Bojack Horseman: un retrato de los problemas del ser
Por Agustín Mina
Bojack Horseman es una serie animada original de Netflix creada por Raphael Bob-Waksberg. Por el momento cuenta con 5 temporadas de 12 capítulos cada una, con una duración de 25 minutos por capítulo. La serie nos invita a acompañar a sus personajes en un viaje de introspección del que quizá no salgan (elles ni nosotres) en una pieza.
Pesa un gran prejuicio sobre las series animadas. Uno que dicta qué son para niñes, que cuando mucho pueden ser comedias, pero nunca un producto serio, profundo, que toque temas delicados, que tenga una trama y personajes interesantes y todo lo que se sabe que si puede ser una serie “normal”. Para desarmar ese ridículo prejuicio no hay mejor ejemplo que Bojack Horseman.
En la serie seguimos la vida de un grupo de personajes. De a poco vamos viendo cómo se conectan entre elles, vamos a ir conociendo más sobre sus vidas, sus personalidades, sus problemas, lo que les pasa, en fin, los vamos a ir conociendo. Y es de esto que trata la serie, sobre la vida de estos personajes, un circulo donde si bien Bojack es el protagonista indiscutido todes son desarrollados en profundidad, tienen sus momentos, sus problemas y sus arcos argumentales propios.
La mayor parte de la acción transcurre en un Hollywood alternativo y colorido en el que la mayoría de personajes son lo que se llama antropomórficos, es decir, animales que se ven o actúan como personas. Nuestro protagonista, Bojack Horseman, es un caballo, por ejemplo, además de ser un actor que supo ser muy famoso en los 90 cuando protagonizó una sitcom de mucho éxito: Horsin Around. El primer capítulo de la serie nos sitúa en el presente de esta estrella estrellada.
Bojack vivió hasta ahora con la plata que hizo con Horsin Around, sin haber vuelto a trabajar un solo día de su vida, lo que le permitió dedicarse a la bebida y a sentir pena por sí mismo. Una entrevista en la que le preguntan por sus “otros” trabajos lo hace darse cuenta que no ha hecho nada con su vida, que la gente lo va a olvidar, que ya no es tan conocido o famoso como lo fue alguna vez y que, por otro lado, no quiere ser recordado solamente como el caballo de Horsin Around, quiere algo más para él, para su legado. Esta toma de consciencia por su parte es lo que da el puntapié inicial para que todo en la trama comience a desarrollarse. A lo largo de los capítulos se irán conociendo los diferentes problemas que atraviesan a Bojack y sus amigues, así como irán apareciendo nuevos; conoceremos a fondo sus vidas, así como los delicados e interesantes temas que la serie toca y sobre los cuales problematiza, de manera espectacular, tales como la depresión, la identidad sexual, la familia, el aborto, la sociedad y el machismo, entre otros.
Es justamente por esto que quizá a algunes les cuesta engancharse al principio. Al tratarse de una serie sobre la vida de un grupo de personajes se tiene sí o sí qué empatizar con esos personajes, sus problemas y sus historias, tienen que interesarse por lo qué les pasa, como lo viven, cómo lo resuelven, etc. Para esto se necesita tiempo. Tiempo para que la serie desarrolle a estos personajes, pero tiempo también para que el espectador conecte con ellos, lo que es vital para poder disfrutarla.
En cuanto al género, encasillarla solo en uno es imposible. Es tan cómica como dramática y de hecho parte de su magia es que hace reír tanto como llorar y en ocasiones las dos al mismo tiempo o de forma encadena por lo que acaba siendo toda una montaña rusa de emociones.
El punto fuerte de la serie son los dramas existenciales que toca y que nos atraviesan a todes haciendo que sea muy fácil identificarse con la lucha por salir adelante y ser mejores qué es la vida de cada uno de estos personajes. ¿Quién no quiere ser recordado cuando muera? ¿Quién no quiere llegar a ser alguien importante en su trabajo? ¿Quién no se frustró o está frustrado ahora porque no sabe qué hacer con su vida? todos estos temas (y muchos más) aparecen en la serie encarnados por personajes increíbles que lo llevan de manera extraordinaria.
Uno de los puntos que, en mi opinión personal, merecen más reconocimiento de toda la serie es el cómo maneja los temas tan delicados, sensibles (y en ocasiones de los que se habla poco o nada) que aparecen a lo largo de sus temporadas. Bojack hace uno de los retratos más acertados de la depresión que se hayan visto, por ejemplo. Toca temas como la exploración y cuestionamiento de la propia sexualidad, el feminismo también está muy presente (más fuertemente en la última temporada), el aborto, el tener una familia, el hacerse un lugar como mujer en el mundo de los negocios, históricamente dominado por hombres, los dramas familiares, los traumas de la niñez, todos esos temas están presentes, tratados con la profundidad y seriedad que se merecen. Lo mejor, y lo más importante de todo esto, es que asistimos a ello desde un lugar informado, la gente detrás de la serie hizo su tarea, sabe de lo que habla y nos lo muestra ya que habla de estos temas sin caer en los típicos estereotipos, clichés o lugares comunes que históricamente se han reproducido y qué tanto daño hacen y han hecho al mundo.
Por otro lado, la serie es una experiencia muy personal, los hará sentir cosas que variarán de persona a persona dependiendo de cómo los toque cada tema personalmente y con qué personajes acaben conectando más.
Dicho esto, la serie tiene también un humor muy particular. Hace uso y abuso de lo que se llaman “Puns” que serían chistes con juegos de palabras. Juega mucho con el hecho de que muchos de sus personajes sean animales, en relación a cómo viven, de qué trabajan o incluso con sus rasgos de personalidad, es muy inteligente y hasta muy rebuscado en este sentido, con chistes o referencias que une tiene que rastrear. La serie también juega mucho a hacer humor con cosas a las que une normalmente no presta atención, cómo los carteles, afiches y demás que forman parte del “decorado” de toda la serie, por lo que hay muchos chistes que encontrar, como si fuera un libro de dónde está Wally.
Una justa advertencia para quienes vayan a aventurarse a ver la serie es que al tratar temas tan diversos y todos tan fuertes es muy probable que alguno los atraviese, lo mismo con el elenco de personajes, todes con una historia y un conjunto de problemas particular. La idea es justamente esa, que se sientan identificades por haberse sentido así o porque les haya pasado (o les esté pasando/se estén sintiendo) cómo alguno de sus personajes. Incluso puede que encuentren una lección o dos que aprender, de lo que no hay que hacer, del viejo Bojack.
Basta de Zonceras por Radio Caput. Seamos series: Bojack Horseman