Indio Solari: primer artista argentino que se sube a un escenario como holograma
Por Rodrigo Lugones
El sábado 7 de marzo y el domingo 8, Los Fundamentalistas del Aire Acondicionado volvieron a presentarse en el Microestadio Malvinas Argentinas, ubicado en La Paternal. Allí desplegaron una batería de hits ricoteros, mezclados con altas dosis de clásicos de la discografía solista del Indio Solari.
Como era de esperarse, Solari apareció en las pantallas para interpretar dos clásicos ricoteros: el sábado, el rock and roll pesado de “Lobo suelto, cordero atado”, “Susanita”, y el domingo la joya “Salando las heridas”, del disco de 1991, “La mosca y la sopa”.
Hasta acá, todo lo que uno puede esperar de un show de Los Fundamentalistas, sin la presencia física del Indio: Grandes canciones, power rock and roll, sonido de alta definición, una banda ajustada y una micro recreación de los escenarios que se supieron vivir en las “misas ricoteras”.
Sin embargo el Indio Solari decidió presentar 4 canciones de su último disco “El ruiseñor, el amor y la muerte” (dos el sábado - “Pinturas de guerra” y “La moda no es vanguardia” - y dos el domingo - “La oscuridad” y “El callejón de los milagros” -). El dato es que, en un hecho inédito para la música argentina, esas dos canciones fueron cantadas por el propio Indio Solari, quién apareció en el centro del escenario bajo la forma de un holograma. Rompiendo así dos records (el primer músico argentino en presentarse como un holograma en un show nacional, y el primer artista vivo que elije ese formato para aparecer en escena).
“Se grabó en Luzbola (el estudio del Indio) en dos jornadas en la primera quincena de febrero. En total fueron seis temas. Dos para pantalla y cuatro para holograma. Se iluminó bien y se filmó en 4k con un fondo negro. Estaba muy bien de la voz. Las canciones del último disco sonaban como la grabación. Cantó excelente”, le dijo a Filo.News el fotógrafo personal del Indio Solari, Edgardo Andrés Kevorkian (KVK Fotos), quien trabajó junto a Matías Mera en la creación del holograma.
El efecto impactante, que en la primera jornada provocó cierta confusión (muchos pensaron que era el mismísimo Indio, en vivo y en directo el que estaba cantando), quedó registrado en miles de videos que filmaron los fans desde el campo que está ubicado en las afueras del microestadio, espacio donde tuvo lugar el show.
Se utilizaron 3 proyectores y un tratamiento de la luz que tuvo que tener en cuenta los ciclos lunares, para poder calcular la manera en que la proyección holográfica iba a poder percibirse desde el punto de vista del público. Un trabajo impecable.
Las canciones cargadas de efectos, arreglos y reminiscencias cyberpunk se vieron envueltas por un halo ci-fi en el marco de éste holograma que recordaba a la famosa escena de “A New Hope”, la primera entrega de la saga “Star Wars”, en la que Luke Skylwalker se encuentra reparando a C-3PO, mientras que Obi-Wan Kenobi, quien está sentado al lado de Luke, activa una proyección holográfica que lleva R2-D2 de la princesa Leia quién le pide ayuda y le recuerda que es “su única esperanza”.
Tal vez la tecnología holográfica sea “la última esperanza” de poder ver al Indio arriba de un escenario… o tal vez no.