Luz Martin: “Cualquier canción a la que uno le puso corazón y cabeza no es nada si no hay un receptor”

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    Luz Martin
    Foto: Nora Lezano
APU ENTREVISTAS

Luz Martin: “Cualquier canción a la que uno le puso corazón y cabeza no es nada si no hay un receptor”

13 Octubre 2024

La cantante Luz Martin conversó con AGENCIA PACO URONDO sobre su nuevo material, el EP Triste y feliz, con el que empieza a desandar su camino dentro del rock.

Agencia Paco Urondo: El video de “Plural” ya se puede ver en YouTube y fue grabado en Capilla del Señor de manera análoga ¿Cómo fue que optaron por esa idea?

Luz Martin: Estaba buscando director, no encontraba uno para el videoclip y apareció Guido Barbosch que escuchó el tema y me propuso hacerlo en súper 8, de la nada. Me encantó porque él no sabía el background medio retro que tengo, que ya venía planteando con mi imagen. Supe que era por ahí y me metí de lleno a grabar algo que recién iba a ver en el primer corte de edición.

APU: ¿Cómo en alguien tan joven se da ese vínculo con lo retro?

L.M.: La adolescencia de mis papás fue durante los 80, traigo cosas que escuché en casa siempre. Es parte de la música con la que crecí, ellos jamás dejaron de escuchar esas canciones, a lo sumo yo escuchaba más 2.000, pero siempre me gustó el pop y el rock, cosas como el glam rock y ese estilo más ochentoso, Van Halen, Guns and Roses. Trato de hacer una fusión entre todo eso que suena y generalmente son canciones que vienen, aparecen y tienen ese toque.

APU: ¿Qué artista podés mencionar de los que escuchabas en tu casa y que después llevaste a tu música?

L.M.: Mucho Sting, A-ha, Erasure y Pet Shop Boys un montón, si bien es más 90, 2000, pero tiene unas cositas más bailable, de sintetizador. El objetivo, básicamente, es mostrarlas a las nuevas generaciones y decirles “mirá estos sonidos, si te gustan, así sonaba la música en la década del ´70, del ´80”. Traer un poquito esas cosas de nuevo al presente.

APU: ¿Y cómo recibe esa resonancia el público que te sigue?

L.M.: No sé. Por ejemplo, mi papá me dijo “se parece a Man Ray” y me encantó. Mis amigos lo vieron más parecido a Garbage, por momentos, y les resuena más Miranda!, más que nada en “Plural”.

APU: Elegir un tema para empezar a mostrar material es toda una decisión; son cuatro que van a ser parte del EP Triste y feliz, una ambigüedad interesante que plantea el título ¿Por qué elegiste “Plural” para que sea tu carta de presentación?

L.M.: Es el tema que caminó solo desde el principio. Aparecieron palabras en mi cabeza, melodías, fue tomando forma y hubo mucho trabajo, porque cuando el tema se compone solo, después pasarlo a producción significó muchas vueltas porque para mí era “el tema”. Decidí que fuera la carta de presentación porque, más allá de que cuenta una historia personal mía, era el que más representaba el punch que va a tener el disco. “Plural” me pareció el más poguero, el que la gente se lo queda cantando, que representa un montón de cosas. Escuchás la melodía sin la letra y es un tema recontra pop, divertido, y escuchás la letra y decís son dos cosas completamente distintas. Me gustaba ese juego.

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APU: Es una apuesta fuerte para dejarte manija con lo que viene, debe ser lindo como artista que empiecen a reclamarte cuándo sale la otra parte porque lo que les mostraste ya los dejó encantados.

L.M.: Está bueno ver eso. La repercusión que tuvo “Plural” en Spotify es un montón, no tenía idea que iba a subir tanto, se disparó como algoritmo. Para ser un primer lanzamiento es reimportante y me dieron ganas de sacar otro ya y hay que frenar la manija. Me mostraban los gráficos de Spotify que lo estaban escuchando en España casi la misma cantidad de personas que en Argentina. Y está bueno, eso, ir entendiendo al público y jugar con la expectativa desde ese lado.

APU: ¿Tenés alguna preferencia a la hora de componer?

L.M.: No tengo un método único, hay muchos. Me está pasando últimamente que a la noche, antes de dormirme, me cae una melodía a la cabeza empiezan y me tengo que levantar a escribirla porque no la puedo perder. Y me levanto a la 1 de la mañana, me vengo al estudio y canto en el micrófono del teléfono. Al día siguiente la agarro, pero siento que hay un momento donde viene la canción y si la volvés a agarrar más tarde no es lo mismo, ese es su momento donde brilla mucho.

Por eso, cuando me agarra antes de dormir, digo “ay, Dios, ahora voy a estar una hora sin dormir terminando de anotar”. Después me pasa mucho que tengo esa necesidad, cuando no compongo por un mes y necesito hacer algo.

APU: Pensaba en ese momento del ensueño y su juego, si eso que vas a escribir es parte de un sueño o algo que quedó reverberando de lo que viviste, de lo real.

L.M.: Está bueno, no sé si es ensueño o realidad, creo que es un limbo y creo que es un lugar curioso, porque uno no sabe nunca qué va a pasar, no te pusiste a pensar, de repente aparecieron, no sabés de dónde vienen, nada. Termino despertándome, igual, pero la idea principal cayó en ese momento.

APU: García siempre dijo “yo tengo solo una pobre antena” para ejemplificar ese estar receptivo a las cosas que suceden y tener esa posibilidad de poner de de contarlas de manera poética.

L.M.: Hay una canción que hice hace poco que tiene que ver con la cantidad de gente que se estuvo yendo del país, de amigos que tengo que emigran. Como que dije voy a escribir una canción sobre esto, algo que a muchas personas les pasa.

APU: ¿Cómo empezaste con el canto, a educar la voz?

L.M.: Desde pequeña siempre canté. El primer regalo de Navidad fue un micrófono chiquitito, como si fuera de juguete. Desde ahí, siempre hacía shows con mi familia, con mis bailes, mis cantos. Estudié, hice canto coral y nunca me despegué. Era yo la que cantaba en todos lados, en el colegio, en la Facultad. Tuve bandas desde la secundaria. Siempre canté desde la intuición, no hice tanta clase de canto, lo mismo con el oído musical. Sé muy poco de teoría musical, el disco se llama Triste y feliz y es una alegoría a cómo compongo, me guío por las notas. No sé mucho de escalas, ni qué viene después de qué y qué nota es tensionante, pero sé que es tensionante, sé que hay una que es más feliz, sé que hay una que tiene que venir a resolver, otra que es triste, entonces me manejo así, como puedo con mi oído.

APU: ¿Qué referencias tenés en el canto?

L.M.: Trato de no tener a alguien a quien apuntar en cómo cantar. Obviamente, me encantaría poder hacerlo como Whitney Houston, pero no es un estilo que esté haciendo. Siento que estoy cantando como me sale, me focalizo más en la interpretación a la hora de grabar y de que se vea en la voz los colores que tienen que tener cada momento de la canción y no tanto en un ideal.

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Luz Martin en vivo

APU: ¿Costó soltar “Plural”? En el sentido de entregarlo a la gente.

L.M.: Lo disfruté un montón. Cualquier canción, cuadro, obra de arte al que uno le puso corazón y cabeza no es nada si no hay un receptor. Ya estaba necesitando que la gente lo escuche para que nazca, es mi objetivo hacer canciones para que se escuchen. Me pasó que cuando la saqué, una amiga me escribió diciéndome se trata de esto y esto otro y me pasa a mí con estas cosas. Ya cuando alguien interpretó y entendió el mensaje, ya está. No me costó soltarlo porque, en realidad, no siento que lo solté, es como un hijito que está aprendiendo a caminar y ya está casi corriendo.

APU: ¿Las otras tres canciones que componen Triste y feliz son de la misma época o de tiempos diferentes?

L.M.: “A donde quieras ir” la empecé a componer en 2015 y fue mutando. Luego de hacer “Plural” vino ésta, que reciclé. Todo lo que vino después fue cronológico. Los primeros cuatro que compuse van a estar en el EP y compuse tres más que quedaron afuera porque no los llegaba a grabar. En vivo hago más canciones (risas).

APU: Ese espíritu de los 80 del que hablabas tiene componentes muy importantes ya que te acompaña Mario Serra, baterista de Virus y Charly García, y Nora Lezano en fotografía ¿Cómo llegas a trabajar con ellos?

L.M.: A Mario lo conocí en el estudio PPPerilla, que es de su yerno Pablo. Estábamos grabando con algunos integrantes de La Titanic (Zabaleta, Gringui [Herrera], [Fernando] Samalea y Abril Cantilo), fuimos a grabar los coros y ahí estaba Mario haciendo la percusión del tema que estaban preparando para Los salieris de Charly que sale por el sello de Lucía Serra, la hija de Mario. Pegué rebuena onda con Lucía y le dije que era fanática de Virus, pero mal, desde chica. Me presentó a su papá, lo saludé, me regalaron un libro, quedó rebuena onda y entonces me dijeron “la próxima grabación que hagas de tus cosas, venís y la hacemos acá”. Yo hice dos más dos y dije le voy a pedir a Mario que grabe las baterías de mi disco. Mario es la persona más humilde que vas a encontrar en el planeta Tierra, me dijo que sí y fue increíble.

A Nora la conocí en una fiesta de Jorge Drexler que fuimos con mi amiga Abril, estábamos en la fila y empezamos a charlar. También pegamos buena onda de la nada, después le escribí y le dije que me gustaría hacer las fotos con ella. Y las hicimos, las cosas se fueron dando cariñosamente, Nora es una persona muy amable, amorosa. Y sobre todo, talentosa. Estábamos haciendo la sesión y se fracturó el dedo chiquito del pie, encontró un trípode y siguió sacando las fotos igual. Los tengo muy en mi corazón, a los dos.

APU: Otra persona que está cerca tuyo y que también fue importante en este trabajo es Gafas Marín.

L.M.: Gafas fue muy importante para “Plural”, sobre todo porque cuando terminé de hacer el mix lo volví a escuchar varias veces y le faltaba algo. De repente, Abril me dice “hablá con Gafas, que él fue técnico en Circo Beat y te lo va a resolver”. Otra persona completamente amorosa, humilde, y le sumamos bastante más rock. Eso es lo que le faltaba a “Plural”. Un poquito la voz más adelante, unas guitarras que sumamos grabadas, que acompañaban el riff al principio. Gafas es otra persona que llevo en el “cora”.

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APU: ¿Estás pensando hacer una gran presentación de este EP, más algunas otras canciones?

L.M.: Sí, vamos a hacer. Tengo mi banda fija, somos una guitarra, bajo, teclados y una batería. La idea es hacer una fechita con todo para presentar el EP más a fin de año. Estamos ahí, viendo qué organizamos, pero sí va a haber un evento grande.

Ya hubo un evento para presentar el videoclip,también canté “A donde quieras ir” como adelanto, presenté a la banda. Fue más que nada una presentación de niña en sociedad.

APU: ¿Por qué sentís y creés que en este momento aparece “Plural”, el EP, estás dando notas a la prensa, entrando al mundo artístico que seguro te va a dar la bienvenida?

L.M.: Es una muy linda pregunta. Creo que siempre sentí que tenía que hacer esto, también creo que no me animé antes a hacerlo del todo, no sé por qué cosas. A veces lo charlo en terapia, bastante, creo que recién cuando tuve un poquito más de estabilidad, adulta, independiente, llegó el momento donde estaba en paz con un montón de cosas y coincidió con que Abril Cantilo, con quien hicimos teatro juntas, me dio un empujón.

Le comenté que quería volver a hacer mis canciones y me contesta “tengo una fecha la semana que viene que no la quiero hacer ¿querés ir vos?”. Y me empezó a empujar. Las puertas también se fueron abriendo gracias a que ella me contactó con un montón de gente que trabaja desde el corazón, de ver talento y querer ayudar. También hay que saber agarrar las oportunidades que uno tiene enfrente, porque uno siempre sueña cosas y por ahí el tren pasa, no te animás a subirte y hay que hacerlo.