarra  invita al arrime: árbol, naturaleza, eucaliptus, mar, montaña, río, fogata.

"Y vos que linda estas / igual vos no me miras / igual que linda estas (...) Bailar para olvidar ..." así hasta el infinito y cada vez con más fuerza que sale del pecho.

Una vez me dijeron que los discos de Eté eran banda de sonido de separaciones, entonces lo probé y funcionó. Hoy creo que Eté es la banda de sonido de quienes estamos regresando a casa, a nosotra/os misma/os.

 

El disco completo se puede escuchar en: https://open.spotify.com/album/1fWbfvw3T8HCgmOm3l8oEy