Vicente López: homenajearon a alumnos desaparecidos en la Escuela Media N°6
Se llevó adelante un acto oficial en el ex Colegio Nacional de Vicente López –también conocido como Escuela Media N°6- para recordar a alumnos desaparecidos y asesinados por la última dictadura militar. Este año se colocaron placas con los nombres de las víctimas; y se rectificarán sus legajos para indicar el verdadero motivo de la ausencia a clase.
Los casos se sucedieron el 23 de octubre de 1976 y el 4 de julio de 1977. La última dictadura secuestró y asesinó a Eduardo Muñiz, María y Leonora Zimermann, Pablo Meijide -hijo de la ex ministra Graciela Fernández Meijide-, Liliana Caimi, que estaba embarazada, y Leticia Veraldi –en el año 77-. A Gerardo Szerzon lo habían asesinado en abril.
Durante más de cuarenta años las autoridades de la Escuela Media cerraron las puertas y desautorizaron el recuerdo de las y los estudiantes, lo que hace pensar que fue para no dejar en evidencia que la institución colaboró con la represión ilegal de sus propios alumnos. En las veredas se los recuerda hace años, con una baldosa por la memoria –que fue vandalizada y reparada- y, a su vez, en el profesorado que comparte edificio los familiares, organismos de Derechos Humanos y el sindicato SUTEBA sí podían llevar a cabo distintas acciones.
Sin embargo, la postura de las autoridades cambió, en parte debido a la voluntad de Alberto Sileoni, director General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, y de Gustavo Galli, director provincial de Educación Secundaria, y durante la semana se llevaron a cabo distintas acciones. El martes 25 de octubre la legisladora porteña Victoria Montenegro, apropiada y adoptada en forma ilegal, presentó su libro junto a Vera Jarach, madre de Plaza de Mayo, y a Adriana Taboada, ex alumna y referente de la Comisión Memoria Verdad y Justicia Zona Norte.
El viernes 28 Sileoni anunció que el acto era institucional, avalado por una política pública, por lo que las autoridades del establecimiento no debían eludirlo, y que se rectificarán los legajos de la escuela donde, hasta hoy, no figura lo que sucedió realmente con los y las estudiantes secundaríamos. Allí sólo se asentó que “quedaron” libres por ausencias o “abandonaron” sus estudios. También se descubrieron placas con sus nombres, colocadas en la entrada de diferentes aulas. A la noche el acto se replicó con alumnos y alumnas del profesorado y se recordó que, al presente, se sabe que al menos 27 ex alumnos de la escuela fueron secuestrados y asesinados por la dictadura.
*Nota publicada originalmente en Prensa Libre.